El Sexomnio es considerado un desorden sexual que muchos padecen (más los hombres que las mujeres) pero aún es un tema carente de investigación.

Este hecho es denominado de muchas formas: sexo dormido, Sexsomnia, sexo-sueño y el más acertado Sexambulismo, ya que una persona sonámbula es aquella capaz de realizar acciones dormida, como caminar y hablar. Sin embargo, su nombre termina en “somnio”, no por el insomnio, sino porque es un tipo de Parasomnia (suceso anormal durante el sueño).

En el año 2003 la Clínica del Sueño y Alerta del Toronto Western Hospital (Canadá) lo describió por primera vez como un comportamiento en ciertas personas que mientras duermen, efectúan actos sexuales tales como masturbarse, acariciarse, acariciar a otra persona o practicar coito; para el año 2005 en Estados Unidos, la Academia de Medicina del Sueño reconoció también el fenómeno del “sexo dormido”.

El Sexomnio es algo que muchas mujeres desearían que sus hombres tuvieran, para aprovechar sus momentos de sueños  y convertirlos en momentos de placer, pero para otras mujeres es molesto tener en cualquier momento de la noche a su pareja encima, buscándole el lado y llegar hasta el punto de roncar en cualquier momento del acto sexual.

Este caso demuestra que padecer de Sexomnio es un trastorno que puede traer muchos problemas con tu pareja y hasta legales, porque puede convertirse en una violación o acoso inconsciente.

Este hecho se presenta de diferentes formas: según un estudio presentado en el año 2007, las mujeres tienden a masturbarse y presentar gemidos sexuales y en los hombres a acariciarse e iniciar el acto sexual.  

Según un estudio realizado por la University Health Network de Toronto, en un grupo de 832 personas con algún desorden del sueño, se observó que alrededor del11% de los hombres y el 4% de las mujeres presenta este trastorno.

"Estamos sorprendidos sobre cuán común es. Pensamos que encontraríamos a pocas personas, pero fue en casi uno de cada doce pacientes", explicó la Doctora Sharon Chung, autora del estudio.

Las posibles consecuencias del trastorno serían:

·Daños psicológicos: culpa, vergüenza o en algunos casos depresión.

·Daños físicos: lesiones a la pareja, magulladuras en los genitales en caso de masturbación con fuerza, lesiones por parte de otros.

·Además este trastorno puede ser el primer síntoma de una enfermedad neurodegenerativa.

Si tú te identificas con estos síntomas y te ha dado pena expresarlo te invito para que visites sleepsex.org, un foro en internet que permite a los afectados expresarse y contar sus experiencias.

Por último, es muy importante que le cuentes a tu pareja lo que sucede para que te apoye y te entienda, así evitarás ir a un juicio por acoso. 

Por: katherine Jiménez.