hablando con un buen amigo sobre el estrés diario, me dijo que él conocía un sitio donde daban unos masajes espectaculares, que él iba con frecuencia y era delicioso, me aclaró que el sitio era frecuentado por gays y bisexuales, pero que el rumbo que tomara el masaje dependía de uno, me recomendó a Jordan, un masajista panameño que tenia manos de ángel y cuerpo de semental, su comentario me hizo sonreír, le dije que me gustaría probar, pues los masajes me encantan, solo que no me había masajeado un hombre antes.

después de darme la dirección y llamar a Jordan para recomendarme, llegó el domingo y me fui al sitio un poco indeciso, era una casona más bien antigua pero muy bien conservada en un sector exclusivo del norte de la ciudad, al entrar, me recibieron muy bien, pregunte por mi masajista recomendado y me dijeron que en unos minutos bajaría pues acababa de llegar y se estaba cambiando, pasados unos 5 minutos, se me acerco una chica muy hermosa y sensual y me dijo, ve al segundo piso en la habitación del fondo a mano izquierda, el te está esperando.

un poco nervioso, me dirigí al cuarto y en efecto allí estaba un hombre de unos 32 años, de pile bronceada y como dijo mi amigo, un cuerpo muy bien cuidado, me saludo muy amigablemente inspirando en mi una buena dosis de confianza, me comentó que mi amigo lo había llamado y que estaba encantado de atenderme, luego de cruzar algunas palabras sobre mis necesidades de relajación, procedí a desnudarme, el tenia un pantalón de sudadera gris y una camiseta de esqueleto blanca.

ya en la camilla, el masaje comenzó, acostado bocabajo, sentí sus manos deslizarse por mis hombros y cuello, realmente eran muy suaves pero a la vez fuertes, sin duda la sensación era bastante diferente al masaje con una mujer, después de unos minutos cuando ya llegaba a mi cintura me dijo, puedo preguntarte algo personal?, claro, respondí, la mayoría de hombres que vienen a este sitio son gays o bisexuales, eres uno de ellos?, la pregunta me sorprendió, pero recordé que mi amigo me lo había advertido, pues no realmente, respondí, el sonrió y dijo,eso que quiere decir, que estás abierto a la posibilidad?, calle por unos segundos y le respondí, pues la verdad, con mi esposa hemos hablado del tema algunas veces y no nos parece tan descabellada una experiencia así, el volvió a sonreír y dijo, uuummm que bien.

el masaje continuó y después de unos minutos de silencio me dijo, eres bien lampiño y tienes buen cuerpo, yo un poco tímido respondí, si? gracias, te parece atractivo un cuerpo sin vellos?

