Pelo rubio, crespo, largo, escandalosa, y muy extrovertida… Yo, todo desatinado, con 20 horas en el aeropuerto, agotado, agotado de la gente, así conocí a la protagonista de esta historia.

Hola, para los que no me conocen, soy Lokolop, y soy adicto al sexo. Soy un joven de 27 años, bisexual y muy sexual (aunque en el último año mi vida sexual ha sido un poco deprimente, por eso no he escrito tanto) Sin embargo, hoy les traigo una historia, que aunque es 100% real, hay cosas que uno cree que sólo pasa en las telenovelas, ejemplo el cómo la conocí, la protagonista de esta historia...

Estábamos en una escala de conexión, ambos veníamos de distintos países, pero teníamos que tomar el mismo vuelo, ella estaba hablando por teléfono al lado mio, a todo dar, (la gente es un poco irrespetuosa con este tema, no se dan cuenta que molestan) yo leyendo, y hablando por chat con mis amistades y recuerdo que también en un app gay sexual con un man que conocí por chat pero no paso nada, este no viene al tema.

Nos cambiaron el vuelo, y tuvimos que cambiar de sala, y ahí fue que me di cuenta, tenia puestos unos blue jeans, ajustados que marcaban el trasero, no enorme, pero si voluptuoso, se movía muy sexual, o yo estaba muy cachondo (lo cual es posible) cuando llegamos a la nueva sala, “casualmente” quede al laod de ella, y le saque conversación, algo tipo, “¿sabés que fue lo que paso? Pero saque todo mi acento colombiano, que en esa época lo tenía muy marcado, lo que origino que me dijese, “no, la verdad es que no, ¿eres de Colombia? Ahí cayo ja,ja,ja, comenzamos a charlar, y estaba con nosotros otro chico, un tercero en la historia que ni el nombre recuerdo. Viajamos, llegamos a Buenos Aires – Argentina, donde los dos vivimos, quedamos en contacto y salimos 1 o 2 veces, en ese tiempo yo y ella estábamos entrando en una relación con otras personas, motivo por el cual no paso nada, pero siempre la recordé, le respondía las historias, me gustaba la chica (es ese queso que le tenés ganas y siempre vas a querer comerte y no sabés si se dará… bueno, se dio)

En medio de esta pandemia de mierda que estamos viviendo, en febrero terminé con el pelota de mi ex, y en Marzo, casualmente, le respondí una historia, nuevamente, sólo que fue distinto, habíamos intercambiado un par de chats en el 2021, pero no se había concretado, ese día fui al grano, después del hola, blablablá, le dije:

Yo: Bueno,cúando nos vemos?

Ella: Tenés planes el sábado?

Yo: si, contigo.

Ella: De una. Propuso un sitio, y ahí quedo todo.

Llego el sábado, el día estaba una mierda, así que quedamos en ir a cenar. La fui a buscar a su casa, vive a 1 km de la mía, y fuimos al bar-rest. Es una terraza al aire libre, muy amena, y cómoda, estuvimos charlando desde las 9 hasta las 2 que nos botaron, salimos a caminar un poco y la volví a dejar en su casa. Fue una noche muy muy agradable, no podía dejar de ver en su blusa blanca como se marcaba su brasier, como cuando iba al baño, meneaba ese trasero que tanto recordaba del aeropuerto.

Los que me conocen, saben que me gusta disfrutar de los momentos y detallarlos. Con mujeres, me gusta ir a veces lento, no soy el macho alfa, sexual, así que mi coqueteo va por otro lado, por los detalles, los momentos, las energías y las sensaciones.

