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Amante del casado #3 Fantasías con un final inesperado.

Hola a todos nuevamente, de nuevo ando por acá para compartirles la tercera entrega de mis aventuras en el closet con un casado; esta vez el relato va a ser un poco más largo de lo habitual, ya que como vieron en el titulo, se trata de algunas fantasías que terminamos haciendo Paulo y yo, espero les gusten. 

Bueno, después de lo del parqueadero, Paulo quedo super apenado por el echo de haberme tenido que "compartir", aunque yo nunca le dije que me gusto eso, entonces él se volvió aún mas atento, terminaron las vacaciones de mitad de año y él y yo seguimos en lo nuestro, y en esos meses si que me hizo oral, cuando me escribía que quería darme una vuelta en el taxi, era sinónimo de una rica chupada, aunque sin un lugar seguro para culiar, o para "hacernos el amor" que era como le decía Paulo, nuestros encuentros solían quedar solo en chupadas, morbo, y pajearse en la casa por la noche. Claro, hubo algunos rapiditos por ahí, pero no lo suficientemente sabrosos como para contarlos, además el tenia cierta obsesión con que yo lo penetrará, lo veía como el pago que me tenia que hacer, jejeje.

Claro, con el tiempo nos fuimos volviendo un poco más descuidados, al tanto que a pesar de alejaros del barrio, algunos transeúntes nos veían besándonos en el taxi y así, y las ganas de culiar iban creciendo en mi al pasar los días, ya a finales de septiembre de ese año; Paulo me propuso algo delicioso, a lo cual no pude negarme.

La fantasía, me permitió explorar por primera vez una parte de mi que desconocía, y aunque no soy del todo así, me atreví; Resulta que Paulo a pesar de ser taxista, se metió a pintar una casa, se demoraba tres días según me dijo; pero llamo a otros dos vecinos para hacerlo en dos, aparte que le pidió toda la semana al dueño la casa; ese iba a ser el lugar de las fantasías. Me dio la llave, obviamente yo tenia que escaparme del colegio esos días, el me estaría esperando a partir de la 1. 

Bueno, retomo sobre la primera fantasía que le cumplí, y que, también era fantasía mía; casi siempre había sido el sumiso, al que le daban, pero esa vez iba a ser el activo; antes había penetrado uno que otro chico, pero nada memorable, aparte, ese día tenia que llegar como toda una mujer, si; Paulo me estaría esperando, pero yo debía llegar en tacones, maquillado y así, no hace falta decir que le robe una minifalda a mi hermana mayo, con unas tangas rojitas, y unos mini-tacones, nunca había andado en tacones, así que le robe los mas chiquitos que conseguí. Sali para el colegio, con todo eso guardado en la mochila; cogí un bus apenas pude y me baje en el centro. Aún recuerdo mi morbo y mi desesperación por conseguir un sitio para arreglarme, y algo de maquillaje, al final termine entrando a los baños públicos de ese pasaje comercial que queda por junin, el unión plaza, y bueno, ahí me cambie, me vestí, y me maquille, la cual como era la primera vez, no me salía muy bien, por lo cual me demoré bastante hasta quedar al fin con un maquillaje suave, pero de mi gusto. Y de ahi salí para donde Paulo, que me esperaba en un apartamento por la estación suramericana, obviamente, fui el blanco de miradas de todo tipo en el metro y en la calle; y varios piropos, tanto de mujeres como de hombre, claro, no falto el insulto, pero para mi sorpresa, todo eso no hacia más que excitarme, era la primera vez que me vestía como mujer, para mi amante. 

Al final, llegue al edificio, saque las llaves y entre, subí hasta el cuarto piso en ascensor, fui al apartamento y abrí. Allí estaba Paulo, super enfadado; - ¿por qué llegas tarde?- me grito al entrar, - nunca me habia vestido así-, le dijo molesto, pero venia tan excitado por todas esas miradas, piropos e insultos en la calle, vi que estaba desnudo frente a mi, así que cerré la puerta a mis espaldas y avance, tenia mi verga a tope, - ha, amor discul...- fue a responderme al verme enfadado, pero yo me abalance sobre el interrumpiéndolo de un beso, no detalle el apartamento ni nada, solo metí mi lengua hasta el fondo, lo abrace por los hombros, mientras el tocaba todo mi cuerpo y se dejaba violar hasta la garganta por mi lengua. Después de un beso largo, nos soltamos, - Amor, déjame verte- dijo con total arrechera, tomando una cámara, yo le pose; me tomo varias fotos mientras se masturbaba, - bien amor, ven te doy un rico oral- , yo me quite la tanga, estaba totalmente duro y erecto, no obstante me deje los tacones y la minifalda, -No- respondí lanzándole a tanga a la cara, - no aguanto, no creo poderte hacer el juego de los dedos o chuparte el culo, yo quiero metértelo ya- , - solo si me preñas amorcito- dijo girándose después de que las tangas le habían dado en la cara, - yo ya estoy listo- añadió, al darme la espalda, se fue sacando no un dildo, sino un señor vibrador, de esos grandes, del ano, estaba totalmente lubricado, - pero échate lubricante amor- , señalo una pequeña mesita al lado mío, yo me bañe lo mas rápido que pude la verga en lubricante, Vi que ahí en toda la sala, ventanas cubiertas por cortinas, había una cama, en donde él apenas alcanzo a medio ponerse en cuatro, digo, a medio ponerse porque yo solté el lubricante y corrí a penetrarlo, - SIiiiiiiii, me lo merezco, lo quierooooo- gritaba Paulo, yo simplemente bramaba con corto -If, si , ahi, si ,si- mientras le daba con todas mis fuerzas. No aguante la tentación y también empecé a nalguearlo mientras me lo culiaba, vi entonces que había un espejo, en donde el estaba mirando la cogida que le estaba dando, y... se botó, al igual que yo con él al verlo botarse, quedamos jadeando un poco, cuando una voz femenina dijo: - Así que al final hasta marica saliste-. Yo me gire para encontrarme con tremenda cachetada, era la esposa. Claro, ellos empezaron a alegar, yo me metí al baño, a cambiarme y salir de ahí a toda. 

Resulta que uno de los que Paulo había llamado para que le ayudará, le había hablado a la esposa sobre los días que Paulo iba a tener esa casa, y claro, mi familia termino por enterarse, he ahi el escandalo que les comente anteriormente, y una experiencia inolvidable para mi; claro esta, Paulo y la esposa se terminaron marchando del barrio y no volví a saber nada de él; aunque para mi familia, los convencí de que la pillada había sido dándonos un "beso", Nada, espero les haya gustado el relato. Y pronto traeré otro mas.

Relator69

Soy hombre homosexual

visitas: 1151
Categoria: Gay
Fecha de Publicación: 2021-03-14 20:30:50
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2 Comentarios

Uyyy no me imagine ese final .... q susto ..... esos relatos son muy buenos ...

2021-03-16 17:22:40

Me imagino el susto!!! Me encantan tus relatos, espero el próximo. Ya que pocos hay nuevos para leer.

2021-03-15 18:00:33