Guía Cereza
Publicado hace 14 años Categoría: Sexo con maduros 2K Vistas
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Al día siguiente de mi encuentro “salvaje” con mi amigo del chat, madrugue al gimnasio como era mi costumbre en ese tiempo. Hice mi rutina normal cardio, luego pesas y cuando me dirigía hacer nuevamente cardio, encontré que había demasiadas personas y en mi actitud antisocial que me caracteriza en el gim, -yo voy hacer ejercicios no amigos-, decidí subir al segundo piso hacer spinning pero para mi sorpresa había otra persona, ya ni modo me toco sentarme en la bicicleta continua a este hombre.

Inicio la conversación,- que pereza, pero de todas formas estando al lado ni modo de no responderle-, ahí me entere que le gustaban las cuatrimotos y salía a montar con unos amigos, al preguntarnos la edad supe que me llevaba 20 años. Y finalmente me invito a desayunar, a lo cual acepte un tintico no más. Los siguientes días nos seguimos encontrando,hasta le di mi número de cel, porque quería invitarme a salir y le propuse que fuera a visitarme a mi casa y así ocurrió.

Ya en mi casa hablamos de todo un poco y de pronto llego al tema de las partes del cuerpo, pregunto:

¿Cuál es la parte que no te gusta? - le dije que ninguna; no soy perfecta pero en verdad me gusta todo mi cuerpo, me disgustaría que me faltara alguna.

¿Cuál es la que más te gusta? -mis piernas. -Y el comento que también tenía unos senos muy bonitos, -en serio, ¡que sorpresa! - Hablamos del auto examen de los senos para detectar alguna anomalía, - si claro que me lo hago.

¿Podría verlos? -pues claro, si ya parecía en el médico-. Hice gala de mis dotes teatrales y me comporte como la niña inocente, le mostré mis senos, recibí halagos, y algunas observaciones. Aunque hizo todo lo posible por disimular su cara de morbo, se le noto y eso me encanto, pero yo seguí en mi personaje.

Al siguiente día salimos a comer un helado, extrañamente muy cerca de su casa, me dio un montón de consejos para el futuro- esto ya se estaba tornando aburrido-. Pero quedamos de salir al siguiente día a tomarnos unas cervezas, y resulte otra vez muy cerca del peligro, mientras nos tomábamos una cerveza -el no muy adepto al licor-, me invitaba a conocer su casa, yo con algo de inseguridad –fingida-, y después de asegurarme que no me iba a pasar nada malo, acepte ir.

Al llegar encontré una casa impecable, de esas que da miedo sentarse porque todo esta ordenado milimétricamente, hablamos un rato en la sala, del stress de la universidad, y hicimos el respectivo recorrido por la casa hasta llegar a la ultima habitación, me ofreció un masaje para liberarme de las tensiones, el cual muy tímidamente acepte, me recosté sobre su cama boca abajo, y empezó con mi espalda,me recomendó que era mejorsin ropa, y pues como no decía mentiras, me quite la ropa y quede en interiores. No lo hacía nada mal, pero extrañamente mi brasier le estorbaba, y procedió a desabrocharlo, sus manos masajearon todo mi cuerpo desde mi espalda, brazos, nalgas, hasta mis pies, -mientras yo trataba de mantener mi facha de niña inocente y no mojarme. De pronto se acerco y me susurro al oído que me volteara para continuar el masaje, sostuve el brasier, pero me dijo que era mejor sin él.

Sus manos no dudaron ni un momento y se posaron en mis senos masajeándolos suavemente, y mis aureolas recibieron pequeños pellizcos. Yo tenía los ojos cerrados,-para aumentar mi relajación-. De pronto sus labios me besaban, al sentir esa caricia mi cuerpo se estremeció pero continúe inmóvil con los ojos cerrados, y sus labios jugaron con mis senos, su boca los succiono, su lengua fue bajando por mi abdomen y volvió a mis pechos. Ya esta altura estaba excitadísima, pero trataba de seguir como la niña buena…. que soy.No movía ni un dedo, él era el lobo que llevo a caperucita roja a la trampa, entonces que hiciera bien su trabajo.Su lengua saboreaba mi cuerpo, mientras sus manos me guiaban hacia el borde de la cama, sentí su cuerpo encima del mío, su boca cerca de la mía, y respondí a su beso demostrándole todo el placer que sentía. Siguió recorriendo mi cuerpo hasta llegar a mi vagina, su boca besaba alrededor, su lengua se coló por entre mi tanga, con sus dedos comprobó mi humedad sin hundirlos en mi sexo, me desnudo completamente, y su lengua se movía alrededor de mis labios externos, les daba mordiscos, se ayudo con sus dedos y abrió mi labios para acceder más profundamente, mis piernas empezaron a temblar involuntariamente, mientras él se deleitaba con mis jugos, por fin acabo con su dulce tortura y su lengua roso mi clítoris mientras yo estallaba en placer.Mis piernas temblaban, era incontrolable, al abrir mis ojosvi como se ponía un condón, y si en algún momento dude que me penetrara, ahora todo mi cuerpo lo exigía, me beso y coloco su pene a la entrada de mi canal vaginal, subí mis caderas para permitirle el acceso y me penetro, una y otra vez, estaba tan excitada que no tarde en venirme otra vez, y las contracciones de mi vagina hicieron que el no resistiera mas y se desplomara sobre mi.

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🍒 Pregunta Cereza

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