Nos seguimos viendo y hablando, a toda esta, no había pasado, nada. Sin embargo, el sábado siguiente, la invite a celebrar mi cumpleaños, se vino a mi casa con unos amigos y conmigo, estuvimos hasta las 5 am hablando mierda en casa, y pidió el taxi, cuando íbamos en el ascensor, la agarre y le di un beso que le comía la boca, mis pantalones estallaban, y así como explotaban, se los recostaba en su pelvis, el ascensor llego a planta baja, y pise el ultimo piso para seguir comiéndome la boca de esta nena, con mis manos baje a su trasero, ese trasero que tanto había querido tener en mis manos. Recordé, como hace dos días, había venido a mi casa, y tenía puestos unos pantalones blancos que marcaban el hilo dental que tenía puesto, llegamos al último piso, y marque a planta baja, así fueron como 3 o 4 veces, a todas estas el taxi ya estaba afuera jajajaja. Se fue a su casa, quedamos chateando y quedamos en que vendría a mi casa al día siguiente… Cuando vino, cogimos, pero ese es otra historia, hoy les voy a relatar, el polvo del miércoles siguiente…

Hablando después de trabajar, la saludo y me cuenta como termino su día, y me dice, acá compré un vinito, a lo que le dije, “uy, hay que tomarlo” y dice, si, cuando quieras, y le puse, saliendo a tu casa en 3,2,1… y me fui de una. Realmente disfrutaba del morbo con esta mujer. Llegue, me fui en ropa sport, shorts con bóxer, camisa y tenis, ella estaba con un vestido, poca ropa. Llegué, y la comencé a besar, y me dice, el vino, el vino… y le dije bueno, si, esta bien, nos portamos bien.

Destape el vino, estuvimos hablando, me levante, y comencé a besarla, comencé por el cuello y a mover la tira del vestido poco a poco con la boca mientras con mis dos manos iba subiendo por los dos muslos, sintiendo cada centímetro de sus piernas mientras mi erección subía y subía, sentía como me lubricaba, y eso me calentaba cada vez mas. Llegue a su pelvis, pero no me detuve ahí, mientras le besaba el cuello, la boca, los hombros, subía con mis manos por su abdomen y costados, y mi boca bajaba por sus pechos, encontrando mis manos y mi boca en sus pechos y el vestido todo estrecho, decidí quitar mi cara y con mis manos adentro, quitar el vestido, todo esto, sentados en las bancas de la cocina… le quito el vestido y le comienzo a besar los pechos, pequeños, no muy grandes pero paraditos, punteados, firmes, de pezones grandes, excitados, los besos, los muerdo y los aprieto con una mano, mientras con la otra voy recorriendo nuevamente sus muslos y llego a su entrepierna, comienzo a frotar sobre la panty que tenia puesta, y empiezo a bajar besándole los pechos, subo a la boca de nuevo, mientras le beso la boca, muevo la panty a un lado y bajo con la boca y empiezo a hacerle sexo oral, lento, despacio, en el clítoris, sintiendo como esta excitada, y juego con mis manos en sus pechos, en sus costados, le aprieto los pezones, le sigo besando su deliciosa concha, y empiezo a besarla con lengua poco a poco y subo nuevamente a seguir en el clítoris, despacio, como ya se que le gusta, chupo un poco, paso la lengua, y decido bajar una mano mientras la otra le aprieta el cuello, y con mi mano derecha empiezo a introducir un poco un dedo para sentirla mientras le digo “juepueta, que rico que sabes acá adentro” A todas estas, yo seguía totalmente vestido, me agarra y me quita la camisa, y decido cargarla, con la panty puesta, yo con los shorts y los tenis, y me la llevo a la cama, la acuesto, y le quito la panty, y dejo toda esa concha para mi solo, para seguir devorándomela, la veo mientras se la chupo y veo como cierra los ojos, tira la cabeza para atrás, gime, se agarra los pechos y de pronto agarra mi cabeza y la aprieta fuerte contra la vagina, incremento la intensidad de la chupada y comienzo a escuchar:

Ella: mierda, que rico, “lokolop” (decía mi nombre, pero no lo colocare” sigue, juepueta, que rico, sigue, sigue, ahí, si ahí, ahí, ahí, que ricoooo MIERDA!!!!!

