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Looners: Pasión Por Los Globos

-alo buenos días. Conteste

-gracias, mira necesito de tus servicios.

Normalmente esta es la constante cada vez que recibo una llamada, algunos lo hacen por curiosidad, otros a comparar precios y servicios, algunos a hacerte perder el tiempo y otros llaman con la seria intensión de concretar.

La llamada de ese día tenía un toque especial, no era el tipo de cliente que hace las mismas preguntas, su voz era gruesa y pausada, así como de locutor de noticias de radio, bastante respetuoso y puntual al preguntar.

-estoy buscando una niña que sea complaciente, que no se fije tanto en el tiempo.

-no te preocupes, no es mi estilo estar pendiente del reloj. Conteste

-realmente yo pago por calidad y no por tiempo, como podemos estar 10 minutos, podemos durar 3 horas, eres de mente abierta?

-claro que lo soy, no tengo problema con eso.

-sabes bailar sensual?

-sí y no solo bailo sensual, también te atiendo durante todo el servicio de manera muy erótica.

Ser prepago es sinónimo de mente abierta, en este negocio si no estás dispuesta a vivir experiencias nuevas muy seguramente fracasas o terminas haciendo las cosas de mala gana como algunas chicas, y ese tipo de actitudes son las que hacen la diferencia en el mundo de las prepas.

Me pidió que le vendiera 2 tangas, fue especifico en pedir que fueran tipo hilo usadas pero lavadas, acordamos el precio y accedió a comprarlas, acordamos el sitio y la hora. Antes que colgara me dijo:

-no busco solamente cuerpo y belleza, lo más importante para mí es encontrar actitud, profesionalismo, y que respeten los gustos inofensivos de las personas; algo que en las niñas que han estado conmigo no he encontrado.

Ximena es una mujer de estatura mediana, de voz sensual, labios que invitan a ser besados, de charla amena y simpática, su piel es delicada y sedosa, pelo negro y largo, dentro de sus armas secretas está el hacer la paja rusa con sus enormes y divinas tetas 42C que saltan a la vista al momento de conocerla.

Huele rico y por su indumentaria, modales y forma de hablar nunca imaginarias que es una chica prepago, ella puede ser tu vecina, tu compañera de universidad o simplemente ir al lado tuyo en Transmilenio mientras lees este relato en tu celular.

Llegado el día me vestí bastante casual, Jeans azules un poco descaderados, blusa negra de botones la cual le dejo 2 sin apuntar, chaqueta habana, botas negras y el pelo en cola de caballo.

 Llegué al motel y subí hasta la habitación que mi cliente me había indicado hacia un rato por whatsapp, toque a la puerta y me abrió un hombre de estatura media, blanco, bien vestido, tal vez de unos 35 o 40 años.

Nos saludamos de beso en la mejilla, me invito sentarme en una las sillas de la habitación mientras él se sentó en la cama, su voz era cálida y cordial, pero no era muy expresivo como otros clientes que cuando entras quieren besarte y tocarte por todas partes, no, él era diferente, de hecho, no sentí el morbo hacia mi cuerpo que normalmente recibo de parte de los hombres.

Lo primero que me pregunto fue:

-trajiste las tangas?

-si aquí las tengo.

Las saque del bolso e imagine que lo primero que iba a hacer seria olerlas, pero me las recibió y solo las observo como quien compra unas en un Almacen.

-gracias por traerlas, están lindas.

-ahora quiero que te cambies y solo te quedes en tanga y tacones.

Se levantó de la cama y se dirigió hasta un morral que había colgado en el perchero, saco un balón de vóley y me dijo:

-quiero un baile muy sensual con él.

Yo lo miré extrañada pensando que era broma lo que me decía, pero al ver la seriedad con que lo decía entendí que ya había comenzado a correr el tiempo del servicio.

-no hay problema, quieres algún baile en especial con el balón?

-no, se tu misma, sorpréndeme.

Me retire al baño donde me desnude, perfume y humecte mi cuerpo, la cola de caballo la solté y organice mi cabello para que tapara mis senos, cuando estuve lista Salí a bailarle como me lo había pedido.

Al abrir la puerta del baño lo encontré en la cama desnudo acostado inflando globos, de esos de fiesta, me imaginé que era su cumpleaños y que tal vez por eso quería celebrarlos solo y las bombas eran tal vez para ambientar.

-qué tipo de música quieres que te baile?

-la que tú quieras, realmente para mí eso es lo de menos.

Busque alguna emisora que tuviera algo de música sensual, y antes que empezara me dijo:

-aun no empieces, no estoy preparado, yo te aviso.

Bueno, normal. Me quede frente a la cama con el balón en mis manos mientras lo veía inflar los globos, nunca había visto a alguien inflarlos tan rápido, en menos de 5 minutos ya había globos por todos lados, la cama estaba cubierta de ellos y una buena cantidad rodaban por el piso, al punto que había algunos que llegaban a mis pies.

Al terminar de inflar el ultimo me dijo:

-ya estoy listo, puedes empezar.

La música que sonaba era sensual e invitaba a hacerle un baile delicado, jugaba con el balón en mis manos, lo rotaba entre mis senos, simulaba besarlo y lamerlo con mi lengua, mientras con una de mis manos recorría mi cuerpo tocándolo con mucho deseo, en ocasiones tocaba mi vagina corriendo la tanga para dejarle ver mis labios, subía mi mano a la boca para lubricar mis dedos y regresar a tocarme.

Mientras tanto él estaba tendido en la cama mirándome fijamente, tenía puestas una de las tangas que le había dado y podía ver como el pene se terciaba hacia un lado, se lo tocaba mucho como haciendo preludio a la masturbación.

