Habíamos acordado mi visita para follar, sería al final del día, pero me desocupé del teletrabajo a eso de las 2 de la tarde. Entonces decidí salir para su apartamento sin avisar que iba para allá. Cuando me anuncié en su edificio me dejó entrar.

Al entrar al apartamento me pidió que me desinfectara y fue clara al decirme que ella aún trabajaba y tenía cosas por hacer. Así las cosas, tomé una ducha y me fui en toalla par su habitación, ella estaba junto a la cama en su escritorio trabajando y en teleconferencia. Noté que la cámara estaba apagada y ella tenia un vestido largo de esos que son para estar entre casa. Me dirigí a ella y empecé a charlar, entre palabras decidí besarla y me correspondió, mi erección se hacia notar ya por la toalla y ella me decía q me calmara pues su reunión virtual no había terminado.

Obviamente no atendí a lo que me pidió, saqué su seno izquierdo de su vestido y empecé a chuparlo, ella respiraba fuerte y agitadamente, mi verga estaba tan dura q decidí ponerla en su pezón, luego la levanté de su escritorio, la puse de espaldas a mi y la incliné sobre el mismo, corrí su tanga y metí mis dedos en su vagina, estaba húmeda, lo había logrado. Luego separé sus piernas y la penetré y gritó “te extrañé”, le pregunté ¿Quieres que te lo saque?, “No” respondió. La embestí con fuerza luego se volvió como loca y su vagina apretó mi verga fuertemente y me tiró en su cama y me dijo “mira lo q hiciste” su tanga estaba completamente húmeda y se hizo arriba. Metió mi verga en ella y me dijo me voy a correr, no me lo saques, entonces su vagina empezó a mojarse más y más, podía sentir como gotas que salían de su vagina escurrían por mi pelvis, ella estaba teniendo varios orgasmos acompañados de pequeños squirt. Hasta que en un acto de arrechera la puse boca abajo y la penetré desde atrás, se empezó a mover delicioso y mi semen venía, lo dejé salir en sus nalgas y me dijo “que rica leche, es toda mía” follamos toda la noche y al día siguiente nos dolía todo el cuerpo. Siempre nos vemos y nuestras folladas son verdaderas faenas.