el dijo después de un suspiro corto, la verdad?, si, demasiado, el tacto con una piel sin vellos es delicioso, en ese momento sus manos masajeaban la parte superior de mis caderas apenas si bajando un poquito la toalla que cubría mis nalgas, la forma en que movía sus manos ungidas con aceite de aroma a naranja, era muy inquietante, por momentos me sentía ligeramente excitado, entonces me preguntó, te molesta si retiro la toalla?, no, para nada, respondí, al retirarla exclamo, vaya, tienes unas hermosas nalgas, yo sonreí y le dije, en serio?, mi esposa me molesta diciéndome que tengo culo y piernas de nena, que tal ah?, le sonrió y dijo, pues si me permites el comentario, ella tiene toda la razón, en serio? dije un poco sorprendido, el aplicando más aceite en sus manos respondió, sin duda, son hermosas, sin verte el resto del cuerpo, perfectamente se podría pensar que eres una bella mujer, en ese momento me reí un poco fuerte y le dije, no fregues en serio?, desde luego, contestó con su normal tono suave de voz, ene se momento, sentí sus manos deslizarse muy suave pero firmemente sobre mis nalgas, me estremecí un poco y el preguntó, te sientes incomodo?, entonces con mi voz un poco afectada le dije, no, lo que pasa es que nunca un hombre había tenido sus manos ahí, el replico, ah bueno, pero te sientes bien?, si, desde luego, tranquilo sigue, le dije con voz tenue, mi verga estaba un poco erecta y esto me hacía sentir un poco nervioso, sus manos se deslizaban con firmeza masajeando muy sutilmente mis caderas y nalgas, entonces de repente, apretó con fuerza mis nalgas y las separó bastante, en ese momento exclamó, uuufff, le pregunté intrigado, que sucede, el tartamudeando un poco respondió, nada,... nada, entonces le dije, fresco, dime qué pasa, el vaciló unos segundos y balbuceo, de verdad puedo decírtelo? si, fresco, que es, respondí, pues... es que.... tienes un ano hermoso, en ese momento solté una risa fuerte y le dije, no jodas, también eso?, huy si, respondió el visiblemente excitado, se nota que nunca te han hecho nada ahí verdad, por supuesto que no, respondí un poco sorprendido, el calló unos segundos y dijo, sí, claro, sus manos seguían masajeando muy suavemente esa zona y note que cada vez las metía un poco más entre mis nalgas, eso me tenía bastante inquieto y en honor a la verdad bastante excitado, sus movimientos por momentos se sentían mas que un masaje, unas caricias muy eróticas, en un momento sentí como sus manos se deslizaron completamente entre mis nalgas, instintivamente las apreté con fuerza quedando estas atrapadas allí, entonces me dijo, uuufff, que caliente estas ahí, a esas alturas del masaje me atreví a preguntarle al sentir su respiración bastante agitada, estas excitado?, el calló unos segundos y respondió, tú qué crees, a lo que contra pregunté, dímelo tu, entonces me dijo, de verdad quieres ver que tan excitado estoy?, si dime le contesté, en ese momento el se bajo el pantalón y tomo mi mano que estaba justo al lado de su cuerpo y la coloco en su verga muy erecta diciéndome, mira así de excitado me tienes, en ese momento retire con rapidez mi mano de su miembro, el se sorprendió también y con gesto apenado me dijo, huy, por favor discúlpame, creo que me deje llevar demasiado lejos, lo siento mucho, yo respire profundo y tras reponerme un poco de la sorpresa le dije, no, fresco, no te preocupes, creo que ambos nos dejamos llevar, pero todo está bien, mis ojos se posaron por unos segundos en su verga trigueña y completamente erecta, uuufff todo eso es por culpa mía?, el se quedó mirando fijamente mi culo y dijo, uuufff, la verdad es que estás muy bueno, yo estaba muy sorprendido y excitado con todo lo que pasaba, en ese momento, el tomó de nuevo mi mano y la colocó en su verga para que lo masturbara mientras el frotaba sus dedos resbalosos entre mis nalgas, de nuevo volví a apretarlas con fuerza y el muy excitado me dijo, te gustaría apretar mi verga así?, vacilante respondí, uuummm, no sé....la tentación es muy fuerte, entonces sin decir nada, se desnudó por completo y aplicando aceite en su miembro, casi de un salto trepo a la camilla y unos segundos después, estaba costado sobre mí, al instante, sentí su verga colocarse justo entre mis nalgas mientras metió sus manos por debajo de mis hombros, sujetándose con fuerza de ellos, su respiración era muy agitada y sus movimientos pélvico muy fuertes, entonces casi balbuceando me dijo, huy no, que culo tan rico tienes, de verdad en esa parte eres toda una nena, entonces entre gemidos respondí, si?, él dijo muy agitado, si, eres una nena muy rica, tienes un culote divino, uuufff,... su cuerpo completamente pegado al mío, me producía unas sensaciones que jamás imagine sentir, cuanto más frotaba su verga entre mis nalgas, más me hacía sentir como mujercita, creo que en el fondo, después de fantasear en repetidas oportunidades con mi esposa sobre algo así, finalmente estaba aflorando esa fantasía.

