Sabes lo que te excita realmente?

Conoces tus debilidades?

Y si las tienes, cada cuánto te gustaría revivirlas…

Sólo imagina si estás en tu cuarto, solita… que no estorbe nada, ni el móvil, ni la computadora encendida… nada.

Sólo un momento para ti, y para mi, mientras me lees…

Y una de tus manos con buena intención, empieza a estimularte… a masajear suavemente tus senos, apretándolos y soltándolos… apretándolos una vez más… y soltándolos… aún con tu ropa puesta, sientes que empieza a estorbar… mientras me sigues, el calor se hace un poco más fuerte… notas que tus senos están más duros… mucho más que antes… porque ahora te los tocas a gusto… cada que quieres… te vuelves más intensa en el toque… cada que quieres… te los manoseas…

Toma dos dedos y babéalos, tanto como puedas… y así húmedos, acaricia tus pezones con ligereza… que tu pezón esté entre tus dedos húmedos y babeados… rozándolo, frotándolo… calentándolo…

Vuelve a babear tus dedos… esta vez… para mojar tus senos… tus senos húmedos y babeados como si alguien los hubiese chupado con lujuria…

Y esto más si las combinas con los productos de una tienda del sexo.