Guía Cereza
Publica tu Experiencia

Relatos & Experiencias

EL CUMPLEAÑOS DE LA PRIMA

el viernes pasado, Alejandra, la prima de mi esposa estaba de cumpleaños, como de costumbre en la casa de ella hicieron una fiesta para celebrárselos, a eso de las 10 de la noche, llegamos con Andrea a su casa que no está muy lejos de la nuestra, la sorpresa fue que el hermano de Alejandra, Ricardo, había llegado de la costa para esa celebración, desde cuando el cumplió sus 23 años, no se veían con mi esposa, eso hace casi 5 años, se saludaron muy efusivamente, no era un secreto para mí que a él le encantaba mi esposa, pues en varias oportunidades se le insinuó, aún cuando ella era mi novia, a veces se entrevistaban por internet y él no perdía la oportunidad de decirle lo rica que estaba y cuanto la deseaba, a lo que mi esposa siempre lerespondía, ay no molestes con eso, pero no escondía su agrado porque él la molestara así, el encuentro fue efusivo, en aquel momento recordé algo que me comento mi esposa un día, él le dijo antes de irse, que si alguna vez ella se decidía ponerme los cuernos, él quería ser la primera opción, se que a ella le gustaba bastante Ricardo y cuando me hizo ese comentario, le pregunte si sería capaz de hacerlo con él, ella respondió muy coqueta come de costumbre, huy si, seria rico, Ricardito está muy bueno y me gusta porque es morboso y muy arrecho, además se nota que la tiene más grande que la tuya, no niego que sus palabras me produjeron una buena dosis de morbo, en fin, esa vez la cosa quedo ahí.

después de la partida de la torta vino la cena, a eso de las 12 de la noche, comenzó la rumba, Alejandra se cambio de ropa y dio inicio a la fiesta bailando con su padre, un moreno costeño muy buena gente, de él sacaron ese hermoso color canela en la piel, el cuerpazo de Alejandra era clásico de las mujeres morenas y porque no decirlo, también Ricardo era bien plantado y bastante alto, mi esposa como de costumbre, estaba vestida muy sexy, por demás que a ella todo le luce pues tiene un cuerpazo muy lindo, esos legis azules, su camiseta blanca ceñida y los tacones la hacían ver muy atractiva y elegante.

Andrea es muy alegre, en las fiestas, todos quieren sacarla a bailar, pues lo hace muy bien, a eso de las 2 de la madrugada, ya con algunos tragos en la cabeza, Ricardo casi que la tenia monopolizada, Andrea estaba un poco tomada y la verdad yo también, en uno de esos arrebatos del baile, el papá de Alejandra, tropezó con Andrea mientras llevaba una charola con varias copas de piña colada para las damas, su blusa y pantalón quedaron chorreados por todo lado, aunque era un poco tarde ella insistió en ir a nuestra casa para cambiarse, total que era cerca, salimos y cuando íbamos a cerrar la puerta, nos alcanzo Ricardo, que se ofreció a acompañarnos, como estábamos bastante entonaditos, nos fuimos los tres charlando y haciendo bromas, al llegar a nuestra casa, ella se dirigió a la alcoba para cambiarse, yo fui al baño y lo que sigue, ella me lo conto al otro día, tan pronto entre, Ricardo se dirigió a la alcoba donde estaba cambiándose Andrea, discretamente, abrió un poquito la puerta para espiarla, ella estaba de espalda desnudándose y no se dio cuenta, hasta que el exhalo un suspiro, Andrea se sobresalto al verlo ahí, le pidió que saliera pero él no hizo caso, solo le dijo, huy primita, estas divina, que cuerpazo, me dejas ayudarte?, ella un poco asustada le dijo que se saliera, que yo podía entrar en cualquier momento, el se mordió los labios y le dijo, huy prima, es que mira como me tienes, en ese momento ella lo miro entre las piernas y se sorprendió al ver el tamaño del bulto que se le pronunciaba, ella se le acerco y empujándolo le dijo que se fuera para la sala, él aprovecho y la abrazo con fuerza, antes que pudiera evitarlo, la beso apasionadamente, haciéndole sentir en el punto exacto, el tamaño de su miembro erecto, eso solo duro unos segundos, ella logro separarlo y le dijo, ya vete para la sala, él la miro de arriba abajo y mordiéndose los labios le respondió, huy primita, estas demasiado rica, me tienes a mil, ella lo miro con esa coquetería que la hace ver muy sexy y le repitió, vete, vete.