cuanto más pasaba el tiempo, sus movimientos eran más fuertes, su respiración en mi nuca era como la de un toro salvaje, entonces muy agitado me dijo al oído, mamacita rica, quiero metértela toda en ese culito divino, en ese momento me estremecí y le dije, huy no, eso debedoler demasiado, soy muy estrecho en esa parte y tu verga es bastante grande, entonces el me dijo, no te preocupes, te aplicare algo que hará que ni te des cuenta cuando te entre toda, sin decir más se puso de pie y de un cajón del pequeño mueble de los productos, saco un tubo como de ungüento o algo así y se colocó una cantidad moderada en uno de sus dedos, entonces, con una mano separo mis nalgas y comenzó a frotar esa crema en mi ano con movimientos circulares, se sentía un poco cálida, poco a poco, su dedo se fue introduciendo en mi culito impregnándolo internamente con el ungüento, cada vez lo empujaba más adentro mientras lo giraba suavemente, yo me aferre con fuerza a la camilla, entonces pe preguntó, te gusta?, mordí mis labios mientras exhalaba un gemido profundo y le dije, si, se siente rico, a lo que respondió, rico vas a sentir en unos minutos, te voy a hacer gritar pero de placer, ...de nuevo exhale un gemido profundo, entonces de repente se ubico frente a mí y sin decir nada comenzó a golpear enérgicamente mis mejillas con su verga, luego me dijo con acento de macho dominante, quiere probarla?, no alcance a decir nada cuando él tomó mi cabeza con sus manos y sin mediar palabra, metió su verga en mi boca, comenzó a mover su pelvis de una forma muy lujuriosa y erótica, esa verga dura y gruesa, entraba y salía en mi boca una y otra vez, el quería que me la tragara toda, pero solo me cupo la mitad, podía sentir esa cabeza en mi garganta haciéndome toser, Jordan lucía tremendamente excitado, me dijo muy agitado, uuufff, que rico la chupas, también tu boca es de nenita traviesa, entonces me dijo, acaríciame los huevos perrita, anda hazlo ahora, ...esa palabra me impactó un poco, pero igual con mi mano izquierda comencé a frotar sus huevas y a apretarlas suavemente, otra sensación que nunca imagine tener, no sé como sucedió, pero pasados unos minutos, su verga estaba completamente dentro de mi boca, sentía una buena parte de ella en mi garganta, la molestia fue desapareciendo gradualmente hasta el punto en que literalmente me estaba culeando por la boca, esa sensación no se comparaba con nada, entonces de repente, se retiro de mi boca y colocando una cantidad generosa de aceite en sus manos, lubrico muy bien su verga y a la vez mi culo, volvió a acostarse sobre mí, de nuevo sentí su verga muy dura y resbalosa entre mis nalgas, sus movimientos eran fuertes al igual que los apretones que yo le daba en su excitado miembro viril, entonces me dijo muy agitado, ahora te voy a enseñar como coge un macho a una perrita deliciosa como tú, te voy a llevar al cielo mi amor y ya no vas a querer regresar de l nunca más, esas palabras me desconcertaron un poco, pero era tan intensa la excitación y tan nuevas todas esas sensaciones, que solo acate a seguirle el juego, de repente, se apoyó en su brazo izquierdo y con la mano derecha, tomó su verga y froto su cabeza con firmeza en mi ano, sin duda, ese ungüento había adormecido esa parte de mi lo suficiente para que apenas si sintiera como esa verga comenzaba a abrirse paso sin que sintiera dolor alguno, entonces de nuevo se acostó completamente sobre mí y me susurró al oído, relájate perrita, deja que tu culote hermoso se trague toda mi verga, se que está muy ansioso, o no?...si, si, respondí jadeando, lo deseo, entonces comenzó a lamer y besar mi cuello y orejas y cuando sintió que estaba relajado, de un empujón suave pero firme, hundió una buena parte de su verga en mi culito, un fuerte y profundo gemido salió de mi garganta mientras me aferraba con fuerza a la camilla, en ese punto no había nada que hacer, el había logrado hacer de mi su perra y convertirse en mi macho, sus resuellos fuertes y sus palabras llenas de lujuria me excitaban cada vez más, me repetía a cada momento,...uuufff, perra deliciosa, que culo más rico tienes, desde hoyeres mía y de nadie más, entiendes?, solo atiné a responder, ..si, siiiiii...cada segundo que pasaba, sus envestidas eran más fuertes y profundas, parecía un loco poseído, sus palabras de macho dominante, hacían que cada momento que pasaba me sintiera mas su mujercita puta, para entonces, mi hombría había quedado lejos, todos mis sentidos se identificaban con una nena muy arrecha ansiosa de se poseída por su macho.

el morbo, la lujuria y el placer desenfrenado, fueron los dueños absolutos de nuestros cuerpos y sentidos, las poses más atrevidas fueron dándose a cada momento, jamás imagine llegar a sentirme así, ahora entendía a mi esposa cuando se desbocaba por completo con otro hombre, hasta el punto de convertirse en la más puta de las esposas, ahora yo era igual que ella, tenía un macho que hacía de mi su objeto sexual a su antojo y lo mejor, es que yolo estaba disfrutando increíblemente.

después de algo más de una hora de desenfreno sexual total, supe lo que era sentir en mi boca un torrente de semen caliente, se vino tan profusamente que alcanzo para bañar mi rostro, una y otra vez, su verga violaba mis labios y dejaba dentro de mi boca un poco más del delicioso producto de su inmenso placer.

aunque amo a mi esposa inmensamente, no puedo negar que después de esa experiencia, con frecuencia me siento muy mujer y pienso en mi macho con un fuerte deseo de tenerlo a mi lado y entregarme por completo a sus más bajas pasiones que también son las mías..