Guía Cereza
Publica tu Experiencia

Relatos & Experiencias

El conductor de Uber

Todo paso un domingo, estaba en casa pasando la resaca de la fiesta de la noche anterior, un chico con el que estuve hablando la noche anterior me invito a su casa, accedí, me di una ducha y salí hacia allá. Llegue y sin perder un minuto me abalance sobre él, tuvimos una gran química, lo que hizo que el sexo fuera una delicia total; terminamos y decidí que era hora de irme, le pedí permiso para tomar una ducha y eso hice, pedí un Uber y mientras lo esperaba conversábamos de cosas triviales, incluso de la posibilidad de repetir.

El Uber llego, me despedí y salí.

Me monte al carro, el conductor debía tener unos 25/26 años, era moreno claro, trigueño, ojos color miel, labios gruesos, un poco rellenito, con el cabello rapado, atractivo, me preguntó si quería escuchar algo en especial, le dije que no y ahí quedo nuestra conversación, algunos pensaran que soy grosero pero normalmente no le hago conversación a los conductores, íbamos escuchando música, yo iba concentrado en mi teléfono celular pero de reojo veía que el conductor se tocaba constantemente la verga, que se empezaba a notar en el pantalón de sudadera gris que llevaba, me hice el tonto, pero la situación empezó a incomodarme y calentarme al mismo tiempo, yo seguí haciéndome el distraído hasta que en un momento sonó una canción y el conductor quería saber cómo se llamaba, yo le dije el nombre y empezó a hacerme conversación sobre el artista.

Íbamos llegando al apto, faltaban unas diez cuadras y nos encontramos un semáforo en rojo, yo levante la mirada del celular y nuestros ojos se encontraron, en ese momento, él sin pensarlo y arriesgándose tomo mi mano y la puso en su paquete, yo me sorprendí y empecé a tocarlo, mi conductor no se hizo esperar y también mando la mano a mi verga, ese día llevaba una sudadera negra que marcaba mi culo y mi verga, tengo 23 años, mido 1.80, soy delgado, moreno claro, diría que trigueño, ojos cafés oscuros, cabello negro y cejas pobladas, velludo y con la sombra de barba de tres días, mi verga empezaba a ponerse dura y sin ninguna palabra ambos nos bajamos el pantalón, la verga de mi conductor es de un tamaño promedio, unos 17cms con el vello corto, un poco más gruesa de lo normal y tenía ese olor a sudor suave, desabroche mi cinturón y me doble para mamársela, este hombre gemía y yo me la metía toda, pasaba mi lengua por la cabeza y le lamia los testículos, estábamos a mil en ese carro, y el viaje estaba por finalizar.

Llegamos a la entrada del edificio, ambos con los pantalones abajo y las vergas paradas, lo invite a pasar y terminar lo que empezamos, lo dudo un poco pero me dijo que sí, me pregunto si estaba solo y afortunadamente lo estaba, el saco de la guanterauna pequeña mochila que más tarde descubrí tenía preservativos, Popper, lubricante y otras cosas más, estaciono el carro y subimos a mi apartamento, nadie dijo nada en el ascensor y apenas cerramos la puerta del apartamento me lance a besarlo, eran besos con pasión, jugábamos con nuestras lenguas, empezamos a desnudarnos, al estar sin ropa lo puse de cara a la pared y me le pare detrás, mi verga se metía entre sus nalgas y le rozaba ese hueco, mi pene estaba mojado y el de él también.

Empecé a besarle el cuello y a mordérselo, mientras con mis manos le acariciaba el pecho y el abdomen y con la otra lo masturbaba, tome un poco de su líquido pre seminal y lo probé para después besarlo, sabía delicioso; seguimos besándonos y subí mi mano hasta su boca, le metí un par de dedos en la boca y él empezó a ensalivarlos, los saque de su boca y los lleve a su culo, le metí uno suave y el solo gimió.