cuando salí del baño, me dirigí a la alcoba, mi esposa ya estaba vestida, solo que esta vez se coloco una faldita y una blusa que tenía un amarre a la altura del ombligo, no tenia medias y se coloco unos zapatos bajitos, le pregunte, te vas a ir así?, ella me abrazo, me beso muy sensualmente y dijo, no mi amor, ya no quiero ir mas por allá, mejor quedémonos acá, nos dirigimos a la sala, allí estaba Ricardo, sentado en el sofá, al vernos se puso de pie, su mirada recorrió de inmediato todo el cuerpo de Andrea, no era difícil darse cuenta lo mucho que le gustaba, en ese momento mi esposa se dirigió al bar y sacó una botella de aguardiente y tres copas, colocó todo en la mesita de centro y sirvió tres tragos bastante generosos, entonces hizo un brindis por el cumpleaños de Alejandra y dijo, fondo blanco, en ese momento Ricardo pregunto, vamos ya para mi casa?, Andrea respondió, no, ya no tengo ganas, prefiero tomarme unos traguitos acá y a dormir, tranquilo ve tu, el guardó silencio unos segundos y dijo, pues, bueno, ante la expresión de indecisión de él, Andrea le dijo, si quieres quédate y tomas con nosotros un par de tragos antes de irte,su respuesta fue inmediata, huy si, rico, mi esposa procedió a colocar música, como de costumbre bachata, a mi la verdad no me gusta mucho pero a ella le encanta, charlamos con Ricardo durante unos 15 minutos sobre su estancia en la costa mientras seguíamos tomando, los 3 estábamos ya bien entonaditos, entonces Andrea dijo, bueno, no mas charla, vamos a bailar, en ese momento saco a Ricardo, un poco trastabillando, los dos comenzaron a bailar muy normalito, yo me sentía bastante mareado pues no tengo costumbre de tomar y a esas alturas ya había bebido bastante, después de un par de canciones, los dos bailaban muy apretaditos, aunque un poco torpes por el efecto del licor, por momentos se me serraban los ojos, creo que debí quedarme dormido unos minutos y cuandoentreabrí los ojos, casi no puedo creer lo que vi, mi esposa y Ricardo se estaban besando muy apasionados, él le había levantado la falda y le acariciaba las nalgas, mientras ella tenía una de sus manos acariciándole la verga sobre el pantalón, tuve el impulso de decirles algo, pero al mismo tiempo una sensación de morbo y arrechera me invadió, seguí fingiendo estar dormido y un par de minutos después, el se saco la verga y le subió la falda a mi esposa, comenzó a frotársela muy eróticamente, en ese momento ella me miro un poco sobresaltada, como vio que estaba dormido le siguió el jueguito y comenzó a moverse como una zorrita muy sexy, ella me pone a mil cuando hace eso, un minuto después, el le coloco su verga muy dura entre los muslos frotando al mismo tiempo su vagina, los movimientos pélvicos de Ricardo eran muy sensuales, Andrea comenzó a gemir suavemente, sin duda estaba muy excitada, no paraban de besarse, los dos estaban frente a mí a menos de 2 metros, podía ver claramente la verga de Ricardo, era morena oscura y bastante más gruesa que la mía en la base, entonces él la beso en las orejas y cuello, pasando su lengua por cada rincón, mi esposa es tremendamente sensible en esa zona y entere sus piernas, con frecuencia los dos volteaban a mirarme, creo que el hecho de que yo estuviera ahí tan cerca los excitaba aun mas, yo sentía que mi verga se iba a estallar y además la tenia mal acomodada, pero como arreglar eso sin que se dieran cuenta, los gemidos de ambos eran cada vez más fuertes, entonces de repente, Ricardo alzo a mi esposa, de inmediato, ella le abrazo la cintura con sus piernotas, él le acomodo su verga en la vagina y la penetró profundamente haciendo que ella mostrara gesto de dolor y exhalara un gemido muy fuerte, en ese momento él dijo muy excitado, huy mi amor, que caliente y apretadita estas, uuufff, que rica, Andrea se aferraba firmemente al cuello de Ricardo, mientras dejaba que este la subiera y bajara con fuerza, de repente, él le arranco el pequeño hilo blanco y lo tiro al suelo, note que estaba bastante mojado, por un momento, Ricardo se quedo mirándome mientras penetraba muy fuertea mi esposa, seguramente le daba una sensación de morbo muy grande estar cogiéndola delante mío, lo que él no sabía es que yo estaba peor, yo creo que Andrea sospechaba que los estaba observando, pues con el ruido que hacían, era para que me hubiera despertado, seguro eso la tenia así tan caliente, de pronto, Ricardo se acerco a una silla que estaba diagonal a donde yo me encontraba, se arrodillo frente a ella de modo que el culito de Andrea quedo en el borde, entonces ella apoyo sus codos en el asiento y él le separo completamente las piernas comenzando a follarla de una forma desaforada, en ese momento Ricardo estaba casi de espalda a mí, mientras Andrea estaba de frente, yo abrí los ojos y con un guiño le di a entender que los había estado mirando, ella se mordió los labios y comenzó a gemir más fuerte, ahí se entregó por completo a Ricardo, entonces él colocó los muslos de Andrea contra su pecho, los junto totalmente abrazándolos y de esa forma la penetro muy fuerte y profundo, los gestos y gemidos de ella, denotaban una impresionante excitación y placer, hacía mucho tiempo no la veía tan arrecha, por momentos me miraba, sus pupilas muy dilatadas evidenciaban el inmenso placer que estaba sintiendo, por instantes alcanzaba a ver esa verga entrando y saliendo en su vagina completamente mojada, entonces de repente, un gemido profundo de Andrea anuncio la llegada de un orgasmo muy fuerte, su cuerpo convulsiono de manera descontrolada, la envestidas de Ricardo fueron más fuertes y rápidas, él saco su verga de la vagina de mi esposa y tras un fuerte gemido, descargo un torrente de semen sobre la deliciosa vulva de Andrea, también salpico la falda, hubiera sido espectacular venirme con ellos, pero supuestamente estaba dormido, después de unos minutos, el se acomodo la ropa y mi esposa le dijo, ahora si vete antes que mi esposo se despierte, él volvió a besarla y le dijo, prima, esta será solo una de muchas veces, ella lo empujo y le repitió sonriendo, vete ya.

