Salgo de bañarme, te veo secando tu cabello estás de espalda, desnuda, expuesta y al alcance de mis labios, mis manos, mi piel, mis ganas.

Me acerco a ti, mis manos llegan a tu cadera, mi cuerpo roza tu piel, mis manos inquietas empiezan a recorrer tu piel, suave, delicada, mía, solos, el tiempo no esta presente, únicamente nuestras ganas para dejar cohibir nuestros deseos, te das la vuelta, nuestras miradas empiezan a jugar, mirando nuestros labios, mordiendo y saboreando sin tacto, mi mano izquierda llega por detrás de tu cuello, en calma me acerco a ti, nuestro beso, suave, lento, con un par de lenguas inquietas, mi mano derecha acariciando tu piel, hasta llegar a tu cola, por más que nuestro besos es suave mis ganas hacia ti no lo son, aprieto tu nalga, tu agarras mi lengua con tus dientes, sonrío cómo te gusta y te suelto.

Nos acercamos a la silla del amor, me siento, te digo que quiero comerte, de pie dejas tu sexo a mí placer, te beso iniciando con tus labios, mi lengua se desespera al sentir que empiezas a lubricar, penetra en ti buscando probar más de tu excitación, de tus ganas, me empiezo a masturbar, tu cadera se acerca más a mí, me dejas sin poder respirar, acercas con más deseo tu vulva a mí boca, te masturbas con mi boca, yo quiero comer más de ti, con mis manos te cojo la cadera buscando estar más dentro de ti, desesperado, necesito más de ti, te sientas sobre mi verga dura, te penetro con mi verga lubricada, dura, caliente, mí placer combina con el tuyo, cuando te sientas completamente dejo mis brazos bajo tus piernas para cogerte de las nalgas y estar aún más dentro de ti, mueves adelante y atrás tu cadera, te ayudo con mis manos, tus manos entre mi cabello buscando hacerme venir, continuas hasta el punto de estar segura que me voy a correr, salgo de ti y siento como tus manos y tu saliva me masturban con ansias de ver cómo me haces venir en tus manos, sobre mi abdomen y mi pecho sale lo que buscabas.

Mientras me limpio el desastre que dejaste sobre mi, caminas desnuda por la habitación, buscando algo en tu cartera, yo me siento en la cama con las piernas abiertas, me deja caer en la cama, tú dejas en mi mano el control del juguete que compré para ti, estás frente a mí con el juegue dentro de ti y dispuesta a que yo vea cómo te excitas, controlo la intensidad del vibrador, te acuestas a mi lado, disfrutando como te vas calentando cada ver más, me miras y pones una de tus manos sobre mi, dejo te torturarte para sacar el aparato de ti, me haces acostarme, me montas hasta tenerme dentro de ti, empiezas a rozar tu clítoris con mi pelvis, tus manos en mi pecho, mis manos en tus piernas, apretando tu cadera, acariciando tu espalda, conociendo tu cuerpo, tomas el vibrador que teníamos a nuestro lado, lo prendes, te sientas y lo usas para masturbarte, dejando para mí placer el deleite de ver como te tocas, como me usas para hacerte venir, el vaivén de tu cadera, tus manos entre mi cuerpo y el tuyo me excita cada vez más, mi boca en tus senos mientras sigues quitándote las ganas con mi cuerpo, te pones en cuatro con la cara en el colchón y con el juguete aún activo en tu clítoris, entro en ti con las misma pasión que me hiciste salir, brusco, agarro tus nalga, las agarro con deseo, disfrutando del delicioso manjar que me estoy cogiendo, hago que quedes completamente acostada, te penetro profundo, olvidó lo frágil, delicada de tu piel y te cojo sin cuidado, te vienes apretando y tensionando tu cuerpo, te vas relajando, me quedo a tu lado, me abrazas y acaricias mi sexo aún duro, con más ganas de ti, deseando que esto sea real, no una fantasía.

Deseo tenerte una vez más y gozar juntos.