Hola, mi nombre es Enrique casado desde hace 3 años, mi esposa es un mujer bella 1.60 m de estatura, delgada, morena, caderas no muy grandes pero con unos senos perfectos, redondos y firmes, también tiene un rostro angelical con una mirada excitante.
Nuca hemos tenido sexo con otras personas, incluso perdimos la virginidad juntos, pero juntos somos adictos al sexo, nos encanta probar nuevas posiciones y sensaciones somos muy buenos en eso.
Cuando cumplimos un año de casados decidimos probar algunas cosas nuevas, así que aunque la vergüenza nos invadía decidimos visitar un sexshop, empezamos a experimentar con retardantes, lubricantes, dildos, vibradores, etc. Lo disfrutamos mucho. No paso mucho para que la estantería de videos porno al fondo del local en el sexshop empezara a llamarme, la verdad era la sección que trataba de evitar, no sabía si a mi esposa le agradaría, después de varias visitas al local mi esposa al fin se dio cuenta como veía de reojo la sección de videos.
Esa misma noche, cuando jugueteábamos un poco con todo lo que compramos me indica al oído “vi como observabas el porno, ¿te gustaría que viéramos un par de videos?”, me excite y vez dije que sí y así lo hicimos buscamos algunos videos a través de internet, no sabía qué clase de videos le gustarían así que terminamos viendo: teens, milfs, interracial, etc. Y lo hicimos así durante varias ocasiones, no parecía provocarle mayor excitación el porno pero poco a poco con el tiempo note como los videos DP, bukkake y swingers provocaban que ella se humedeciera a chorros, eso me éxito mucho pero no me atrevía a consultarle nada del tema me encantaba ver como cada vez parecía provocarle mayor excitación a ella.
Al siguiente día cuando nos encontrábamos en la sala, decidí poner en la televisión un video de una chica con un pene en cada mano lamiendo y succionando cada uno a la vez turnándose entre uno y el otro eso parecía ponerla a 1000, empezó a pasarme por la cabeza la idea de verla entre miles de estímulos, placeres y sensaciones producidas por dos penes chocando y frotándose contra cada parte de su hermoso cuerpo y esa cara angelical inundada en un profundo placer con gestos que manifiestan tal excitación.
De pronto volví a la realidad, y con ella montando sobre mi pene le expuse si le gustaría que hiciéramos un trio hmh pero ella respondió que solo necesitaba del mío. Duramos meses teniendo sexo en compañía de excelentes video porno, pero cada que la penetraba y le ofrecía la idea de organizar un trio no parecía molestarle pero siempre respondía que no necesitaba de otro.
Llego nuestro aniversario de bodas, le compre un hermoso vestido negro que le tallaba muy bien y unos hermosos zapatos de tacón corrido color gena que hacen un bello contraste con el color de su piel, pues teníamos planeado una noche de disco solo para los dos para celebrar nuestro aniversario y así lo hicimos.
La disco estaba a reventar de gente, estábamos nerviosos y emocionados ya que no acostumbramos a salir y menos de noche, bailamos y comimos de todo durante toda la noche, bebimos vino tinto para celebrar entre otros licores ella parecía muy feliz, con las mejillas enrojecidas por el licor, de pronto un chico de muy buen parecer se nos acerca y muy educadamente me consulta si había un problema si bailaba un momento con mi esposa, note como a ella se le encendió la mirada a lo que respondí que si ella deseaba no había problema, siempre y cuando no tardaran, ella se sonrió y me pregunto si estaba seguro que ella no quería que nada dañara nuestra noche juntos.
Bailaron solamente una o dos canciones, veía como él se sentía demostraba atracción por mi esposa y ella parecía excitarse al rosar su cuerpo con el de él. El licor había hecho su trabajo, ella parecía muy entonada y con una alegría que jamás había visto en ella. El llevo a mi esposa nuevamente conmigo agradeciendo y se alejó, tome a mi esposa ambos acordamos que el parecía una persona muy agradable así que juntos nos acercamos a él y lo invitamos a bailar los tres.
Bailamos los tres por un buen rato ella en medio obviamente y parecía en trance, al final nos despedimos y nos fuimos a nuestra mesa, unos minutos después me retire al baño encontrándome allí a este chico, charlamos un rato y me expuso que era una hermosa mujer la que tenía nos despedimos y regrese con mi esposa a la mesa. Unos minutos después le pregunte a mi esposa si le gustaría regresáramos a casa a terminar nuestra noche con mucho sexo, ella ya estaba excitada por lo que rápidamente me dijo que sí.
Llegamos a casa, jugueteamos un poco incluso utilizamos algunos juguetes, después le propuse jugar algo nuevo, le vende los ojos acaricie por un rato su cuerpo desnudo, después la tumbe boca arriba sobre la cama, pero con su cabeza colgando al borde de la cama, me pare al costado de la cama e introduje mi pene en su boca, ella no podía ver nada por la venda en sus ojos, me pose sobre su cuerpo llegando mi boca hasta su vagina por lo que tuvimos sexo oral en 69 pero ella con su cabeza colgando al borde de la cama y yo con mis pies aun en el suelo, de pronto regrese a mi posición de pie, pero con mi pene aun en su boca sujete su tobillos levantando sus piernas en forma de V trayendo sus pies casi hasta tocar mi pecho, de pronto solo exhalo un grito de placer pero con mi pene aun es su boca, el grito había sido provocado por una penetración directa y profunda pero repentina del pene de nuestro amigo de la disco, el cual invite para que participara con nosotros. En esa misma posición nuestro amigo empezó a follarla golpeado con su pelvis contra los glúteos de ella.
Espere una reacción de desaprobación por parte de mi esposa pero al contrario ella empezó a mover sus caderas como buscando que el pene de nuestro amigo se introdujera más en su vagina, cambiamos de posición un par de veces turnándonos entre su boca y su vagina, no podía creer que estuviera viendo a mi esposa disfrutar de dos penes, al final le quiete la venda de los ojos, pero ella muy extasiada con la experiencia no dejaba de chupar un pene y el otro nos cabalgaba hasta que ambos eyaculamos en su rostro, ella solo recogió el semen de su cara para echarlo en su boca.
Después de ese día no volvimos a ver a este chico, pero nosotros ya estamos planeando la próxima experiencia.
