Tras varios chats con una pareja amiga quedamos de encontrarnos en un club swinger en Bogotá, fue en el club sauna europeo, a la entrara todos debíamos desnudarnos y dejar nuestra ropa en unos lockers para entrar al club solo con una pequeña toalla y nos sandalias “esto facilita todo allí adentro”.

Martha era una mujer de 38 años, de cara bonita, bajita de buenas tetas y buen culo, algo gruesita, lo que se conoce como una gordibuena, Daniel era un hombre de unos 45 años, delgado, de voz gruesa y una actitud amable pero muy seria y correcta.

Al principio estuve muy nervioso pero mis amigos ya tenían experiencia y me tranquilizaron con unos tragos y una muy amena charla, bailamos un poco y la cosa empezó a ponerse caliente, las mujeres en la pista de baile empezaron a despojase de sus toallas y a coquetear con los demás y entre ellas mismas, en ese momento mi amiga me dice “ya es hora, subamos”, me tomó de la mano y subimos por unas escaleras al fondo del salón, en el segundo piso habían varios salones, entramos a uno donde habían varios sillones y algunas parejas estaba jugueteando alrededor mis amigos empezaron a besarse despojándose de sus toallas, era increíble, habían personas teniendo sexo por todas partes, yo estaba inmobil, mi amiga me arrancó la toalla y con un gesto me invitó a poner mi verga en su boca mientras su esposo la penetraba, de inmediato la pena se fue de mí y la lujuria tomo control total.

Martha nos invitó a otro cuanto más pequeño donde estaríamos solos, Daniel me pasó un preservativo y Martha me ayudo a ponérmelo, se subió para cabalgarme y mientras su delicioso culo rebotaba sobre mi ella se lo mamaba a Daniel, vi de cerca la verga de Daniel y en ese momento no sabía porque pero me exitó mucho más.

Luego Daniel se sientó en un sofá y Martha lo cabalga de espaldas a el, yo aproveché para besar a Marta y para acariciarle las tetas, pero como si tuviese un imán mi mano bajó hasta su vagina, empecé a acariciarle el clitorix y sus movimientos eran más intensos y mi mano bajó un poco más y de vez en cuando rodaba el pene de Daniel, tomé valor, me arrodillé y empecé a hacerle sexo oral a Martha y ya descaradamente pasaba mi lengua por el tronco del pene de Daniel, aunque lo dejé porque no sabía si le gustaba o si se habían dado cuenta, de repente Daniel se levantó y puso a Martha en cuatro, yo me puse frente a ella para que me la mamara, en ese momento tenía muchas ganas y le dije que quería clavarla, ella se puso boca arriba y mientras yo la clavaba Martha se lo mamaba a Daniel, ahí pude detallar bien la verga de Daniel, era venosa, no muy grande pero con una reacción muy dura, empecé a besarle las tetas a Martha, poco a poco empecé a subir y besarle el cuello, le di un beso en la mejilla y ella soltó la verga de Daniel para darme un beso en la boca, volvió a mamarcela a Daniel pero esta vez con mucho nerviosismo me decidí y la besé en la boca mientras tenía la verga de Daniel adentro, me quedé inmóvil porque pensé que Daniel me iba a golpear o algo, Martha abrió sus ojos como platos, pero Daniel ras un momento inmóvil empezó a mover sus caderas penetrando nuestras bocas, Martha y yo sonreímos y empezamos a mamarcela con mas ganas,nunca había mamado una verga pero me encantó, tomé valor y cogí esa verga para mi solo, a diferencia de Martha a mi me cabía toda y creo que eso le gustó mucho a Daniel porque me tomó la cabeza y me estaba haciendo un auténtico fuckface, no aguanté más y me vine, Daniel sacó su verga de mi boca y derramó todo su semen en la cara y tetas de Martha, terminamos exhaustos, yo particularmente estaba extasiado y no podía creer lo que había acabado de pasar.

Al rato los tres nos bañamos y bajamos por unos tragos, nos reímos acordándonos de lo qué pasó y Martha dijo que siempre había querido algo así pero no había sido capaz de pedírselo.

Tuvimos varios encuentros después de eso antes de mudarme de ciudad, me gustaría contárselos, si quieren que lo haga comenten.

Niñas, si sus esposos o novios les piden ser cuckold o tríos mmf no lo duden, a ellos les gustan las vergas, no son gays, solo les excitan las vergas, realmente a todos nos gustan pero el 99% lo niega, sobre todo por el miedo a la reacción de sus parejas.