Guía Cereza
Publica tu Experiencia

Relatos & Experiencias

voyeur conductor

Soy voyerista, pero no cualquier voyerista... me gusta ver gozar a mi esposa... la amo mucho, porque juntos somos libres y juntos hemos roto muchos límites culturales y morales, porque hemos sido unos libertinos... su hermosa piel morena deslumbra en sus redondos y pasaditos senos, una cola divina puesta sobre sus perfectas piernas... 

Me fascina ver contonear esa figura sobre otro cuerpo u otros cuerpos... se da al placer con una facilidad lúbrica... Y quiero relatarles alguna o algunas de estas experiencias, porque para serles sincero, no podría dilucidar con facilidad una experiencia y relatarla con total fidelidad. Lo que sí les puedo asegurar, es que todo lo narrado es real, quizas trueque los tiempos, pero no los hechos... estos vienen con frenesí a mi cerebro y se proyectan en mi birilidad que ya está tremendamente dura... Les quiero hablar de J, un single con el que hemos pasado algunas aventuras - les escribiré en otro momento-; de estatura media, buen cuerpo, sin ser musculoso ni nada de eso, ya tirando unos cuarentaialgo de años, serio y con la vida ya bien clara... Como les digo, quizas confunda los tiempos,, porque con J hemos salido varias veces a dar vuelticas en su Peugeot 206... sin embargo, la última vez fue espectacular... estábamos tomando unos tragos con mi negrita en un bar cerca a nuestra casa, cuando nos llamó y nos dijo que quería saludarnos (obvio ya sabemos de sus pervertidas intenciones). Al rato llegó en su bonito auto y se sentó con nosotros; la buena charla, los tragos, las risas, todo fluye súper con J... 

-Me dejas dar una vuelta en tu auto, me encanta esa máquina...

-claro- medijo J - Ya sabes que es tuyo.

Paso por algunas calles hechando humo. Cuando vuelvo los notó más entonados y en confianza. Seguimos en nuestro rollo, pero pronto pagamos la cuenta y salimos a pasear por la ciudad. Las llaves son mías, como de costumbre, pero esta vez mi negra es un poco más atrevida: "Espero nos lleves a dar una rica vueltica, amor", me ronronea al oído, mientras me preparo para dar marcha. La música y el susurro atrás me dan sensaciones de estar soñando. Mi negra se ríe ante las risas de J... se escuchan los chasqueos de los besos, entonces acomodo el retrovisor para hacer mejor la vista. Ella está sobre ella, se nota muy caliente, le refriega ese lindo culo en la verga que ya se le nota bien parada... acelero y tomo la circumbalar... ya puedo ver su torso desnudo y la silueta de J sobre esos senos... disminuyo la velocidad y observo con más detalle, veo bajar la mano inquieta de mi negra hacia el pantalón de J, busca y acaricia, con destreza desabrocha y saca una buena verga, la acaricia con ganas, luego se levanta y se quita la tanga que pone a mi lado. J aprovecha para tocar esa linda vagina, ya bien mojada... se besan y acaricia una delicia, mi verga ya casi revienta, por lo que decido parar en una parte segura; saco mi verga y me la acaricio mientras observo con una mezcla de emociones y sentimientos que ni entiendo, pero de los que me he vuelto algo adicto. Paloma juega con ese rico culito, moviendolo de una lado a otro rítmicamente, sus senos sobre el rostro de J que tiene una lengua muy ágil, que juega con los pesones, bien paradito y duros; J coge su verga y la mueve justo en la entrada de la vagina de mi negra, en este momento las sensasiones se hacen muy intensas, me da la impresión que mi negra se va a comer esa verga sin condón... pero es ágil y no lo permite, se permite ese juego perverso a sabiendas que estoy ahí, a unos sentimetros de esa vagina y esa verga, jugando el perverso juego de posesión carnal... Escucho a J que ya quiere meterla, pero mi negra ya sabe dónde están los condones y los saca al instante; con destreza se mueve, le pega una rica mamada y le pone el condón, se vuelve a montar sobre él, le pone los senos para que se los bese, me mira con expresión de placer y me pide que vayamos andando mientras se folla a J. El motor arranca y a los segundos escucho un leve gemido, que me demuestra que esa vagina ha sido penetrada, ya siguen más gemidos y los golpeteos de esas ricas nalgas sobre J. Mi corazón está a mil y la punta de mi verga casi revienta; como pueden cambian de posición, Paloma da la espalda y acomoda esa deliciosa colita para que quede al servicio de J, este toma su verga y la apunta bien a la vagina, cuando la tiene en la pura entrada se la manda con fuerza, el gemido de Paloma se escucha con más fuerza y atrae mi mirada, J sigue dándole sin compación, una sóla arremetida, se le nota que quiere acabar ahí, acelera el ritmo y aceleran los gemidos, mi negra ya grita, se está vieniendo, se retuerce y trata de sacar esa verga de sus entrañas, pero J no la deja y sigue castigándola, má rápido, más fuerte, hasta que se viene... el motor del auto se acelera, atrás las risas y suspiros de placer...

parcuck

Somos pareja swinger

visitas: 1247
Categoria: Fantasías
Fecha de Publicación: 2018-10-17 04:03:28
Más Relatos Por parcuck
Compartir en:

5 Comentarios

Que experiencia tan emocionante.

2019-01-23 02:25:35

Que relato tan rico.

2019-01-23 02:12:57

Que delicia! Eso si es sacarle el jugo a la vida... y a la cuca de la negra!

2018-10-29 16:59:26

Programaso muy exitante...

2018-10-26 12:24:14

Deli relato bien escrito y hace que una se transporte a mis propias travesuras ya vividas siempre acompañada por mi complice para follar con desconocidos.. Mi esposo

2018-10-17 13:55:33