Lo lleve a la cama y lo acosté boca abajo, seguí besando su cuello y sus orejas, baje por la espalda, iba dando mordiscos, llegue a sus nalgas, le di un beso a cada una, ensalive bien mi lengua y la pase por ese hueco con poquito vello, mi conductor volvió a gemir y empino su culito, empecé a darle lengua como si mi vida dependiera de ello, la metía muy adentro, lo mordía suave, se la pasaba de arriba abajo y le pasaba mi mandíbula que pica por los vellos de la barba, mi conductor se retorcía, gemía, se agarraba de las cobijas y después me abría más su culito, pare y le ordene que se arrodillara en el piso, me le puse al frente, lo bese, lo hale del cabello, lo escupí y lo dirigí hacia mi verga, reclamaba una mamada y él feliz empezó a dármela, se la metía toda, la escupía y me masturbaba, me miraba a los ojos mientras la lamia, pasaba la lengua por mi huevos y se tocaba el culito, me pedía verga.

Lo volví a acostar en la cama, al borde, empecé a besarle las axilas, le mordía las tetillas, bajaba por su abdomen hasta llegar a su pene, primero le pase la lengua por el perineo, lamí sus testículos y me metí toda su verga, se la estaba mamando y ambos lo estábamos disfrutando, pero había llegado el momento de la mejor parte, puse sus piernas en mis hombros, un condón y se lo metí todo, me quede quieto y lo besé, empecé a moverme despacio, haciéndolo sentir cada centímetro, se sentía apretado, ese culo era la gloria, mi conductor me pedía más y yo con gusto le daba, estuvimos un buen tiempo así, cambiando el ritmo, besándonos, dejándonos llevar, estábamos sudando.

Él puso sus brazos alrededor de mi cuello, lo cogí por la cintura, lo levante y me acosté, dejándolo cabalgar, no saben cómo me arrecha verlo encima, viendo mi verga entrar y salir, viendo como ponía sus manos en mi pecho y movía su culo hacia adelante y hacia atrás, ambos estábamos muy calientes y ya había pasado un buen tiempo en esa posición, se lo saque y le dije que se pusiera en cuatro, así lo hizo, lo volví a clavar de un solo golpe, pero su culo ya se había acostumbrado a mi verga, entraba y salía sin problema, le di muy duro a mi conductor, sus gemidos se escuchaban y me dijo que se iba a venir, le dije que aguantara unos cinco minutos más, pero me dijo que no duraría tanto, lo puse frente a mí y lo volví a meter, mientras lo besaba y lo masturbaba, mi conductor no tardó mucho en venirse, se corrió mucho, su semen alcanzo a llegar a mi cara, eso fue el detonante, lo abrace y lo clave con fuerza mientras me venía en un gemido y llenaba ese preservativo de leche.

Lo bese una vez más y se lo saque, nos limpiamos, recogió sus cosas y miro el reloj, había pasado una hora desde que llegamos al apartamento, tenía que irse, me puse unos bóxer y lo acompañe a la puerta, me dio un beso y prometió escribirme. Esa noche lo hizo y conversamos, pero no quise repetir, lo excitante de esto fue la forma inesperada como paso, nada estuvo planeado, incluso creo que ni lo califique.

Así fue mi primera y única vez (hasta ahora) con un conductor de Uber, una historia completamente real.

Y no, no me olvide del nombre de mi conductor, nunca lo supe, ni él el mío, eso le agrego morbo a todo esto.

Feloo21

Soy hombre bisexual

visitas: 3077
Categoria: Gay
Fecha de Publicación: 2018-10-30 05:18:09
Más Relatos Por Feloo21
Compartir en:

1 Comentario

QUE DELICIA QUIERO UN CONDUCTOR ASI

2018-11-12 18:57:59

Nuestros Productos

Acople Con Dildo Fucking

F*CKING MACHINE $ 284,900

Conjunto Daysi Blanco

CEREZA LINGERIE $ 115,900