Antes de contar la historia de las inquilinas les voy a relatar lo que pasó con Hernán.

Como en casi todos los hogares siempre hay un amigo de la casa, ese amigo universal que va donde no lo han invitado jijiji, y también cuando lo invitan, ese era el caso de Hernán es mono, tez blanca, vellos monos, él era huérfano de madre y vivía con su abuela y un tío, a la vuelta donde vivía mi madre, y pues iba a menudo a la casa de mi madre, allá charlábamos y también jugábamos futbol, montábamos cicla, en fin un amigo normal.

Para un fin de año se organizó el tradicional paseo de olla del 1 de enero, y adivinen quien se pegó, jijiji Hernán, así fue, como siempre todos trasnochados del año viejo, se alistó todo y nos fuimos para el rio, allá todo transcurría normal, las mujeres haciendo oficio, yo les ayudaba y los hombres tomando cerveza y en el rio, ya después de almuerzo descansé un poco y me fui al rio, allá con un balón nos pusimos a jugar con Hernán, inicialmente a cabecearlo de lado a lado hacer 21 y después ya comenzamos a jugar a quitarnos el balón.

Entonces, pues uno para proteger que le quiten el balón, siempre se lo coloca en el vientre y lo agarra con las manos, así hice, y Hernán se hizo detrás mío a tratar de quitármelo, en esas, claro el se arrimaba bien detrás mío y yo sentí su pene, se sentía mucho porque en ese tiempo se utilizaba mucho las llamadas “tangas narizonas” en licra, tanto yo lo sentía mucho como me imagino que el también sentía mis nalgas, y yo percibía que él lo hacía como a propósito, al tratar de quitarme el balón, de paso yo sentía que me lo sobaba, yo me le retiraba de una, y el volvía a hacer lo mismo, así duramos varios minutos hasta que nos cansamos y nos fuimos a ayudar a recoger las cosas y de regreso a casa.

Ya en la casa, como siempre las mujeres acomodando las cosas, y los hombres en la calle tomando cerveza, después que ayudamos con Hernán a acomodar todo, las mujeres algunas se fueron a acompañar a los señores afuera de la casa y otras se fueron a descansar, con Hernán como teníamos aun la ropa mojada nos fuimos a cambiar al último cuarto, allá en el cuarto entramos y deje la puerta entreabierta no la cerré, el se hizo a un lado y yo al otro, el se comenzó a quitar el buso y a mí de un momento a otro se me vino la imagen de los momentos que jugamos en el rio, y empecé a mirarlo de reojo, el se dio cuenta y de ahí se quito la pantaloneta de baño, al ocurrir eso yo de una baje la mirada y le vi, fueron instante rápidos que le miraba y me quitaba mi buso, Hernán se dio cuenta que yo le observaba mucho, y me dijo: Quieres?, y movió su cintura de lado a lado, claro el pene así mismo se le balanceo, yo le dije: tan bobo que le pasa.

Hernán con una toalla se comenzó a secar y yo seguía observándole de nuevo de la misma manera, la verdad no aguantaba y le miraba de reojo, el nuevamente se percató que lo observaba y me volvió y me dijo: Quieres?, ahí no le respondí nada, pero ahí fui más descarada ya no le observe de reojo sino que me quedé abajo viéndole fijamente, y me dijo: te gustó la sobadita en el rio?, ahí me di cuenta que lo hizo apropósito, yo le dije: tan bobo que te pasa, pero yo chistosa respondía pero no le quitaba la mirada de abajo jijijij, y ahí volvió movió su cintura de lado a lado, como provocándome y ahí me dijo: Ven, yo le contesté nada y me le acerque bien y quedamos ambos de frente, el con sus brazos los puso detrás mío y me agarró con cada mano una nalga y me las apretó y a la vez me dio un beso, yo me asuste toda casi me muero de la emoción, pero di un paso atrás y le dije: oye que te pasa y él me dijo: tranquilo no me pasa nada, y me dijo de nuevo: Ven que no pasa nada acércate de nuevo, y me dio mucho susto pero le hice caso, ahí cuando me acerque el ya estaba teniendo erección, y me tomo de los hombros con sus manos e hizo que fuera bajando hasta quedar de rodillas y mi cara frente a su pene, que era gordito, blanquito y con vello púbico empezando a salir de color monito, yo estaba que me moría del susto, de la emoción y el corazón lo tenía a mil, Hernán con sus manos en mi cabeza me acercó más a su pene, y yo sin experiencia aun en mamadas, solo se lo besaba y sacaba mi lengua y hacia dé cuenta que estaba chupando un bombom bum, así pasaron unos pocos minutos cuando escuchamos ruidos en la cocina y nos vestimos de una y salimos, casi nos pillan por que entró una hermana y dijo: Ustedes que hacen ahí, y le dijimos estábamos cambiándonos porque teníamos la ropa húmeda.

