Hace 14 años conocí en mi trabajo a una mujer que me cambió el mundo. En un principio empezamos saliendo a comer algo y luego con el paso del tiempo hicimos el amor. A ella le fascina la lencería: medias, ligueros, falditas...y eso me parecía muuuuyy sexi ya que la acompañaba a comprar está ropa en los sex chops del centro de Bogotá y obvio mirabamos todos los juguetes sexuales que ofrecen allí. Cuando haciamos el amor me gustaba mucho sentir el roce de la lencería de ella contra mi cuerpo y unicamente le corría la diminuta tanga y se lo metia de ladito ya fuese por delante o por la deliciosa colita que ella me enseñó a comer.
Cada vez que nos veiamos pasabamos a comprar prendas diferentes, porque a los dos esto nos encanta y permitía que nuestro amor fluyera en todos los aspectos. Ya en la casa ella se vestia y me entregaba su deliciosa cuca depilada y jugosa y compartiamos un delicioso ron y una buena pelicula porno. Un dia salí temprano del trabajo y me fui hasta la casa de ellla a esperar que llegara, me puse a ver pornografía y resulté en una página de sexo travesti, esto me excitó muchisimo y empecé a buscar en el cajón de la ropa interior de mi amiga.
Que rica sensación ver y oler todas sus tangas, brasieres, cacheteros, medias, babydolls, licras untandome sus cremas en la verga con mucha paciencia y cuidado. Saqué una tanga de encaje rosada la olí y la enredé en mi verga que delicia, que excitación tan grande, jamás en mi vida había sentido tanto placer, luego me la puse y faltó poco para derramarme. El roce del encaje en mi pene me hacía lubricar intensamente,,,era una sensación diferente y el hilo en mi cola me hacia estremecer. Así estuve viendo porno de travestis y acariciandome la verga durante tres horas, hasta que al fin mi pene explotó de leche acumulada durante varios dias.