Como era temprano nos pusimos a charlar, a “adelantar cuaderno” como se dice (jejeje) Mi esposa muy querida nos preparó cena y compartimos bien chévere. Luego de la merienda, nuestro amigo me dijo que fuéramos a comprar algo para tomar y salimos por unas cervezas. Cuando llegamos para amenizar el momento pusimos buena música y continuamos con la charla, luego, nos tomamos algunas selfies los tres para ir dejando rastros del rico momento.

De pronto nuestro amigo sacó un detalle para mi esposa, el cual recibió y yo animando con una porra (jejeje) le pedí que lo abriera "Que lo abra, que lo abra" decía yo… Y sí, lo abrió y eran unas lindas tangas brasileras de amarrar… Ufff muy buen detalle del corneador de mi mujer. Nuevamente con una porra los dos le pedimos que se las pusiera (jejeje) un muy buen ambiente nos hacíamos entre los tres, realmente la química fluía. Él también nos mostró que había llevado un deliciosos aceite de naranja para masajes... Genial! porque a ella sí que le gusta que la consientan y que le hagan masajes deliciosos.

Luego, mi esposa linda se fue a cambiar al baño y nosotros la esperamos expectantes en la habitación. Cuando ella llegó traía puesta su pijama y muy seguramente debajo traía su nuevo regalito bien puesto -imaginamos- ¡Ufff y si que se lo queríamos ver puesto! No habíamos planeado nada y de repente se me ocurrió que, para que nos lo dejara ver ella hiciera un striptis… Mi esposa dijo -nooo, me da pena!- Y sonrió, pero nosotros la animamos para que lo hiciera. Coloqué esa buena canción sensual de Joe Coker, 'You Can Leave Your Hat On.' Nuestro invitado se animó a hacerle algunos vídeos y nos divertimos viéndola mientras bailaba para nosotros muy sensual, muy sexy, animando el ambiente con un sutil pero erótico baile y pudimos ver que esas tangas le quedaban súper lindas, cuando se bajó poco a poco la pantaloneta de su pijamita.

Después de disfrutar de ese magnífico espectáculo de mi esposa; junto a nuestro amigo, le pedimos que se recostara en la cama y se relajara para que su corneador le diera un plácido masaje con el aceite de naranja que había traído. Yo me relaje, le solté el sostén y me puse a disfrutar viendo como él le daba aquel placentero masaje a mi esposa, cosa que ella disfrutaba mucho. Con el paso de los minutos, el masaje se lo hacía más erótico y placentero, le metía sus dedos en la vagina, le acariciaba muy rico las nalgas y el ano. La masajeaba de arriba abajo y ella muy excitada y mojada solo gemía y pujaba.

Después de un rato el corneador le pidió a mi esposa, que se diera vuelta y se quedara boca arriba, la comenzó a acariciar sobre sus senos y luego bajaba tocando su clítoris, le metía sus dedos y le daba algunas chupadas… Luego, me quité la ropa y me quedé en solo bóxer, y estaba bien excitado viendo la escena, me acerqué a ella, le comencé a acariciar una pierna y subía hasta su vagina, le acariciaba su rico "gallito" y luego sus téticas ricas… Me acerqué, la besé y ella muy arrecha me miraba y me decía que me amaba… Nuestro amigo, se bajó a su vagina y se dispuso a hacerle un oral fantástico que la hacía gemir entre mis brazos y, me miraba de nuevo con sus ojos retorcidos de placer, ya la teníamos muy cachonda.

Me levanté y tomé el celular de nuestro amigo para tomar algunas fotos. Ella luego se sentó en la cama, su corneador estaba de pie en el piso; ella en al borde de la cama, se dispuso a soltarle el pantalón y luego acarició su pene bien duro, solo le sacó la cabeza de la verga del bóxer y se lo chupaba muy arrecha, al ver la escena me daba más excitación y seguía tomando fotos, luego, ella le quitó el bóxer y se tragaba toda la verga de nuestro amigo. Solté el celular y me puse a darle lengua deliciosamente, mientras ella seguía entretenida con su otro bombón. Súper la escena llena de lujuria y morbo, su vagina solo soltaba unos jugos espesos sabrosos…

Cogí a mi esposa boca arriba acostada en la cama, con sus piernas bien abiertas casi sobre mis hombros y la clavaba muy duro, mientras ella se agarraba de las piernas de nuestro amigo con su cabeza fuera de la cama y le chupaba las güevas y le lamía el pene, era tanta la excitación de ella que, se untaba los dedos de saliva y se frotaba su clítoris rápidamente. En esas embestidas que yo le daba y, con el morbo de estar debajo de las güevas del otro, ella se calentó tanto que termino viniéndose a chorros, fue fantástico, chispeaban sus jugos de manera caudalosa sobre su abdomen y el tendido de la cama quedó completamente empapado. Ufff ella parecía que estaba en otro mundo, su arrechera la sacó del lugar en ese momento y era fantástico para nosotros verla así.

En un momento dado, le susurre que si quería que se lo echáramos en la cara y en la boca, ella muy excitada dijo que sií! Todos en la cama, nosotros los dos hombres de pie y ella arrodillada ante nosotros, la pusimos a mamar las dos vergas; qué arrechera ver a mi esposa así, toda una puta en la cama, tragando las vergas duras de dos machos… Súper excitante, le tomábamos fotos y ella se metía los dos penes a su boca a la vez, nos tenía tan arrechos que, solo botábamos líquido masculino de nuestras vergas. Cuando de pronto, le dije a nuestro amigo que ella quería que se lo echáramos en su cara, que la dejáramos toda untada en su cuello y senos, para después seguir mamando así… Claro, eso a cualquier hombre lo pone a volar.

