Había alguien en IG con quien nos seguíamos mutuamente, no sé el motivo por el cual lo hacíamos pero era una de esas personas que uno sabe que es muy atractiva pero ignora por ese mismo hecho, el caso es que durante un tiempo me estuvo reaccionando a muchas publicaciones e historias, día a día ponía el fueguito, el corazón o dejaba su respectivo like; habían ocasiones en las cuales compartíamos mensajes, pero eran muy cortos o secos, hasta que una tarde me dijo que fuera a su casa, el man era lindo; se notaba por sus fotos que no era alto, era delgado,esbelto, blanco, cabello negro, cejas pobladas y unas facciones muy pulidas. Creí que me estaba tomando del pelo, suelo desconfiar de personas que son muy atractivas y tienen muchos seguidores en redes sociales, pero me ganó la curiosidad y accedí, nos encontramos a una cuadra de donde vivía porque no conocía muy bien ese sector, en persona era idéntico a las fotos, un poco más bajo de lo que esperaba, pero no cambiaba mucho, nos saludamos y conversamos de camino a su casa.

Bueno, cabe aclarar que el man no es de esta ciudad, es de la costa, vivía acá por cuestiones académicas mientras decidía qué qería estudiar. Entramos a la casa y fuimos hasta la habitación, allí se quitó la camiseta y pantaloneta; era bastante blanco con un leve bronceado, tenía una sonrisa linda, bastante "encantador", nos besamos y me mandó su mano a mi entrepierna, sin despegar nuestros labios nos acostamos en su cama, estuve sobre él y se sentía particular, eran muy delgado lo que me daban ganas de apretarlo fuertemente y eso hice, mientras mis manos lo apretaban de las crestas iliacas fuertemente bajaba por su cuello besándolo y lamiéndolo, tenía un sabor suave, agradable, estaba caliente y se le escuchaba jadear (gemir; le lamí todo el torso, accilas, abdomen, pecho, mordisqueaba sus tetillas rosadas mientras que él se retorcía y quejaba, mis manos no los querían soltar y menos al ver que se podía soltar en cualquier momento.

Lo volteé y le bese la nuca, mordía su espalda, la apretaba y podía ver cómo mis manos se marcaban en sus omoplatos, mi lengua recorría desde su nuca hasta su cintura, mis labio apretaban eventualmente su camino, hasta que llegué a su brief, le halaba el elástico con mis dientes y mis manos apretaban sus nalgas, el man me pidió que me quitara la ropa y eso hice, me quité mis bóxer y jugaba con mi pene al rededor de su brief, él se los quitó y se quedó bocabajo, aproveché entonces y pasaba mi pene entre sus nalgas, para ser delgado tenía un buen culo, redondo, blanco, con la marca del bronceo, parecía que acostumbraba ir a piscina, él también comenzó a moverse y estuvimos en esas un buen rato, luego, se volteó y encima de él lo besaba, estaba erecto, me sorprendió que lo tuviera tan grande como yo, considero que mi pene es grande, y él de él era del mismo tamaño, no tan grueso, pero no era delgado.

Me hizo acostar se pegó a hacerme oral, se lo tragaba muy bien, podía sentir su garganta húmeda y caliente mientras mi pene se habría paso allí, ocasionalmente daba arcadas, pero estaba pegado chupándomelo entre distintas velocidades e intensidades, me dijo que quería hacerme venir así, pero le dije que no perdiera el tiempo, que eso no sería posible, no me vengo cuando me hacen oral, es raro, lo sé, pero así son las cosas, el man entonces se sentó encima de mí y comenzó a jugar con mi pene entre sus nalgas, él tenía el control y lo disfrutaba, se frotaba de arriba a abajo y podía sentir como mi pene pasaba entre la división de sus nalgas, al final sacó un condón y lo penetré, pero fue extraño, cuando lo tenía dentró el man de una se vino y me pidió que se lo sacara, me sentí usado ajajaja, pero ni modo, nos quedamos acostados mientras le acariciaba su cabello, él me besaba el pecho y cuello, nos quedamos dormidos y al rato me fui.

Lo olvidaba, el man tenía 18 años, cumplidos hacia 1 o 2 meses, en ese momento yo iba a cumplir 21, puede que la diferencia no sea mucha, pero para mí lo era.