Ahí del susto que pasamos, Hernán se fue para su casa, pasaron unos días y cuando me dijeron, que me necesitaban al teléfono, era Hernán, casi siempre hablábamos para ir a jugar futbol o montar bicicleta, cosas del común en una amistad, entonces comenzamos la conversación normal, (pero yo con el susto que pusiera el tema), y charlamos unos minutos, cuando me dijo: Y te gustó lo del otro día?, y yo haciéndome la boba, le dije: Cual día?, me dijo: El día del paseo de hace unos días, ya le iba a salir con otra evasiva, pero no me dejo responder y enseguida me dijo: Si te gustó ven a mi casa que estoy solo, mi abuela y mi tío no están y se demora, y no me dejó ni responder, no se despidió y me colgó de una.

Con eso que me dijo, colgué el teléfono, se me aceleró el corazón, y con la incertidumbre de ir o no ir, eso fueron cuestiones de segundos, y salí para su casa, como Hernán vivía a la vuelta no me demoré ni un minuto, el seguro se dio cuenta por la ventana que yo iba, por que cuando fui a golpear la puerta estaba entreabierta, sin embargo golpee y escuche su voz cerca que dijo: Sigue, entonces entré, y el estaba detrás de la puerta, cerró, quedamos de frente y cogió me abrazó, me apretó las nalgas y me dio un beso, ufffff me pasó un corrientazo por todo el cuerpo, no me le alejé ni nada y le correspondí a ese beso, nos besamos rico, el mientras tanto me manoseabas las nalgas yo si solo lo tenía abrazado, no me atrevía a cogerle nada más.

Después de ese beso rico, que fue con todo, lengua, manoseada, en fin, me tomo de la mano y se fue guiando hasta su cuarto, allá quedamos nuevamente de frente de pie, y lo mismo nos besamos el me toca mucho las nalgas, me las sobaba me las apretaba, y enseguida fue bajando mi pantaloneta y con la otra mano me iba quitando el buso, hasta quitarme todo, me hizo que me acostaba boca abajo en su cama, en comenzó a besarme las piernas, los muslos hasta llegar a mis nalgas, ahí me las lamia, me las chupaba, besaba, y con sus manos separó mis dos nalgas e introdujo su lengua en mi ano, ahiiiiiiiiiiiiiiiii ahí me hizo ver estrellas, yo gemía, gemía a voz baja, me estremecía del placer, claro Hernán entendía que me encantó y mas lo hacía con más ganas dándome mucha lengua, ahí duró varios minutos, y yo sentía toda la raja reeehumeda y mi ano mucho más.

Ya después Hernán comenzó a quitarse toda su ropa, y después sentí que se fue subiendo enzima mío, ahiiiii que emoción, ya estaba erecto por que sentí como sobaba su pene en mis nalgas y se movía más rico, buscando el hoyito, como no lo encontraba, entonces con sus manos abrió mis nalgas y puso la puntica de su penecito en mi anito, y fue bajando poco a poco y a la vez empujando su cintura hacia mis nalgas, sentí un leve dolorcito al entrar su cabecita, y cuando lo introdujo todo, después lo iba sacando y metiendo lentamente y también me ardió, pero fueron las primeras metidas y sacadas, ya después el se movía y me hacía más ricoooo, duró varios minutos cuando sentí que se le agrandó y me dolió más, y suspiró y se acostó totalmente enzima mío, y lo sacó, enseguida sentí que un liquido bajaba por mi ano.

Después de eso, él siempre que quedaba solo y sabia que su abuela y tío se demoraban me llamaba y yo iba, por lo regular era cada 15 días cuando iban a hacer mercado, duramos mucho así, y yo me enamoré de él.