Entonces mi jefe me cogió la mano y se la dirigío hacia su verga erecta a través de su pantalón. Sin pensarlo y al calor de los whiskies y las cervezas, empecé a acariciar ese enorme bulto en su entrepierna al mismo tiempo que mi jefe me besaba, me me lamía las orejas y cuello y entre susurros me decía que si quería ser su princesa esa noche... Era la primera vez que un hombre me decía ese tipo de cosas pero eso, además de verse olr a perfume varonil me haces derretir de ganas. Fue algo extraño pero excitante y delicioso.
De un momento a otro, el se paró y me puso su enorme bulto frente a mi cara. Lleno de emoción y de ganas, le desajuste la hebilla de la correa, le desabroché el pantalón y se lo baje un poco junto con sus pantaloncillos. Guaauuu.... Frente a mi apareció esa enorme, venosa y chorreante verga que me acelero el corazón aún más.
Ese olor a hombre arrecho era delicioso! Empecé a acariciarla con mis labios y darle besitos, harta que mi jefe me cogió por la nuca y suavemente me empezó a empujar para que me la metiera en la boca... Fue tan rico sentir ese tolete entre mi boca (casi no me cabía por su tamaño) pero empecé a mamarlo con el ímpetu de una nena golosa y hambrienta.
Es sabor saludito, junto con laactestiracde sus jugos, me hizo poner aún mar cachond@... No podía creer lo que estaba pasando en la sala de mi casa, p3o era algo super delicioso...