Seguí bailándole mientras veía como se le iba parando, hasta que no le cupo dentro de mis tangas y al tenerlo afuera comenzó a masturbarse al tiempo que abrazaba los globos con la otra mano. los besaba, los olía, en ocasiones tomaba alguno para frotarlo por su cuerpo.

Por un momento me causó asombro lo que él estaba haciendo, pero no duro mucho por que verlo masturbarse me empezó a excitar mucho, ver la forma en que se cogía la verga, escuchar su respiración, ver como mordía sus labios y la cara que hacia produjo que empezara a mojarme, me gustaba lo que veía y el placer que yo le generaba, eso hizo que verlo interactuar con los globos pasara a un segundo plano.

Como ya me sentía demasiado excitada, me acerque a la cama con la intensión de sentármele encima, deseaba que me besara y lamiera los senos como lo hacía con los globos, pero me detuvo diciéndome:

-no te detengas, sigue bailando delante mío.

Hellooooo??? No daba crédito a lo que acababa de escuchar, por un momento sentí que me rechazaba, cuando normalmente mis clientes disfrutan comiéndome y tocando mi cuerpo, pero en fin… le hice caso, volví al sitio donde estaba bailando sin preguntarle nada.

Los globos ya no estaban sobre la cama, ahora estaban por toda la habitación, así que aproveche y tome el más grande y empecé a morbosearlo, simulando que le hacía sexo oral, lo humedecía con mi lengua para después pasarlo por mis pezones que en ese momento los tenía muy duros y parados, al darse cuenta de mi nuevo baile él se puso muy caliente, se cogía le verga muy duro y se masturbaba rapidísimo, echaba la cabeza hacia atrás, manoteaba los globos que tenía alrededor suyo, algunos empezaron a explotar, lo que hacía que generara en el gemidos de placer cada vez que escuchaba la explosión, mi baile claramente lo volvía loco, así que tome dos globos y los empecé a frotar por todo mi cuerpo, el gemía y escucharlo hacia que inconscientemente yo también lo hiciera.

El clímax de él estaba por venir por la forma que se movía, gemía mucho, se masturbaba tan duro y rico que no tardo en romper el encaje de las tangas, yo no dejaba de bailar, ya casi no tenía su vista puesta en mí, ahora la tenía puesta en los globos, hasta que dio un gemido muy fuerte, su cuerpo se levantó un poco de la cama y broto un gran chorro de semen que cayó sobre su abdomen, no dejo de masturbarse hasta que no le salió la última gota de semen.

Al terminar dejo que su cuerpo se relajara, extendió sus brazos y quito los pocos globos que aún quedaban sobre la cama, cerro sus ojos y se quedó en silencio.

Me quede mirándolo y pensando, ¿bueno y ahora qué?

Pensé en pasarle los pañitos húmedos, pero dudé en hacerlo por que como no habíamos tenido contacto físico no sabía cómo iba a reaccionar.

Igual me gusta ser cortes con mis clientes y atenderlos bien, así que decidí alcanzárselos. Al escuchar mis pasos abrió los ojos y se quedó viéndome.

-te paso los pañitos para que te limpies?

-no gracias, prefiero ducharme.

Me quede pensando dos cosas, ¿quiere que nos duchemos juntos para estar o aquí termina el servicio?

Antes de entrar a ducharse me dijo:

-te felicito, eres muy profesional. Gracias.

-puedo saber por qué las gracias?

-por qué entendiste totalmente que era lo que quería y no te burlaste ni me miraste como juzgándome o pensando que estoy loco.

Aprovechando que él se decidió a hablar, ya que en todo el servicio no hablo nada, aproveche para hacer la pregunta del millón:

-quiero preguntarte algo, espero no lo tomes a mal y si no quieres no respondas. Lo sabré entender.

-dale, no hay problema pregunta.

-el sexo no te excita? No llena tus expectativas? O solo te excita el baile y debo decirte que no entiendo el tema del balón y las bombas… no me quiero ir con la curiosidad.

Se quedó mirándome y empezó a reirese…

-claro que me gusta el sexo, soy casado y tengo una vida sexual activa, pero tengo un secreto. Me gustan las formas redondas, cuando vi tus fotos y tus tetas fantaseé con este momento.

Se dio media vuelta y entro a ducharse, yo quede afuera con muchas preguntas y dudas, pero preferí no ahonde en ellas por que él era bastante hermético.

Al salir del baño se visto y mientras lo hacía me dijo:

-si quieres puedes llévate las tangas, no puedo llegar a la casa con ellas.

Voltee a verlas y estaban untadas de semen, las recogí y las bote a la cesta de la basura.

Antes de salir de la habitación me dio un beso en la mejilla y me dijo que aún quedaba tiempo del alquiler de la habitación, si quería que utilizara ese tiempo para relajarme un poco en el jacuzzi. Recogió el balón, lo guardo en el morral y salió de la habitación cerrando la puerta suavemente.

Quede algo perpleja, era una situación fuera de lo común, las dudas que me genero este cliente eran muchas, tome el consejo que me dio de utilizar el jacuzzi y mientras veía como se firmabas las bombas de espuma pensaba que cada persona tiene un algo que lo hace sentir bien y feliz cuando está teniendo sexo, los gustos raros e inofensivos son respetables, estaba contenta porque mi cliente quedo satisfecho y muy a su modo reconoció mi profesionalismo y respeto.

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villavo69

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Categoria: Fetichismo
Fecha de Publicación: 2016-04-13 18:32:11
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