cuando Andrea regreso, yo la esperaba completamente desnudo acostado en el sofá, ella se sorprendió y me dijo sonriendo, huy mi amor y eso?, yo la hale hasta tumbarla encima mío y la bese apasionadamente, metí mi mano entre sus piernas y acaricie su vagina que estaba muy mojada, al momento ella quito mi mano de su cuca y la llevo hasta mi boca haciéndome chupar mis dedos, con una expresión morbosa me dijo, te gusta a lo que saben tus dedos?, yo respondí muy excitado, si, rico, eres una putita, culeartelo así delante mío, ella sonrió y respondió, sí, soy una putita muy arrecha y sé que eso te encanta, además que tu querías verme hacer eso no?, huy si, respondí, casi me vuelvo loco mirándolos, te gusto esa verga?, casi no termino de preguntar y ella dijo, huy demasiado, aunque al comienzo sentí que me desgarraba, la tiene muy gruesa, pero después, la disfrute como ni te imaginas.

luego de morbosearnos un poco, Andrea se desnudo, recogió su hilo roto y aun mojado y lo froto en mi cara, te gusta como huele?, me dijo muy arrecha, si mi amor, delicioso, entonces se limpio con él entre las piernas y lo froto de nuevo en mi boca, lo lanzo al piso y con un excitante 69, comenzamos una follada plena de erotismo, morbo y mucha arrechera.

bicurioso43

Soy hombre heterosexual

visitas: 1403
Categoria: Fantasías
Fecha de Publicación: 2018-12-05 13:37:07
Más Relatos Por bicurioso43
Compartir en:

2 Comentarios

Muy excitante relato. Es muy rico uno ver a su mujer penetrada por otro. Que gozo tan bestial! Saludos Luz y Jose

2018-12-15 14:15:15

mmmm ricoooo

2018-12-06 06:54:30