Una noche...

Un día como cualquiera estaba con mi pareja y no teníamos plan, desidimos hacer algo -que tal si tomamos tequila e invitamos a tu primo? Dice ella. la verdad Inicialmente no era lo que quería pero el plan desde cualquier punto de vista era mucho mejor que no hacer nada, me dispuse a hacer la llamada respectiva a lo que mi primo contesto. Que bien! que él venía con la novia, algo absolutamente normal, aunque yo nunca me imaginé lo que eso cambiaría mi vida, fuimos y compramos una botella de tequila y mientras charlamos y hablamos de varios temas se fue consumiendo y en menos de una hora tuvimos que ir por la otra, esta vez ya un poco más inhibidos y con mucha más confianza, empezamos a tocar temas más sexuales, cosas puntuales de cómo nos gustaba el sexo oral, que cosas nos calentaban  y definitivamente que nos gustaba a la hora del sexo. Sin pensarlo empezamos a interactuar cada vez más y acercarnos entre el ruido de la música y lo entrado de la noche cada vez nos hablabamos más al oído, en una de esas mi pareja y yo nos miramos y nos besamos apasionadamente mientras mi primo y la novia solo atinaron a mirarnos sin decir absolutamente nada, seguimos conversando y no fue un hecho significativo en el momento, luego de eso empezamos a bailar un poco de salsa, luego un poco de regeeton y de alguna manera era inevitable mientras bailaba pensar en todas y cada una de las cosas que habíamos dicho anteriormente como cada vez que me le acercaba al cuello de mi pareja ella se estremecía, pensar en la posibilidad de tener a dos mujeres al mismo tiempo algo típico en los hombres pero definitivamente muy placentero, imaginar los cuerpos bañados en aceite y rosándose mientras seguía bailando con ella y cada vez la ereccion era más notoria, seguía bailando disimuladamente pero mi pareja ya se había dado cuenta, me miraba de forma muy picara y mientras guiaba mis manos por encima de sus senos y bajaba por su vientre hasta las caras mientras sonreía. Era un momento muy sensual y caliente, era como si el resto del mundo no existiera la verdad en ningún momento me detuve a pensar si alguien más estaba ahí, seguimos así durante varias canciones la verdad no sé cuántas intercambiamos besos y nos tocábamos mientras bailamos en algún momento levante la mirada y ahí estaban ellos parados al frente de nosotros bailando y mirándonos perplejos, no paraban de mirarnos, pero definitivamente se notaba que lo estaban disfrutando, lentamente comenzamos a separarnos y a desplazarnos hasta la mesa donde estaba el tequila me aproximé a ellos y les ofrecí un trago, inmediatamente aceptaron sin mencionar absolutamente nada, en ese momento me empecé a sentir un poco mal un poco culpable, como si algo de lo que había hecho estuviera mal,  sin embargo seguí caminando y descargue la botella en la mesa y me dirigí hasta donde estaba mi pareja aún excitado y erecto pero esta vez con la intención de ser más racional y menos público, pero lo que no estaba en nuestros planes y para nada escrito, la novia de mi primo se acerca y me dice que sí podemos bailar, mientras miro a mi pareja y responde afirmativamente y se acerca a mi primo. Por mi cabeza solo pasaba el hecho de que se daria cuenta de mi ereccion por lo que empezamos a bailar y yo siempre conserve la distancia, mi primo estaba bailando con mi pareja mientras ella le daba la espalda y miraba de frente a la novia de mi primo mientras yo conservando la distancia bailaba desde la espalda de ella, fue ella quien tomó la iniciativa y tomándome desde las piernas me acerco a su cuerpo me apretó como queriendo sentir mi pene erecto. Fue algo inesperado y me tomó por sorpresa sin embargo solo atine a tomarla por la  cintura mientras miraba a mi pareja y ella muy picara se mordía el labio mientras bailaba, cada vez estaba más excitado y seguíamos bailando, yo no podía parar de mirar a mi pareja me sentía un poco mal pero no podía parar de bailar, ella estaba vestida con un jean y una camisa suelta que dejaba entre ver sus grandes senos, y yo no podía dejar de mirarlos, mi primo un tipo alto de 1,80 color de piel blanca y cabello castaño dispuesto a su espalda se volvia paisaje creo que nunca lo determine, y dándome la espalda estaba la novia de mi primo en un diminuto short y una camiseta de tiras angostas al hombro que la verdad no le quedaba nada mal, después de gastarle un poco de tiempo a pensar si estaba bien o no, me deje llevar y solo empece a pasar mis manos por sus piernas y entre su camisa y la espalda, ambas parejas estábamos mas cerca y sin pensarlo ellas empezaron a besarse, para mi era increíble y absolutamente erotico ellas se besaban mientras bailaban, y yo solo acariciaba sus piernas hasta llegar a llegar a su vagina, completamente húmeda ella se estremecía mientras yo pasaba mis dedos por su vagina pero no dejaba de besarla, cabello castaño, con un olor muy dulce, cuerpo delgado es una mujer de aproximadamente 25 años y físicamente muy linda, sin pensarlo estaba ahí entre nosotros y absolutamente excitada, seguimos bailando durante algunos minutos y luego cambiamos de pareja, lentamente nos empezamos a acercar y nuevamente el beso que estábamos esperando se dio, esta vez un poco más atrevidas, más sueltas y mucho más inhibidas, mientras respiraba agitado y besaba el cuello de mí pareja, levante la mirada y ella estaba ahí, muy cerca casi respirando el mismo oxigeno nos miramos fijamente e inevitablemente nos besamos, ahí delante de nuestras parejas, sin pensarlo y sin hablarlo, ahí fue donde definitivamente me di cuenta que habíamos abierto una puerta difícil de cerrar en nuestra vida de pareja, mientras nos besábamos yo acariciaba sus senos, los de mi pareja pasaba mis manos por el abdomen y seguí así durante algunos segundos, era demasiado estimulante sin darnos cuenta empezó a caer la ropa, lentamente y sin dejar de acariciarnos solo nos ayudábamos a dejar caer las prendas. Continuará.