Aunque aún no he tenido ninguna experiencia bisexual, creo que es en esta categoría dónde debo escribir esta historia o relato.

Soy un hombre de Bogotá casado y con hijos con una vida muy normal con buenas y malas como cualquier otro.

Me considero de mente muy abierta en el tema sexual ya que me gusta experimentar y probar cosas que para muchos pueden no ser normales, cómo por ejemplo lluvia dorada o incluso hacerlo cuando mi pareja tiene su periodo, no soy de los que les da asco casi que nada en este tema, todo lo contrario. 

De unos meses para acá comenzo a llamarme la atención el hecho de probar lo que se siente tener una verga en la boca y como una cosa lleva a la otra, también deseo sentirla en mi culo y poder hacerle lo mismo al otro hombre y el punto de la eyaculación es algo que me exita muchísimo y aunque puedo querer probarla, eso lo sabré si se llega a dar la situación.

No me gustan los hombres ni me llama la atención acariciarme o besarme con alguno para nada, mi interés es solamente genital por decirlo de alguna manera.

Con mi esposa tenemos mucha confianza y aunque ella es muy tradicional y normal sexualmente hablando, hemos tenido 3 o 4 experiencias fuera de lo común como por ejemplo que ella salga a bailar con algún amigo y terminen teniendo sexo sin que él sepa que yo lo sé y la condición es siempre estar en contacto y contarme con detalles la situación.

También tuvimos un trío con otro hombre que no fue lo mejor pero igual lo disfrutamos.

Esa confianza me ha ayudado a poder decirle sobre mis deseos de experimentar, pero les aclaro que ese tema solo lo puedo tocar cuando estamos teniendo sexo cuando ella tiene la cabeza caliente y de esa manera lo pueda digerir sin espantarse, le digo que me gustaría que ella llegara con la leche de otro en su vagina y yo la limpiarla con mi lengua y aunque al principio se incomodaba, después de un tiempo ya me lo dice ella misma.

Después de un tiempo comencé también diciéndole que me gustaría experimentar con el punto h de los hombres y que me ayudara con sus dedos y dudandolo finalmente al día de hoy lo hace e incluso ya logré que me metiera un dildo y así lo hacemos cuando tenemos sexo.

Poco a poco lo a ido aceptando, me a dicho que es algo un poco fuerte para ella el hecho de imaginarme con otro hombre clavandomelo o a mi mamandoselo, pero poco a poco lo a ido entendiendo al punto de talvez aprobarlo, pero le he dicho que quiero que ella esté presente y que participe ya que no es mi idea hacerlo a solas.

En conclusión me gustaría encontrar un hombre que este pasando por la misma situacion y con la misma curiosidad sin que tenga ya una basta experiencia estando con otros hombres, (es algo que sobretodo a ella no le llama la atención), inicialmente la idea sería un trío normal y poco a poco ir haciendo cosas muy sutilmente para que ella lo pueda llegar a disfrutar sin sentirse incomoda al verme en esas con otro hombre.

En este punto no se si soy bisexual, heterosexual o si hay una palabra o categoria específica para identificar a hombres como yo.