Siempre me ha gustado ver videos porno de chicas sumisas sometidas por su amo a lo que él les ordene y causan en mí un morbo gigante, al punto de que mojo mis pantys en exceso, es así como hemos ido con mi esposo buscando aquellas fantasías que a la hora de que tengamos sexo, me moje tanto que su verga pueda entrar sin permiso alguno.

Hace más de un mes él compró un kit BDSM precisamente, todo es color violeta, trae esposas para manos y pies, un flogger, cuerdas, pezoneras a presión con cascabeles al final, una venda, entre otros... Cuando lo vi por primera vez, quedé con la boca abierta y mi cabeza daba vueltas pensando en una noche loca llena de sexo sucio, fuerte y rico (como lo expresé en nuestra @ de twitter) así fue como hace 8 días iniciamos con el estrene, él me pegó en la cola estando en cuatro con el flogger y mis gemidos y nalgas rojas sólo pedían que siguiera.

El día de hoy nos queríamos desquitar de una semana llena de trabajo y estrés, entré a twitter y lo primero que hago es revisar mis listas, allí siempre encuentro cosas que me hacen mojar, pero esta vez me decepcionaron, así que entre al blog de una española a la que sigo, ella es swinger y sumisa y sus historias son de ataque, empecé a leer y cada vez más sentía como mi tanga se mojaba de manera absurda.

Le dije a mi esposo que teníamos que tener sexo fuerte y no solo eso que mi rol de sumisa era mi debilidad, él accedió y me preguntó qué quería que hiciéramos, le dije de todo yo solo quiero hacer caso, entonces mientras él llegaba tome una ducha y aproveché para llevar un juguete porque no aguantaba las ganas de venirme, en efecto fue poco el tiempo que me tomó lograrlo, salí de la ducha, él me había ordenado que me colocara una joya anal, así que le hice caso como su juiciosa putica.

Cuándo él llego a la casa, yo estaba lista, esperando mi faena, él me empieza a acariciar, se da cuenta que tengo el plug y que mi vagina está apenas un poco mojada, me dice sigue mirando lo tuyo y se dispone a abrir la bolsa del kit, ese que me imaginé iba a ser mi verdugo, sacó los brazaletes y me dijo escribe algo en twitter de lo que crees te espera, volví a hacer caso, mientras él ataba los brazaletes con unas cuerdas que están aseguradas a las patas de la cama, quedé en el centro, atada de pies y manos sin posibilidad de moverme para ningún lado.

Él empezó utilizando el vibrador en mi vagina yo no lo aguantaba porque tenía el clítoris sensible, tuve que contarle que me había venido en el baño y sus ojos se abrieron, preguntándome cuántos orgasmos había tenido, sólo uno le dije, me tapo lo ojos con la venda e inicio mi tortura deliciosa, su verga ya estaba tan grande que se movía sola, me hacía mover y gemir de manera perfecta.

Así fue como fue subiendo todo de tono, me colocó las pezoneras muy cerradas al punto en el que sentía dolor pero después de unos segundos era rico, entonces decidió meterme esa verga grande y venosa hasta el fondo, el placer era muy fuerte, pero fue hasta que se acerco a mi cara poniendome su verga en la boca y metiendola hasta hacerme dar arcadas, yo sacaba la lengua como una perra y se la lamía toda, cuando él me tocó la vagina estaba empapada y se dio cuenta el motivo de mi placer y solo decía: "realmente eres una puta adicta a la verga", así que lo repitió varias veces y me seguía dando verga y golpes suaves con ese trozo delicioso en mi cara hasta que le supliqué que me dejara venirme, lo anhelaba, adivinen su respuesta.. aún no perra rica!!

Yo seguía atada indefensa y goteando flujos que de echo me hizo probar con su verga y sabían delicicioso, llegó el momento de soltarme, me dió el gusto de venirme así que me dijo, sientate aquí, mis ojos se iluminaron, me senté, tomé mi vibrador y que explosión tan deliciosa hubo dentro de mi, luego mi posición cambió para estar como una perrita faldera en 4, dándole la espalda y sintiendo su verga tocarme, me dió tan duro que me hacía tener orgasmos cortos, él conoce muy bien mis debilidades.

Así en 4 me metía solo la punta y al menor intento mio de intentar clavarmela, la sacaba, eso si, en 4 nunca dejó de darme nalgadas, me dejó el culo rojo y ardido, pero adivinen... Yo feliz, aunque podía decir auch, me tocaba la cuca y goteaba, me decia: " te encanta esto, y tu cuca no miente", y sin esperarlo me clavaba hasta el fondo, mientras me podría acariciar las tetas, la espalda me la rasguñó, o usaba una pluma por todo mi cuerpo, de repente me comenzaba a dar durisimo y en cuestión de 10 o 15 segundos, tenia mi orgasmo, repitió la misma dosis varias veces con el mismo resultado de orgasmos.

Luego me volvió a decir que me podía venir como puta, la felicidad y ganas que tenía no se las imaginan, sentarme en esa verga y sentir como me llega casi al ombligo y me deja llena para así con mi juguete tener mi orgasmo que casi me hace caer fue indescriptible, y más que en ese momento me volvió a coger a nalgadas sin parar de repetirme esas palabras de "puta rica, perra deliciosa, muevete como puta arrecha" ufff lo que hacia que me moviera como toda una puta sobre él, diciendome que me diera más duro, yo hacía caso feliz.

Ya para el final y luego de mis multiples orgasmos, él aún seguía sin venirse luego de tanto clavarme, me lo empecé a meter aún más profundo y amoverme duro, rápido, en circulos, saltando, todo lo que quieran lo hice feliz y arrecha de sentirme tan pero tan culiada, duré yo creo que 5 o 10 minutos hasta que me hizo la rica pregunta: "¿Quieres leche?" al oir mi respuesta me hizo acostar boca arriba con la cara pegada a él, lo escuché masturbarse hasta que me llenó toda la cara por todo lado de semen.

Antes de llegar me había dado la orden de que ese semen me lo tenía que untar por toda la cara lo que me ponía y pone a mil pensarlo de nuevo, así fue y así les estoy escribiendo en este momento porque me prohibió quitarmelo de la cara para dormir así, con aroma a puta feliz y comida.