Un día cualquiera estábamos mercando y por la compra de un producto, se participaba en la rifa de unos viajes a varios destinos. Mi Dany llenó la boleta y dijo, que tal que seamos tan de malas y nos ganemos un viaje a San Andrés.
A mi particularmente me gustaba mucho San Andrés por sus playas, su mar y porque la verdad la última vez que habíamos ido, mi Dany me había regalado a un español, con el cual tuve una tremenda faena.
Por esos días andaba no sé, como que los calores se me suben a la cabeza y siento unas ganas tremendas de estar haciendo el amor. La verdad mi Dany es arrecho, pero circunstancias laborales hacen que a veces pasen varios días, sin que tengamos sexo. Es tanta la calentura, que un día, Dany me llamo y dijo que tenía una reunión y que por ende iba a llegar tarde.
Sentía mi vagina mojada, decidí ponerme la piyama, una batola fresca por el calor, quitándome los brasieres y las tangas. Me acosté y pasé mi dedo por mi clítoris, empecé sobarlo, mojé el dedo con un poco de saliva y puse el clítoris húmedo. Con la otra mano, me penetraba con dos dedos. Mi vagina estaba cada vez más húmeda. No aguante más y decidí sacar mi vibrador, el amigo fiel. Su tamaño es de 22 centímetros. Suavemente empecé a penetrarme, lo puse en un término suave para sentir más placer. Introducía suavemente su cabeza y bombeaba poco a poco. Llegó al punto de arrechera que lo introduje todo y lo bombeaba rápido. Rozaba mi juguete con mi clítoris al momento de introducirlo. Mi vagina estaba bien húmeda, ya chorreaba mi blanca leche sobre mi vibrador. Bombeaba rápido y sobaba cada vez más mi clítoris, hasta que no aguante más y tuve tremendo orgasmo. Quedé bien exhausta y mi cuquita chorreando de lo arrecha que estaba. Me duché y me acosté quedándome dormida como una bebe, tanto así que no me di cuenta a qué horas llegó mi Dany.
El fin de semana, Dany me invitó a salir para votar tanto estrés de la semana. Fuimos a una taberna que nos gusta mucho por la música y porque es oscuro y permite la privacidad de las parejas. Pedimos unos tragos, a mí siempre me fascina un margarita, eso sí, no puedo tomar muchos porque me prenden ligero. Mi Dany me empezó a besar de una forma que hacía rato no lo hacía, con pasión, nuestras lenguas se entrelazaban, mordía suavemente mis labios y de repente sentí su mano en mis senos. Yo respondí de inmediato mandando mi mano a su pantalón y sobándole el pene. Empecé a sentir que se ponía erecto. Decidí desabrochar su pantalón y empezar a chuparle su verga. Le besaba su cabeza, le pasaba mi lengua suavemente, bajaba hasta sus huevos y subía nuevamente y trataba de tragármelo todo. Ya para ese momento mi cuquita estaba húmeda y ansiosa de verga. Le dije a Dany que quería que me chupara mi clítoris, pues estaba arrecho. Como llevaba un vestido suelto, me paré, corrí mi tanga y prácticamente le puse mi vagina en su cara. El empezó a pasar su lengua por mi clítoris, que ya estaba rojo y grande de lo arrecho. Pasaba la lengua por sus labios y luego me penetraba un poco con ella. Así estuvimos como 10 minutos y ya había pasado el mesero.
Dany me decía que si paraba, yo le decía que no fuera a parar, me preguntó que si nos veía el mesero, le conteste que no me importaba que nos viera, antes mejor para que se pusiera arrecho. Me dijo que si de pronto se animaba y se arrimaba. Yo le dije que rico, ojala pudiéramos hacer un trio, que hace rato no lo hacemos. Sin embargo nunca se arrimó y estaba tan arrecha, Dany seguía dándome lengua bien rico, hasta el punto que no aguanté más y tuve un orgasmo maravilloso. Me senté y le saqué nuevamente la verga a mi Dany. Ya estaba dormidita, pero con la forma como le pasaba mi lengua por su cabeza y huevos, se puso erecta en forma casi instantánea. Se lo chupaba y con la mano lo masturbaba. Al cabo de varios minutos, Dany no aguantó y se vino en mi boca. Era bastante semen. Tocó ayudarme con un trago para terminar de pasar todo ese semen. Quedamos como para cama. Esa noche, ya en casa, Dany me decía que si quería hacer un trio. Yo en forma picara, le dije que que creía. Él me dijo, que sí, que estaba ansiosa. Yo apenas me reí.
Al cabo de un tiempo, Dany recibió una llamada, que por la compra de un producto, se había ganado un viaje a Cartagena para dos personas con todos los gastos pagos. Cuando me contó, la verdad no le creí de a mucho. Le dieron un número de contacto para concretar la entrega del premio. Le dije que tuviera cuidado que no lo fueran a tumbar. Llamó y le pidieron unos datos y le dijeron que fuera a una Agencia de viajes, que allá le entregaban todo. Decidí que fuéramos los dos. A los dos días, decidimos ir a la agencia y cuando llegamos, nos encontramos con la sorpresa que era ciertooo!!!, nos habíamos ganado un viaje a Cartagena.
Lo podíamos tomar en un término no mayor a 60 días. Como el tema era de tiempo, decidimos esperar al puente más cercano y acordamos pedir en nuestros trabajos el día viernes para regresar el lunes festivo. Así fue. Llegado el puente más cercano, decidimos hacer unas maletas ligeras. La idea era pasar esos casi 4 días, conociendo Cartagena porque nunca habíamos ido.
