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LAS LINEAS 5001020 - 5077000 Experiencia 1

Hace varios existían unas líneas de clasificados gay que eran las 5001020 y la 5077000, además era común encontrar clasificados gay en el periódico (sobre todo en esos periódicos que repartían gratuitamente en algunas zonas). A veces me gustaba llamar y escuchar los clasificados, o de vez en cuando colocar uno.

En esta ocasión me contacté con un hombre que tenía 35 años (llamémoslo Juan), yo estaba aún en el colegio, me contó que vivía cerca a salitre plaza, yo quería verlo pero él tenía cierta inseguridad por mi edad. Le dije que no me importaba, y como era cerca al día del padre el tenía antojo, al final no concretamos nada y me dio el contacto de un amiguito suyo que era un año mayor que yo (llamémoslo Diego).

Al hablar con el chico quedamos de vernos en salitre plaza, recuerdo que nos vimos en Jenos Pizza y hablamos de muchas cosas, nada sexual, el tampoco había estado con aquel hombre que nos contactó pero si lo conocía.

Ya después de un rato nos fuimos a dar vueltas por ahí, corroboramos que nos gustamos mutuamente con un beso junto a un pastal cercano pero no teníamos sitio. Nos animamos a llamar al de 35, le dijimos que estábamos en la zona y nos invitó a su apartamento.

Nos recibió y cuando me vió puso cara de sorpresa, entramos al apartamento e inicia la historia.

Juan35: Pareces más joven de lo que dijiste, pero rico conocerte, ¿cómo les fue en su encuentro?.

Diego: Bien, sin embargo el quería conocerte, además no teníamos a donde ir y se me ocurrió visitarte.

Yo: Si, además tranquilo que no he cambiado mi edad, es por lo bajito que parezco menor de lo que digo.

Juan35: (Me contó su historia su separación y demás). Nos invitó algo de tomar. – Me gustaría verlos besarse.

Diego no lo pensó dos veces, siempre fui muy tímido así que me limité a disfrutar sus labios, de repente sentí como Juan nos acariciaba, parecía que no le alcanzaban las manos, se sentía muy ansioso. Diego le dijo que fuéramos a la habitación pero Juan dijo que la sala estaba bien, el algún momento los besos se salieron de control, sentía como venía una y otra lengua, me sentía extasiado y no quería dejar de besar, Juan se apartó un momento y lo siguiente que sentí fue su verga en medio de los labios de Diego y los míos, pude ver que Diego tenía más experiencia, y Juan pudo notar que yo era el más inexperto.

Juan se desnudó y Diego lo siguió, yo fui el último, pero fue Juan quien tomó mi ropa, Diego tenía la verga dura también, pero la de Juan era de alguna manera más atractiva, además mucho más grande que la de Diego.

Empecé a chupar las dos vergas pero quería quedarme chupando la de Juan, sin embargo Juan tenía otras intenciones, me acostó boca arriba y mientras Diego ponía su verga en mi boca Juan me hizo un beso negro tan intenso que casi me hace eyacular, me puso en cuatro y me quiso clavar pero no pudo y yo no pude soportar el dolor por lo que me tuve que apartar.

La verga de Diego era mucho mas pequeña, Juan le dijo que me clavara y efectivamente su verga aunque con algo de dolor, logró su cometido, Juan lo guió para que lentamente se abriera paso en mi, sentía las manos de Juan separando mis nalgas mientras Diego me penetraba.

Juan se paró y se hizo detrás de Diego, sin tanta estimulación como a mí, lo pudo clavar con facilidad. Sentí que las penetraciones de Diego hacia a mi, ya no le pertenecían, las embestidas eran de Juan, si bien la verga era de Diego, Juan era el que controlaba el movimiento. Fue un momento genial, saber que estaba siendo dominado por dos hombres a la vez. Lástima que no duró mucho, después de que Juan clavó a Diego la experiencia duró a lo sumo un minuto. Diego eyaculó dentro de mi e inmediatamente se retiró solo a ver.

Recuerdo una leve sensación de vergüenza al sentirme en cuatro, escurriendo semen y ellos dos mirándome, sin embargo, sin tener tiempo para acomodarme como Juan me puso boca arriba, me movió como si fuera un muñeco, me limite a subir mis rodillas y separar mis piernas, puso un cojin debajo de mi cadera y me pregunto si no tenía ganas porque no tenía una erección, aunque estaba botando liquido preseminal por montones, me metió dos dedos y me lo empezó a chupar, pero lo dejó tan pronto notó que tenía ganas de venirme, le pedí que siguiera, pero me dijo que era as rico si me aguantaba las ganas. Me sacó los dedos y en misionero me dio un beso muy apasionado, sentí como empezó a rozar mi ano con su verga cuando de repente dio una embestida monstruosa.

Sentía mucho dolor, si bien su verga era mas grande, descubrí que adentro hasta la mas pequeña diferencia se multiplica en dolor y en placer, le pedí que fuera despacio pero no quería, creo que le gustaba verme sentir dolor, después de unas diez embestidas empecé a notar como no me dolía y lo disfrutaba mas… no se cuanto tiempo me cabalgó pero me pareció eterno, me hizo eyacular mientras me culeaba y cuando eso ocurrió me dio mas duro y mas rápido, hasta que de un momento a otro lo sacó y lo puso en mi boca, casi me atraganto con su leche, pero me bebí hasta la última gota…

Luego de eso descansamos, tuvimos un rato de morbo y Juan me llevó a mi casa pues vivía algo lejos pero esa historia la dejo para otro día.

manzanotz

Soy hombre bisexual

visitas: 974
Categoria: Gay
Fecha de Publicación: 2017-10-19 23:35:49
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