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depues de lo que sucedió en la oficina de mi abogado en https://www.guiacereza.com/relatos/Mi-abogado-su-cliente-y-un-tr-o-inesperado_id7929.html Al mes siguiente Mi abogado me mostró un correo en el que El cliente pedía otro trío con mas sexo, quería sentir que se vinieran dentro de su culo y que aunque le dolió al principio, le gustó la forma en que me lo comí por detrás. Decía el cliente que había vivido con nosotros una una experiencia que calificó de genial y que le gustaría repetirla.Le pidió a mi abogado que hiciera las gestiones para el probar penetrar a un hombre y que le gustaría que fuera yo. No lo culpo, mis nalgas son grandes, firmes vírgenes y masculinas.
Le dije que la idea no era mala pero que esto era nuevo para mi y que no lo descartaba pero que no podía prometerle nada pues tenía temores serios acerca de ser penetrado por una verga y mas como la de su cliente que era jugosa, larga y firme! Me dijo mi abogado que se habían visto en su oficina una semana antes y que hablaron de sitios gay y les dio curiosidad por ir a conocer un sauna. Ese día por cuestiones de tiempo no tuve ninguna interacción con mi abogado, a él le llegó una cita antes de tiempo y en vista de que había terminado mis asuntos legales, me despedí antes que otra cosa.
Empecé a pensar en un sitio como un sauna y a buscar e indagar acerca de esos sitios, aunque muchos comentarios no eran positivos, la idea de compartir la desnudes con hombres me empezó a parecer excitante. A los 5 días le envié un email a mi abogado proponiéndole que nos viéramos en un sauna o un club y que haya podríamos seguir lo que habíamos empezado con su cliente, propuse una fecha y a los 15 minutos me llego la respuesta de mi abogado proponiendo un sitio y una hora que ya había conversado con su cliente, me pareció bien y respondí que si, ya teníamos una cita.
El día llego y la hora era las 3 de a tarde, a esa hora esos sitios no deberían estar muy llenos y asi no tendríamos compromiso de nada podríamos solo conocer, pues el tema era nuevo para nosotros y no sabíamos cómo nos sentiríamos. Había hablado con mi abogado y quedamos en que el que fuera llegando iba entrando. Yo me moría del miedo que alguien me viera entrar o salir del sitio entonces cuando llegara tenía claro que entraría de una.
El lugar no tiene avisos, es una puerta que lleva a un segundo piso, hay un pequeño timbre a la entrada el cual toque con más miedo que vergüenza, un señor abrió la puerta y al entrar me sentía oculto pero seguro y pensé en ese momento: “Ya estoy aquí, si no me gusta me voy y si me gusta me lo gozo, asi es que relajémonos y a disfrutar!”
Al parecer ni mi abogado ni el cliente habían llegado, me entregaron una toalla diminuta, una chanclas y un candado con un numero (era el 15) al llegar a un cuarto de lockers, caí en cuenta que significaba que había otras 14 personas, número muy superior al que yo esperaba. Cuando entre a ese cuarto había un señor cambiando su ropa y decidí hacer lo que él hacía, creo que mi novatada se notaba a leguas pero trate de minimizar las consecuencias de mi susto.
Me desnude, me envolví en la toalla, puse las chanclas bajo mis pies y me lance a conocer este nuevo mundo para mí. Había varias puertas abiertas y al asomarme se veían Televisores corriendo cine Gay, en una habitación habían tres personas que solo miraban al TV y en la otra había un solo señor que muy amablemente me invito a seguir, yo pase por descortés pues ignoré su invitación. El sitio olía todo a eucalipto, habían hombres que iban de aquí para allá, como mirando en cada sitio quien había y como cazador merodeando su presa.
Llegue al a zona húmeda y había dos puertas, una del sauna y otra del turco, antes había una terraza en la que dos personas se bronceaban boca abajo desnudos. Yo quería conocer el turco y entre de inmediato como queriendo sentarme un rato
Al entrar vi de frente un culo asomándose por debajo de una toalla, era una persona agachada mamando una verga; la verdad había leído que el sexo en esos sitios no era necesariamente tan abierto pero me impacto ver la escena y me gusto la forma en que me recibieron. En lugar de hacerme al lado de esta pareja me hice al otro lado junto a dos señores mayores que yo, desde ahí los tres observábamos una clínica de sexo oral que estaban dictando a dos metros de nosotros. Un señor a mi lado mando su mano a mi entrepierna y mi reacción no fue positiva, me corrí un poco sin decir palabra y quede cerca de la pareja. Cuando el mamador se puso de pie me di cuenta que era el cliente de mi abogado que al parecer había llegado temprano y no había perdido el tiempo. Creo que él no pudo verme y yo como asustado me Salí del turco y me fui a recorrer el sitio; cuando estaba por entrar a una ducha, escuche mi nombre y era él, lo salude como si nada hubiera visto y me dijo que estaba en el turco que había llegado temprano y que mi abogado lo había llamado para avisarle que no podía ir. Le pedí que me esperara mientras me duchaba y a l entrar dejé la puerta entreabierta como sugiriendo que entrara conmigo. Como a los 30 segundos la puerta se abrió y era el cliente pero no estaba solo, entro acompañado por el señor al que se lo estaba mamando en el turco, era un señor mayor que nosotros, muy atlético, con una verga pequeña. Rápidamente se metieron debajo del agua conmigo, el cliente estaba arrecho y me abrazo por detrás, su nuevo amigo se hizo delante de mi dándome la espalda, mi erección no se hizo esperar y fue interrumpida por sus nalgas. El señor se volteo y trato de darme un beso a lo que me le hice el loco volteándome y pude sentir su verga en mi culo y sentí como mi verga se tocaba con la del cliente que la tenia grande y parada desde que me acaricio la espalda y puse su verga entre mis nalgas. Yo estaba muy excitado, el otro señor me cogía la verga y la punta jugaba con la verga del cliente que me dio un abrazo y por encima de mi hombro se dio un beso con el nuevo amigo. De inmediato le cogí las nalgas al cliente y el señor beso las mías de manera intensa, el cliente me dijo “Quiero que me lo mames” y aunque yo nunca había tenido una verga en mi boca, me pareció una situación ideal que quería vivir hacía varios días.