Estando allá, nos tocó en un hotel llamado Dorado Plaza. Era muy bonito y cómodo. La habitación que nos dieron, estaba adornada con flores y champaña. Decidimos después del viaje, pegarnos una buena culiadita estrenando hotel. La cama era muy cómoda y mi Dany empezó a hacerme un sexo oral como lo sabe hacer él. Pasa con delicadeza su lengua por mis labios y luego por mi clítoris. Su lengua penetra mi vagina como si fuera un pene. Empiezo a ponerme muy húmeda. De repente saca mi juguete y empieza a penetrarme mientras chupa mi clítoris, que para esta época, está bien rojito y grande. En medio del bombeo, me dice que si no me gustaría una verga de verdad y yo le digo que sería riquísima. De tanto bombeo, no aguanto más y tengo un orgasmo fenomenal. Mi juguete sale blanquito de mis jugos mas deliciosos. Danny me penetra y empieza a bombear duro mi cuquita mojada, hasta que explota y me hecha todo su semen dentro. Exhaustos, me dice que debemos hacer un trio, porque lo necesitamos. Yo apenas sonrío.
Esa tarde fuimos de compras y Dany me regaló un vestidito blanco de tiritas que me llegaba casi a la rodilla. Cuando me lo medí, me quedó perfecto, porque no era tan pegado al cuerpo, más vale era tipo de danza.
Esa noche decidimos salir, Dany me dijo que me tenía preparada una sorpresa. Me puse el vestidito nuevo y decidí no colocarme ropa interior. Presentía que iba a pasarle deli.
Cogimos un taxi y Danny le dio unas indicaciones al taxista. Llegamos como a una discoteca o bar. Estaba muy oscura la entrada. Adentro, nos atendió una dama y nos llevó como a unas mesas, que eran pequeñas, pero que estaban alrededor de una pista. Nos trajeron una botella de wisky y soda. Al cabo de un rato, entra en escena una chica con un vestido apretado y empieza a bailar. Sale de repente un tipo con un jean sin camisa y con una camilla. La coloca en la mitad y empieza a bailar con la chica. La besa el cuello y empieza a zafar su vestido, quedando solamente en una tanguita, porque no llevaba brasieres. Ella se agacha, le quita el jean al chico y empieza a chuparle la verga de todas las formas posibles. Estando el tipo bien erecto, monta a la chica en la camilla, quita su tanguita y empieza a darle verga duro.
Mientras tanto, yo estaba sentada y Dany me dice que me siente en una pierna de él, empieza a bajar una tira del vestido y queda un seno expuesto, el cual es besado y chupado con mucha pasión. Con la otra mano, Dany empieza a acariciar mis labios y a masturbarme con un dedo. Luego baja todo la parte alta del vestido y mis senos quedan expuestos, los cuales son chupados por este con mucha pasión. Continúa acariciando mi cuquita húmeda y ya me ha penetrado con dos dedos.
Enseguida de la mesa hay una pareja, una chica chupándole la verga al tipo con que iba, el cual no hace sino mirarnos fijamente lo que hacemos. Dany le hace una seña para que se arrime. El lentamente pasa a la mesa y acaricia un seno con su mano. Su verga colgaba, no estaba del todo erecta. Decido acariciarla y masturbarla para que crezca. Dany me dice que se la chupe. Ante semejante sugerencia, decido pasar mis labios por su cabeza. Lamo toda su verga y chupo todo lo que más puedo. Mi Danny estaba pasando su lengua por mi cuquita y mi clítoris. Mi vagina estaba caliente y mojada. Dany decide subirme el vestido y me acuesta en el asiento y le dice al tipo que me penetre. Pone un condón en su verga que estaba bien erecta.
La pone sobre mi vientre y me dice, que la mire, que toda esa verga me la va a meter. Dany le dice que lo haga suavemente. Yo estaba ansiosa de sentir esa verga en mi cuquita. Mete su cabeza lentamente, siento que voy a enloquecer de sentirla como va entrando, poco a poco, bombea suave, lento, no pasa de su cabeza, empiezo a mover mi cadera para lograr más verga dentro de mí, no aguanto más y le digo que la meta toda. Me da con todo ese tipo. De repente el tipo para, me dice que me levante. Eso hago. El tipo se sienta y me dice que me suba. Veo esa verga erecta y me siento sobre él y empiezo a meterla lentamente, no aguanto y me siento sobre ella. Toda adentro, que sensación tan estupenda. El tipo aprovecha y chupa mis senos, muerde mis pezones con pasión, ya estaba arrecha. Estoy cabalgando, cuando siento a mi Dany acariciar mi anito. Mete su dedito y empieza a dilatar mi anito. Seguidamente introduce su verga por mi anito y empieza a bombear. Yo continúo con mi movimiento de caderas, bailando sobre las dos vergas que tengo. Casi 10 minutos después, el tipo me dice que pare y llama a la chica que estaba con él. Dany se retira y yo también. El tipo pasa a la otra mesa y pone a mamar la chica. Dany aprovecha y me empieza a bombear mi cuquita, hasta que estallamos al mismo tiempo, él derramando su leche y yo sintiendo un orgasmo vaginal deli.
El tipo se viene en la boca de la chica, la cual se traga todo el semen que sale de su verga.
Dany me dice que si conocemos el sitio. La verdad, estaba exhausta de esa faena. Le dije que mejor nos fuéramos para el hotel y descansáramos. Ese fue el viaje sorpresa a Cartagena.