Hola, bueno... Es algo nuevo para mí publicar un relato pero me gusta la idea de que la gente lea lo que muchos en algún momento nos imaginamos pero se nos cumple.

Me llamo karitto, tengo 26 años, soy de tez blanca (diría que demasiado), senos pequeños, buenas piernas y mi mayor virtud: una buena cola jeje.

Todo comenzó cuando tuve un novio el cual en esos momentos la relación no iba muy bien: celos innecesarios, inseguridad entre ambos y peleas una tras otra... Confieso que también fue parte mía porque aunque nunca lo quise aceptar, siempre he sido muy coqueta y siempre he pensado que las oportunidades no vienen dobles y cuando se puede disfrutar, hay que darle al cuerpo lo que pide.

Entre terminar y volver, duramos unos días sin hablarlos lo cual quise darle un cambio un poco nuevo a mi vida y entre esos quería hacerme un tatuaje. Como lo que quería era algo complejo de hacer, quise buscar una persona que supiera del tema y tuviera buenos trazos, entre esos conocí a Julián, un Moreno con los labios gruesos, provocativos, un cuerpo bastante tonificado, unas manos grandes, dedos bastante gruesos y una cara linda pero no le quitaba lo pícaro que tenía en su mirada. Además de eso, toca la guitarra como los dioses lo cual me derretía mucho.

A Julián lo conocí por la recomendación de una buena amiga que me decía que el trabajo era muy garantizado, lo cual me llevó a escribirle al instagram y en el primero momento nunca fue con la intención de que algo pasara, sólo las preguntas de rigor como qué precio cuesta, dónde está ubicado y bueno, muchas cosas que no vale la pena describir aquí.

Pasaron los días, él quedó de enviarme el diseño y aunque lo había visto en estados del insta y no les niego, me derretí, pero no quería ser tan lanzada para que no pensara a mal, además de eso con mi novio las cosas iban de nuevo bien y quería poner de mí. 

Una noche lo ví conectado pero no quería pasar por necesitada, así que subí un estado de una foto muy provocativa lo cuál él solo la podía ver y al cabo de minutos me mandó una reacción del emoji con la boca babeando. No les niego, la foto era de unas tangas rojitas, un poco cortas y se notaba todo el frente de mi vagina y ese tipo se volvió casi loco en los audios.

- uy Dios... De quién es todo eso!

- jajajaja pues, es que me gustan mucho esas tangas así que quise subir la foto

- y ahí es donde te quieres tatuar? Porque yo gustoso de hacerte un tatuaje bien hermoso ahí...

-en serio? Ah, pues tú me dirás y cuando quieras cuadramos y ves de cerca dónde me vas a tatuar no?

-pero es que me va a provocar es otra cosa señorita... 

-ufff no me digas, mira que hace rato con mi novio nada de nada

-no más es que me diga y matamos dos pájaros de un sólo tiro: te tatuo y de una vez te hago cositas ricas jeje

Ya de ahí, estaba muy excitada y preferí controlarme y dejarlo en visto. Al otro día me excusé de qué como era muy tarde pues me había quedado dormida y que por ello no pude seguir hablando. Él no lo tomó a mal, hablamos muy normal y quedamos de que en unos días iba a ir a tatuarme. 

Mi novio relativamente estábamos bien, él también quería hacerse un tatuaje y aproveché para comentarle que yo también y que, porqué no? Fuéramos y nos tatuabamos entonces él aceptó.

Seguiré una segunda parte para que no sea tan largo el texto. Me disculpan lo largo pero es mi primera vez.