Guía Cereza
Publica tu Experiencia

Relatos & Experiencias

Moteleadas: Historias Inéditas De Sus Trabajadores

Realizado por: Andrea Boteroandrea@guiacereza.com

Hace varias lunas, en una noche de insomnio, escuché en el programa 'picante' de una emisora local, la denuncia de un oyente que se quejaba por la mala experiencia que tuvo alvisitar uno de los cientos de moteles de Medellín. 

El pobre hombre denigraba del motel, ya que mientras estaba en el momento más intenso y romántico con su pareja… la mujer del aseo irrumpió en la habitación para realizar sus labores de limpieza, por lo cual el oyente la recordaba como un ser 'pervertido, enfermo y chismoso'.

¿Qué historias podemos recoger de los moteles en Colombia?

¡Labor de nunca acabar! Por cuestiones de trabajo, hablando con la recepcionista de otro motel en Medellín, le conté la anécdota radial  y ella me confesó lo que temía: muchos clientes llaman a la recepción, casi a diario, para preguntar si hay un empleado del motel disponible, para que ingrese a la habitación y observe cómo tienen sexo sus ocupantes.

Maria Fernanda, Alexander y Jaime (nombres cambiados), trabajan en moteles locales y no dudaron en contarme algunas de sus historias laborales, de la vida en un motel. 

Servicios extra

Para ellos, es común recibir llamados de los clientes solicitando 'servicios extras', que van más allá de lo tradicional y que se espera del equipo de trabajo de un motel, como encender el jacuzzi o pedir alimentos a la habitación. 

Ellos han recibido llamadas para solicitar mujeres acompañantes, invitaciones a integrarse en las orgías, ir a ver cómo tienen relaciones, solicitudes para tomar fotografías o filmar el encuentro y pedidos de objetos como botellas, plátanos e inclusive barra de salchichón.

María Fernanda, administradora de un motel del sur de Valle de Aburrá, tiene un mensaje para este tipo de huéspedes:

"señor visitante de moteles: SI USTED SE ENCUENTRA EN ESA SITUACIÓN,  recuerde que a la recepcionista o señora del aseo no le interesa ver cómo tienen sexo, tampoco tenemos tienda de abarrotes o salsamentarías para conceder sus deseos y mucho menos tenemos la autorización para evaluar las proporciones de sus cuerpos"...

Ya que a nuestros personajes  también los han llamado para pedirles que den su criterio personal acerca de qué tan buenos o buenas están. 

Alexander, encargado del Aseo en uno de los nuevos y flamantes moteles del Centro de Medellín, agrega que:

"Por favor recuerden siempre que en la mayoría de moteles de la ciudad no se hacen responsables por los objetos personales dejados al interior del cuarto, así que antes de salir asegúrense de que guardaron bien su barra de salchichón consoladora, ya que todos los cuartos, una vez son utilizados, pasan por un meticuloso proceso de limpieza y desinfección". 

Cuenta que tuvieron una pareja que regresó una hora más tarde, a pedir el salchichón que dejaron destapado 'y con claras señales de uso' en la mitad de la habitación.

¿Gritos de placer o de dolor?

Cuando un cliente ingresa  a un  cuarto de Motel, este espacio se convierte en un lugar  privado y personal, lo que pasa adentro de la habitación es ajeno a los trabajadores.

Tip GuíaCereza:si tu pareja se torna agresiva, apasionada o muy dominante, olvídate de  pedir ayuda a gritos, ya que tus palabras  se confundirán con las de muchos otros clientes que prefieren el sexo fuerte. 

Como nos cuenta Jaime, vigilante de un complejo motelero en el sur de Medellín: "estamos acostumbrados a oír quejidos y acudir a ellos pensando que se trata de algo grave o violento, lo cual nunca ha sido el caso hasta ahora". 

María Fernanda, que trabaja en un motel que se distribuye en cabañas independientes, nos cuenta que es muy privado y poco relevante lo que los visitantes hacen dentro de cada suite, pero ha tenido clientes que no esperan a ingresar a la cabaña para empezar la acción y ha visto cómo muchos de ellos  se entregan a la pasión en la portería.

¿Usted que haría en esa situación? ¿les saca una cama? ¿Les cobra la hora de estadía en el andén?

Aconsejamos que para evitar molestias, interrupciones o fotos tomadas con el celular de la pareja vecina, contengan un poco sus ganas hasta entrar al cuarto y tener la puerta bien cerrada. 

Un miedo común es encontrarse a alguien conocido en dicho lugar y lamento decirles que ESTO SÍ PASA. Cuenta Alexander que:

"he visto padres e hijos saludándose, esposos, esposas, primos, tíos, sobrinos... y muchas personas que casualmente se encuentran a la misma hora en el mismo lugar, o en algunos casos no son encuentros fortuitos sino planes fríamente calculados en los que principalmente los HOMBRES van a confirmar si sus mujeres están yendo a ese lugar con los amantes". 

¡Estimados lectores!

¿Qué historias o anécdotas personales tienes de tus moteleadas y cómo reaccionaste frente a éstas?  

¿Te gustaría conocer más de estas anécdotas?

guiacereza

Soy hombre heterosexual

visitas: 6474
Categoria: Artículos GuiaCereza
Fecha de Publicación: 2015-05-19 17:16:01
Más Relatos Por GuiaCereza
Compartir en:

1 Comentario

Hola

recuerdo una vez que entrando aun motel en la recepcion se encontraba una señora de unos 65 años con un joven de 22, para mi fue normal lo gracioso eran los gritos de la señora en la abitacion que los empleados tuvieron que tocarle la puerta para que moderara sus gritos. 

Fue una experiencia unica estabamos mas pendientes de lo que gritaba la señora que nosotros en la abitacion.

Halgo que siempre nos daba temor al ingresar a cualquier motel era si detras de todos los espejos gurdaban camaras.

ya que eso se puso de moda en algunos moteles de otras ciudades.

espero le guste mi aporte

2015-05-21 09:56:22