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Consejos para lograr la desobediencia en una sumisa

galatea
Soy mujer heterosexual
Publicado hace 14 años, 5 meses
Hola a todos, me encontré este artículo en la red
http://www.soulshaven.f2s.com/dom_raiseadisobedient.php3
me gustó mucho y me tomé la libertad de traducirlo, y lo estoy mostrando a quienes les interese...
Por si acaso, aclaro que el artículo está escrito de manera sarcástica, es decir, que los "consejos" que allí se dan, justamente exponen lo que NO se debe hacer. Lo aclaro porque parece que puede haber dudas al respecto.

"Cómo lograr la desobediencia en una sumisa
Las sumisas, por naturaleza, desean complacer a sus Dominantes. Es una parte integral de ser una sumisa. A veces, sin embargo, los Dominantes parecen no desear sumisas obedientes. Si usted está teniendo problemas en entrenar a su sumisa para que desobedezca, aquí hay algunos consejos provechosos:

1. Sea inconsistente
Una de las primeras cosas que usted puede hacer para confundir y desorientar a su sumisa es cambiar constantemente sus reglas. Si ayer ella tuvo que pedir permiso para sentarse en los muebles, no haga que lo pida hoy. Entonces, mañana cuando no lo pida, ¡Esté seguro de castigarla severamente! Escoja decirle que las reglas cambiaron o déjelas adivinar. Dejarlas adivinar en cuanto a cuáles son sus reglas es una manera segura de lograr un mal comportamiento.

2. No las considere como individuos
Éste es un consejo sutil. Cuando usted esté haciendo reglas, haga que las reglas se basen en la personalidad algún otro usted conozca. Si su sumisa es una persona diurna, insista que permanecen despiertas hasta las 2 de la madrugada todos los días. Si su sumisa es vegetariana, ordene únicamente platos a base de carne para la cena, y cuando rechace comer su cena, haga que quede con hambre. Su sumisa comenzará a cabecear de sueño, especialmente si tiene que levantarse temprano por la mañana, y entonces usted obtendrá una sumisa desobediente.

3. Tenga expectativas poco realistas
Insista en que su sumisa mantenga una casa inmaculada, y no haga nada para ayudarla. Ni siquiera lave el vaso que utilizó luego que ella ha sido llevada a la cama. Siéntase libre de castigarla por esto. Si su sumisa ha estado trabajando hasta tarde, insista en que, a pesar de ello, tengan una cena de tres platos cuando usted llegue. Esto funcionará aún mejor si usted llega a casa antes que su sumisa.

4. Ignore completamente la manera en que funciona el cuerpo humano
Si usted ha eyaculado en su boca y le ha permitido tragar, cuente eso como la comida del día. Si su trasero está completamente marcado y ella usa una palabra de seguridad para decirle que ha ido más allá del dolor tolerable, ignórela y continúe (el dolor siempre es bueno, ¿correcto?). Permita solamente que duerma 4 horas por noche. Insista en una sumisa desnuda todo el tiempo, sin importarle la temperatura del día y la temperatura natural de su cuerpo.

5. Irrespete las palabras de seguridad
Ignore por completo las palabras de seguridad, o incluso niéguese a establecerlas desde el principio. Después de todo, si realmente confiaran en usted, no necesitarían palabras de seguridad. Niéguese a escuchar. Si su sumisa intenta decirle que las cuerdas están demasiado apretadas o que usted está azotando sus riñones, tome eso como que ella simplemente se hace la difícil. Hágala luchar si quiere salir de una sesión.

6. Rechace escucharlas
Recuerde, las sumisas están allí para ser guiadas y dirigidas. No pueden pensar por sí mismas y realmente no saben lo que  están sintiendo. Siéntase libre de señalarles esto claramente, y rechace darles un espacio abierto para discutir ideas. Si aún así intentan presentar sus propios pensamientos, deséchelos inmediatamente o castigue a su sumisa por ser presuntuosa. De cualquier manera, niéguese a escuchar lo que están diciendo.

7. Jamás la elogie
Elogiarla hará que la cabeza de su sumisa se inflame. Comenzarán a pensar sobre su posición, y comenzarán a sentir orgullo y disfrute por sus actividades. Usted debe controlar esto estrictamente. Su único placer debe venir de usted, en intervalos medidos. No le diga que ha hecho algo bien o que lo ha complacido. Si usted la elogia, la arriesga a que gane un sentido de valía de ella misma y entonces ¡¿para qué lo necesitará?!

8. Su placer es el único placer
No permita que su sumisa haga algo que la satisfaga. Esto va en dos sentidos: por un lado esto significa eliminar todos sus intereses exteriores a la relación (esto incluye hacerlas distanciar de sus amigos); también significa que usted debe supervisar qué actos de sumisión le resultan placenteros a su sumisa. Elimine esos actos, y nunca le permita realizarlos. Es aún mejor si usted es evidente sobre este punto. Si a su sumisa le complace atarle los zapatos, átelos usted mismo delante de ella. Y todavía mejor si lo hace mirándola con burla.

9. Nunca la deje hablar con nadie más, especialmente con nadie del ambiente BDSM
Usted debe supervisar muy estrictamente todo estímulo posible. Preste especial atención a mantenerla lejos de otra gente de la vivencia BDSM, ya que  usted no puede estar seguro sobre qué nuevas ideas puedan sugerir otros a su impresionable sumisa. Usted no quiere que su sumisa pueda “comparar apuntes” con otras sumisas, pues esto tiene el efecto potencial de cuestionar sus decisiones como Amo.
Evite particularmente permitirle que hable con otros Dominantes. Los otros Dominantes pueden proporcionar demasiada información y hacer que su sumisa forme sus propios pensamientos. Recuerde que usted quiere evitar a toda costa que ella tenga pensamientos propios.

10. Rompa sus límites
Desatienda completamente los intentos de su sumisa de fijar límites. Una sumisa no tiene ningún derecho a los límites. Afírmese e insista que usted hará cualquier cosa que usted desee, y ella está obligada a seguir cualquier idea que a usted se le ocurra que ya es tiempo de explorar. Ésta es la única manera de ayudar a una sumisa a aprender y crecer. Un buen ejemplo de esto es lanzar arañas a la cara de la una persona con aracnofobia. Así como ayudará a los aracnófobos para superar sobre su miedo a las arañas, romper los límites de su sumisa le ayudará a superar sus repulsiones. No haga caso de los liberales absurdos que dicen que estas prácticas solamente reforzarán sus miedos.

Conclusión
Este es un buen comienzo hacia cómo educar una sumisa desobediente. Bajo estas condiciones, una sumisa eventualmente actuará y se afirmará. Usted se encontrará con una sumisa desobediente y, muy probablemente, irrespetuosa, lo cual es lo que usted quería desde el principio ¿Cierto?

Aclaro, he sido totalmente sarcástica en escribir este texto. El punto central del texto es éste: si usted se reconoce aquí en estas descripciones generales y usted tiene un sumiso desobediente, es muy probable que eso lo explique. Las sumisas desean hacer su mejor esfuerzo, pero somos solamente humanas. Ser tratadas como un ser humano es lo primero. Entonces exploren nuestra sumisión con nosotras, y juntos podemos ir a lugares sorprendentes.
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