Me apretaba la cara duro, llego a un orgasmo delicioso mientras le hacia sexo oral y sentí todo en mi lengua fue riquísimo. Decidí, subir, y con su orgasmo en mi boca, subi a besarla, y me empezó a quitar el short, cuando lo bajo, y quede en boxers, tenia la verga dura, hecha piedra, y toda mojada, tenia unos boxers claros lo que hacia que toda la lubricación se viera, y me dice “que rico como se ve todo eso mojado” a ella, como estábamos en algo casual, no le gustaba bajar (si, terrible, pero bueno) y me dice, cógeme… Me saco el condón del bolsillo, y me lo puso, (me da mucho morbo cuando me agarran la verga, y me empiezan a colocar el condón)

La puse en pollito asado, y comencé a penetrarla, estaba MUY lubricada, se sentía muy muy rico, empecé suave pero profundo, no de apoco, el momento estaba para una cogida dura, así que empecé con un ritmo lento y profundo, disfrutándola mientras la besaba, la boca, el cuello, el pecho, como ella es más bajita que yo, me permitía disfrutar de muchas formas esa posición. La coloqué al borde de la cama, y comencé a cogérmela duro, sonaban sus nalgas contra mi pelvis, y parecía una chancleta mojada, sonaba riquísimo, gemía, y gritaba de a ratos diciendo que rico, se tapaba la boca, porque le daba pena con los vecinos. Yo estaba extasiado en el momento, me encantaba ver como le rebotaban las tetas, mientras ella con una mano se tapaba la boca y con la otra se apoyaba con la pared para que sonara de más la cama, y esas tetas subían y bajaban, comencé a agarrarle las tetas, mientras seguía cogiéndomela. Tras un ratito así, en la misma pose, bajando el ritmo para besarla, y cogerla duro besándola. La voltee y la puse en 4, se la enterré completa, y le seguía dando duro, como a una perra, en ese momento esta nena no era una chica, era una perra completa, le jalaba el cabello, con una mano, y con la otra le agarra las tetas, sentía como estaba por dentro riquísimo, y le soltaba las tetas, y mantenía el cabello agarrado y comencé a nalguearla, que sonara, ¡que sintiera que era mía! Eso la puso a mil, o mejor dicho a cinco mil revoluciones por minuto, y me decía, ay si, ¡dame pégame! ¡Que rico!

Paramos un poco, la voltee, nos seguimos besando, y me dice: “Ahora me toca a mi”

Me acostó, se puso encima de mí, y comenzó a cabalgarme como una maldita profesional, eso se veía hermoso como mi verga entraba en todo ella, una pro, no se salía ni un segundo, subía y bajaba, la apretaba un poco adentro y la movía, gemía, (ella en esta posición se viene muy fácil) así que decidí agarrarle fuerte las caderas y moverme con ella, entramos en una sincronía espectacular, mientras ella subía, yo bajaba un poco y nos encontrábamos de nuevo, empezamos a subir el ritmo nuevamente, y sonaba nuevamente riquísimo, y comenzó a apretar sus caderas sintiéndose adentro más estrecho lo cual me empezó a estimular muchísimo, ella a empezar a gemir y decir, ay sigue sigue, lokolop sigue, sigue, así que rico, y yo al tiempo diciendo, que delicia, jueputa, delicioso, que rico, y nos vinimos los dos al tiempo, yo adentro de ella con el condón, y ella encima de mí!

Se sentó conmigo adentro, me mira, y me pega en la cara y me dice, ¡maldito como garchas de rico!

Eso me re calentó y dio para otro round, pero que termino en el sofá, y es otra historia.

No suelo venirme adentro, pero el éxtasis con esta chica, lo ameritaba! Realmente fue uno de los mejores polvos que tuvimos juntos. Desde hace un par de semanas hemos dejado de hablar, pues yo no busco nada serio, y ella se estaba encaminando para eso.

Espero que lo hayan disfrutado como yo viviéndolo y luego, escribiéndolo.

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Besos ?