Le propuse que nos saliéramos de la ducha y buscáramos un sitio donde pudiéramos hacerlo, entramos los tres a un cuarto de video que estaba solo, cerramos la puerta y el cliente se sentó en una silla plástica, mostrando su verga, la cual cogí en mis manos y me agache para poder mamarla adecuadamente. Sentí un susto y una excitación infinita, puse su verga en mi boca muy despacio, como queriendo hacerlo muy bien, le di primero chupadas lentas y después trate me metérmela toda en la boca, estaba recién rasurada, lo que la hacía ver más exquisita. Aceleré el ritmo de la mamada y con mi lengua jugaba con la cabeza de su verga, mientras tanto nuestro amigo se inclino detrás de mí para besarme el culo y para darme mucha lengua, sentía que me estaba metiendo la punta por el ano y a mi me gustaba.
El cliente gemía de placer y yo aceleraba la mamada, creo que lo hacía muy bien, me encantaba la sensación de una verga entrando y saliendo humedecida por mis labios, se lo mamé con toda gana, le chupaba literalmente la verga como si fuera un dulce.
En un momento el señor paró de darme lengua y nos pidió que lo dejáramos mamar a él ya que era pasivo y quería sentir vergas por todas partes. Yo atiné a decirle al cliente: “Le llegó la oportunidad de probar un buen culo y penetrarlo”, a lo cual reaccionó poniéndose de pie y cogiendo al amigo, llevándolo a una camilla y acostándolo boca arriba diciéndole: “quieres verga, te vas a comer toda esta”. Con un poco de saliva lubricó el ano y procedió a poner su verga ahí para entrarla lentamente, después de un inicio lento empezó a bombearle sexo a nuestro amigo y se acostó encima de él. Por la posición, el culo del cliente quedó a mi vista, a lo cual reaccioné poniendo mi lengua ahí mismo para lubricarlo un poco. Ese culo olía a sexo, olía a macho y me gustó; después tomé mi verga y la metí en su culo, sin esperarlo y sin pensarlo, el cliente estaba dando y recibiendo verga, el señor no podía abrir ni los ojos de placer, yo en la camilla de rodillas, detrás del cliente clavándomelo y él, acostado, encima del señor dándole una clavada monumental.
No nos costó sincronizarnos después de tres movimientos empujábamos y sacábamos la verga al tiempo, yo estaba muy excitado y le decía al cliente cosas morbosas al oído, le dije que le prometía mi culo si seguía portándose así de bien; también le dije que tenía un culo delicioso y que su verga se veía magnifica entrando en ese otro culo. El cliente me cogía las nalgas mientras bombeaba el culo de su amigo cuando de pronto sentí que me iba a venir y aunque me muero de ganas de venirme dentro del culo de un macho, no me atreví a hacerlo y saque mi verga para venirme en la espalda del cliente…. Al sentir el calor en su espalda el cliente soltó un alarido y se vino, el si dentro del culo de su nuevo amigo… se vino en una cantidad tal que empezó a salir semen del culo del señor….
Tal y como hacia mes y medio, nos habíamos venido al tiempo y habíamos disfrutado de maravilla y él decía a todo pulmón que era lo más rico que había sentido, clavar y ser clavado a la vez. El amigo no se quedo quieto y empezó a mamarme la verga a limpiar el semen que quedaba y mamaba la del cliente como limpiando la evidencia.
Nos devolvimos a la ducha y el amigo siguió mamando las dos vergas pero ya estábamos exhaustos y aunque agradecidos, le pedimos al amigo que parara y el cliente empezó a masturbarlo hasta que lo hizo venir con su mano izquierda mientras con su derecha me acariciaba el culo diciéndome que eso iba a ser suyo muy pronto. Salimos de la ducha y la verdad quería irme rápido, pero antes de despedirme le propuse que el próximo culo que nos comeríamos los dos sería el de mi abogado, a lo que el respondió con una sonrisa aceptando la idea.