El relato que van a escuchar a continuación es 100 % real y me ocurrió recientemente. Aquí vamos...

Estaba yo muy tranquilo terminando un trabajo importante de mi empresa cuando recibí un mensaje de WhatsApp a media noche de mi amiga que le llamaré Valeria para proteger su privacidad.

Valeria es una chica que conocí hace varios años y fuimos muy buenos amigos, pero nos separamos porque me mudé del sector en el que vivía de la ciudad de Bogota y perdimos contacto mucho tiempo, pero esa noche por cosas del destino empezamos hablar banalidades por texto hasta que poco a poco encontramos en el sabor de las palabras más sexualidad a medida que iba avanzado la conversación.

Llegamos al punto en el que ella me pidió literalmente que le explicara cómo la convencería de acostarse conmigo, cosa que no dudé en explicarle con toda la prosa que fluye de mi ser jaja. 

Para no hacer lo corto largo, transcribiré lo que le dije en su momento con pequeños cortes en la historia para dar detalles importantes:

Ella: Bueno dilo con tus palabras... como me convencerías. 

Yo: Cómo te convencería? ?

Bueno pues lo primero que tendría que hacer es invitarte a salir una fria noche de viernes o sábado para re-encontrarnos de nuevo, tal vez con unas cervezas de por medio y un snack... ya sentados viéndonos uno al otro te comenzaría hacer preguntas abiertas con tal de encontrar nuevamente esas cosas en común que nos caracterizaban antes y luego esperaría a que me hablaras de tu vida profesional, tus sueños, tus experiencias y nos diéramos ese espacio ameno y cálido de una buena charla que conecte uno con el otro.

Mientras hablamos yo siempre estaría viéndote a los ojos con pequeños cambios de foco directo a tus labios, ojo izquierdo y ojo derecho y con mis dedos rosando tus dedos como queriendote acariciar las pierdas que representan estos.

Luego de que nuestra conversación fluyera muy bien tendría que buscar la forma de atender las zonas erógenas de tu cuerpo, que previamente me habrás dicho entre risas y miradas picaronas. 

Siempre atendería que tan rápido respiras y cuanto tiempo podrías sostenerme la mirada en momentos de silencio que se presenten cada que finiquita un tema del que estemos hablando. 

Luego tendría que buscar la forma de besarte permitiendo antes que el efecto del alcohol y los sentidos se adueñaran de nuestro momento para lo cual yo siempre avanzaría hasta un 90% esperando a que tu me dieras el 10% restante, y si te voltearas en signo de rechazo, claramente yo sonreiría y seguiría filtreando con tal de que fuera absolutamente inevitable que tu me besaras o yo ati con deseo ferviente.

Por consiguiente te llevaría con todo recelo hasta la puerta de tu casa tal vez tomados por la mano o tal vez no, pero siempre portandome como todo un caballero y esperando a llegar a la puerta de tu casa para soltar alguna inteligente excusa para que me permitieras subir a tus aposentos y terminar lo que tus ojos me transmitieran y tus labios me desembrollaran. 

En el caso que la divina suerte estuviera de mi lado aquella noche y yo lograra entrar a tu casa, esperaría a saber donde esta tu cuarto para preguntarte si puedo pasar a mirar, y si podríamos hablar muy tranquilos y fuera del ruido de la calle y la noche oscura que nos rodeará en ese momento. 

Claramente tendría que besarte de nuevo en donde fuera que estuviéramos para que algo allá más abajo comenzara activarse ligeramente y con mis manos bajaría firmemente a sobretocar tus glúteos con suavidad al principio pero luego con la dureza que requieren ser tocado tu culo. 

Permitiría que tus manos se deslizaran por mí pecho y sintieras el calor que emana mis pectorales, abdomen y pelvis con ganas de devorarse totalmente a un cuerpo tan bestial que tendría en frente. 

Luego en el transcurso de nuestro beso pasaría a descubrir tus hombros que seguramente estarían todavía airosos de salir de tu remera y de la misma forma esperar a que tu hicieras lo mismo. 

En este punto mi idea era explicarle a Valeria toda nuestra faena, ya que como podrán notar a estas alturas ya estará  convencida de follar. 

Como traido del cielo colocaría un poco de música de la playlist que previamente habría seleccionado para dicho momento y bajaria un tanto las luces de tu cuarto para que el momento fuera más tenso y sensual al la vez. 

Siguiendo con mi apoderado beso en tus labios, procedería a desprender tu encantadora blusa del color rosa que pasa ahora por mi mente de forma muy tranquila y con el timing adecuado para que se permita entre ver poco a poco el color de la lencería que traes, para lo cual pasaría primero a acariciar suavemente por alrededor de tus grandes senos con el rozar de mis dedos en son de coquetear les por encima del brasier. 

Luego con tal de abonar el delicioso terreno que me quedaría por explorar más abajo, pediría con firmeza con mi mano que tu mano se adentrará a el recóndito espacio de mi pantalón en el que ya estaría gustoso en ser consentido mi pene sollosante de tal vez el fluido preseminal que podría estar produciendo. 

Luego procedería a avanzar con mis labios por tu cuello, por tu esternocleido y tu pecho acercandome cada vez más a tus hermosos senos que para ese momento ya estarían sedientos de un poco de mi tibia saliba, cosa que no les negaría en absoluto descubriendo así tus pezones que imagino tener en mi boca muy duros y pronunciados. 

No tardaría entonces en recostarte en tu cama mientras con mucha impetuosidad deboro tus pezones y en general esas tetas que toda la noche me estuvieron coqueteando.

Luego seguiria acariciando tus senos mientras mis labios se pierden por el camino de tu abdomen, pelvis y finalmente vagina deseosa de ser besada al igual que todas las partes de tu piel. Ya para ese momento considero que podría retirar tu pantalón o falda y procedería a mover hacía un lado tu inundado panty con tal de tener de frente ese manjar lleno de fluidos vaginales que no tardaría en comer sin parar, pero no sin antes pasar toda mi lengua por tu vagina. 

Perfectamente lubricado tu sexo con mi lengua no restaría más que pararme en frente tuyo mientras desabrochas mi cinturón y jean para dejarme en ropa interior y luego bajar mi bóxer para que saltase con fuerza mi pene duro y carnoso.

Daría igual que tu boca se comiera completamente mi falo, pero lo que si es verdad es que te tomaría de las pantorrillas presionando hacia adelante tus piernas para que queden éstas al nivel de tu cabeza y descubriendo completamente tu vagina procedería a coquetearle con mi pene por encima con tal de que me deseara con tanta fuerza que tuviera que fuertemente ingresar toda mi verga en esa rica cuca que partiría en dos toda la noche haciendote gemir tanto por las embestidas que te daría, que de una u otra forma de tanta excitación y deseo, terminará eyaculando dentro de ti, llenandote de mi lechesita caliente todo tu útero y vagina, hasta quedar chorreando de toda mi esperma.

Ella: jajaja

Ella: Oye, solo tengo una pregunta 

Ella: Eso te ha servido con otras mujeres ?

Yo: ha funcionado bien con algunas, otras solo quieren desvertime y que me las folle sin ningún preámbulo. 

Ella: jajaja ok

Ella: Me hiciste reír con toda tu historia

Ella: Mira la hora y ya tengo sueño

Ella: Descansa y hablamos en estos días que es fin de mes e inicio son pesados.

Yo: Okey muy bien, descansa Vale.

Gracias por llegar hasta aquí, déjame en los comentarios que parte crees que me descalibré y como lo hubieras dicho tu en tu caso :)