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Después de mi encuentro con Raúl estuve alejado del sexo con hombres, aunque bastantes inquietudes en mi cabeza seguían rondando. Siempre con mi jefe, el VP de la empresa, tuvimos un trato profesional y aunque nuestra amistad creció, nunca tocamos ningún tema íntimo.
Un jueves me invito a jugar Squash al club de ejecutivos y la pasamos muy bien, lo convertimos en habito y aunque yo siempre me duchaba y me iba justo después de jugar, él se quedaba en el sauna y recibía masajes en el SPA. Uno de esos días el VP me invito a quedarme al sauna y a una sesión de masajes, lo entendí como una declaración de intenciones ya que un sauna puede llevar a otras cosas, pero no fue así. Después de jugar entramos al sauna y allí solo hablamos de negocios y trabajo y solo al final el VP me indico que su masajista personal me iba a dar el masaje a mí, me advirtió que era un masaje muy particular y que no me fuera e escandalizar, yo le pregunte si era con final feliz y el solo dijo que era un masaje muy particular que Arley (El masajista) le venía haciendo los últimos meses y que ya iba yo a ver pero que no era nada sexual, solo muy relajante.
Llegamos a la sala de masajes y con toda naturalidad el VP se desnudó y se acostó boca abajo en la mesa, me miro y me dijo que hiciera lo mismo que Arley nos iba a atender a los dos al tiempo. Me quite todo menos la toalla y me acosté en la Camilla y a los dos minutos llego Arley. El VP le indico que empezara conmigo y que me hiciera el mismo masaje que le hacía siempre.
Arley empezó a masajearme de abajo a arriba, primero las piernas después la espalda y el cuello, todo muy normal, muy fuerte y con aceites pero muy serio y profesional. Se sentía bien pero no me pareció nada particular; después me pidió que esperara y fue a hacer lo mismo a mi jefe. El estaba desnudo y le aplicó aceite en todas partes incluso en sus nalgas; se las apretaba y se veía bien erótico. Después volvió a mí pero esta vez Arley me pidió que me quitara la toalla. Arley aplicó aceite en mis piernas y en mis nalgas y empezó a masajearme, muy fuerte constante y firme, de abajo a arriba. Sus manos llegaban has mi ingle, sus manos se abrían y me acariciaban las nalgas, su dedo se deslizaba sobre mis nalgas y muy cerca de mi ano. Después pues se dedicó a masajear mis nalgas, en círculos, abriendo las manos y metiendo sus dedos pulgares entre mis nalgas, sin decir palabra, pero parecía serio, profesional y erótico a la vez.
Después de unos cinco minutos me pidió que lo esperara y fue a hacer lo mismo a mi jefe. Esa escena se veía magnifica porque Arley era más específico y lento en las nalgas de mi jefe, el abría las piernas y Arely lo hacía más lento, dejaba sus manos en sus nalgas y sus dedos un poco más entre ellas, no podía ver en detalle, pero era como si le acariciara el ano con su dedo pulgar. Mi jefe me miraba y en esas me pregunto que si me estaba gustando el masaje y solamente atine a decir que no me gustaba ni la mitad de lo que a él se le veía que le gustaba.
Arley no decía palabra, al rato volvió hacia mí y me dijo que me volteara boca arriba; la verdad imagine que iba a masturbarme, pero no fue así. Arley masajeo mis piernas, mi pecho, mi cuello, luego mis piernas y mi ingle alrededor de mi verga que estaba dura y expuesta, pero Arley la ignoraba y no decía nada, no la tocaba, solamente a punto de terminar el masaje me acaricio las bolas y para terminar paso su mano alrededor de mi verga de abajo arriba una sola vez, como escurriéndola! El hombre sabía lo que hacía y me puso a mil pero ahí se detuvo y me dijo que había terminado conmigo, que podía retirarme si deseaba, pero el VP me dijo que me quedara y lo esperara.
Entonces me senté en la Camilla, puse la toalla encima de mi erección y me dispuse a ver como Arley terminaba con mi jefe. Antes de ponerlo boca arriba se montó encima de la Camilla y se sentó encima del trasero de mi jefe. (De no ser por la sudadera que tenía puesta, diría que Arley se iba a comer a mi jefe) Le masajeaba la espalda duro, podía verse que Arley movía las caderas y le apretaba las nalgas con su propio bulto. Después de unos minutos así, le pidió a mi jefe volverse y le hizo el mismo masaje que a mí con la misma finalización, solo que la acariciada de verga fue más lenta en este caso. Arley le dijo que estaba listo, mi jefe le dijo que lo de siempre estaba enun sobre en el maletín, Arley se volteó sonriendo y me dijo:” “El no ve la hora que me anime a masajearlo en pelota pero hasta allá no me da… se va a quedar esperando!”
A todos nos dio risa y Arley salió del cuarto, nosotros nos fuimos a las duchas y mi jefe me pregunto que como me había parecido, solo pude decirle que muy particular, erótico que lo dejaba a uno con muchas ganas de muchas cosas, le pregunte que si lo del sobre era el pago por el servicio extra y él me dijo que si, que había tratado de que Arley llegara más lejos pero que solo había llegado hasta la metida del dedo y la acariciada de verga, yo le dije que a mí no me había metido el dedito y el jefe se echo a reír!!!! Me dijo que Arley no se animaba a más ni por plata y que él lo entendía y lo disfrutaba así.
Me dijo que quiso compartirlo conmigo porque éramos amigos y sabía que a mí me iba a gustar. Después de ducharnos y rumbo al parqueadero me dijo que yo debería aprender de Arley para hacerle los masajes… que el preferiría pagármelos a mí.