El corneador se vino primero sobre la cara de mi esposa, tenía una "teterada" tremenda de leche, que descargó sobre su cuello y pecho también, ella no lo podía creer, pero eso la puso más arrecha, le siguió chupando la verga súper chorreada de semen y se reía también, ella estaba feliz; luego, con su mano izquierda se untó la leche de él, sobre su mejilla izquierda, el mentón, el cuello y los senos ¡Ufff qué escena tan morbosa! Estábamos viendo porno en vivo y participando con la actriz. Ella se volteó luego a chupar mi verga, pero le dije que chupara más la de nuestro amigo, me fue muy excitante ver como se lo hacía y tenía tanto semen en sus labios y boca también, luego le dije que ya me iba a venir, entonces ella abrió su boca y se lo descargué adentro y dejó que escurriera hacia sus tetas… Fantástico como ella estaba contenta toda llena de leche masculina. Y le encanta que la bese luego de eso a la muy malvada, porque le encanta el sexo sucio. Nuestro amigo también le imprimió mucho morbo al besarle las tetas después de eso y la calentó mucho también.

Luego, nos limpiamos para después recostarnos y empezamos a darle y a tocarla entre ambos, uno le metía los dedos en su vagina y el otro frotaba su clítoris, le tocábamos las tetas y la pusimos muy cachonda… El corneador se puso un condón y ella se puso a cabalgar encima de él, yo tomaba algunas fotos y después me puse detrás de ella, la acariciaba mientras veía como disfrutaba montando otro hombre. Luego, con mi verga bien parada y dura, me agache un poco y con la ayuda de ella, se la metí también por la vagina, una doble penetración vaginal para ella que solo pedía verga y más verga. 

Se puso como loca y gemía como nunca con las dos vergas metidas en su vagina, ¡qué fantástico momento! Durante un buen rato le dimos en esa posición y mi esposa gritaba -Qué rico-… Nos decía –Qué rico tener estás dos vergas que me encantan adentro- Después su corneador la tomó boca arriba con las piernas abiertas, dándole duro; durante un buen rato y, cuando se agitó, se bajó y ella me pidió de inmediato que yo siguiera dándole pene… Seguimos así intercambiando posiciones, yo disfruté mucho viéndola como luego volvió a montarse encima de él y duraron mucho culiando, mientras yo observaba muy rico, también la acariciaba estando detrás de ella, le besaba el cuello y ella se vino varias veces encima de nuestro amigo. Súper delicioso verla disfrutar, me encanta que la pongan a gozar mucho como lo hago yo. Yo salía al baño, a tomar agua y los dejaba solos en el cuarto esos instantes y desde afuera yo escuchaba como ella pujaba y gemía de placer; cuando entré él la tomaba en el borde la cama con las piernas arriba y le surtía mucha verga…

Después, él la tomó en cucharita y yo me puse al otro lado para que me mamara la verga, un gran momento ahí, hasta que yo me vine en su boca y el corneador también se vino. Ya eran pasadas la 1:30 de la mañana y estábamos agotados de tanto sexo delicioso. Mi esposa como tenía mucho calor, se fue a la ducha y se refrescó, volvió a la cama y se arrunchó en medio de los dos, nuestro amigo ya tenía sueño, pero nosotros dos no y seguimos hablando en voz baja, morboseando y comentando sobre lo sucedido, y eso hizo que nos calentáramos de nuevo. Le dije a mi esposa que le quería quitar esas tangas y darle lengua; ella de una vez me dijo que lo hiciera y de una vez me baje a hacérselo.

Estaba súper su vagina mojada, le daba lengua sin parar, chupaba delicioso su clítoris y lamía desde su ano hacia arriba, sentía sus jugos espesos de nuevo en mi lengua y me los tragaba con mucha arrechera, mientras ella se retorcía de placer. Nuestro amigo, al escuchar esto, obviamente se excitó y le empezó a tocar y chupar sus tetas, se besaban y ella más cachonda se ponía. Fantástico, yo no me quería quitar de allí… Ella le cogía la verga a su corneador y se la agitaba rápido. Después de un rato me subí un poco y la penetré en cucharita, dándole rápido y, al otro lado nuestro amigo tocándola y fue muy rico cuando escuché que ella le dijo que se subiera un poco para mamárselo…

Eso me hizo excitar aún más, me vine, pero como veía que ella se lo estaba mamando y le hacia la paja muy rico a nuestro amigo, se me puso más dura y sin sacársela, más le seguía dando… Él le decía que le hiciera despacio porque estaba muy excitado, pero ella seguía haciéndole la paja y mamándosela con muchas ganas, entonces el corneador le preguntó -¿Quieres que me venga en tu cara? Y ella le contestó -Sí, dale-… ¡WOW, fue fantástico! Yo seguía más caliente dándole mientras ella quería más leche en su rostro; efectivamente él le volvió a descargar una buena cantidad de semen en su mejilla y la boca, mi esposa muy excitada se lo chupaba más, sabía que yo ya la tenía llena de leche en su cuca y su corneador también la tenía toda derramada en su pecho y la cara. A ella le encanta sentirse bien ‘perra’ en esos momentos.

Ya con eso si terminamos, nos quedamos dormidos los tres y muy complacidos, sobre todo mi putiesposa, la atendimos como se merece y la hicimos sentir bien ‘puta’ como le gusta. Muy trasnochados, con gran sueño, nos tocó levantarnos al rato, a eso de las 6:30 AM para despedir a nuestro amigo, que debía salir temprano. Nos quedamos en la cama charlando, morboseando, comentando todo lo sucedido en el reencuentro con un corneador de mi esposa y eso es lo más rico de vivir estas locuras y experiencias en pareja swinger. Gracias, espero les guste.