Una tarde de desparche
Resulta que el man me dijo que ya me había visto por el barrio, pero que yo era mero pica'o mientras me besaba.
Perrita pasiva
Cada vez que golpeaba sus Güevas el man gemía y pedía más.
Cruising con un amante de los pies
--Nada de besos-- dijo mientras me agarraba la verga sobre el jean y tanteaba lo que yo tenía. --Metámonos a esa cabina--, dijo mientras me agrraba la mano para que lo siguiera.
En el salón de clases
Terminamos 5 dentro de un salon voliando paja, mamando y punteando.
Banco de leche
Cuando metí mi mano para dilatarle el culo a punta de dedo me di cuenta que ya lo tenía baboso --¿cuántos se han venido dentro de ti ya?-- pregunté, --2, creo-- me dijo; me puso a mil y quería sentir cómo lo dejaron de abierto.
En la casa vacía de su abuela
Sus besos eran dulces y suaves, su respiración era pesada y jadeante, mientras mi pene entraba en su recto nuestras lenguajes se tocaban cálidamente.
Mi primer cruising
Antes la palabra que se escuchaba era rastrojear, la primera vez en esta práctica fue incómoda pero excitante y más con el man de mi primer trío.
Mi primer extranjero
Hace años, cuando no habían smartphones y apps, tocaba cuadrar roce por otros medios, aún recuerdo a Jhon y su arrechera por comer culo y verga.
Morbo en las duchas
Las duchas de los gimnasios y las universidades siempre serán algo excitante. Ver manes de todos los tamaños, con vello, sin vello, fornidos, escuálidos o trozos, mojados por el sudor y el agua es una delicia.
Descubriendo el fisting parte 2
Los dos nos turnamos para meter las manos dentro de su culo, las girabamos un poco y lo hacíamos rápido, su ano estaba abierto y se podía ver el interior rosado mientras el man estaba boca abajo pidiendo más.
Con mi profesor de la U
Me recibió en brief blancos ajustados que le marcaban la verga y el culo, estaba asombrado por el buen cuerpo que tenía y pensando en si me lo iría a comer.
Con un extranjero en el sauna
Solo podía sentir sus piernas musculosas chocando fuertemente contra las mías, sus más de 21 cms entrando y saliendo de mí mientras decía palabras que no entendía. La barrera idiomática no importa cuando hay sexo de por medio.
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