Desde que empezamos a conversar, ella siempre me habló que en su oficina había una bodeguita a la que llamaba "el cuartico" y que se soñaba una aventura .... Y ya llevamos 4 o 5 en muy poco tiempo. Así es la adicción.

Aunque nuestra primera experiencia fue una Moteleada en La Estrella que estuvo de ensueño, quería obviamente cumplir su deseo. Yo no soy muy amigo de los rapiditos seguramente por ser tan romántico pero con ella como negarse?

Cuando llego al cuartico ella me recibe con un beso romántico y dulce mientras con una mano empieza a buscar mi entrepierna, momento en el cual me desabrocha el pantalón tan rápido y consiente como su arrechera se lo permite.

Verla hacer el sexo oral es un espectáculo. Antes de llegar al cuartico, siempre la caliento para hacerle dar ganas y cuando por fin tiene mi pene en sus manos se desquita de todo ese deseo reprimido por estar juiciosa en una oficina y se libera conmigo. Empieza por lamerme de la base a la punta y luego se lo mete a la boca. Mi pene se ve enorme dentro de su boca delicada y femenina. Yo no hago sino acariciarle el rostro y el cabello pero la sensación de venirme ocurre muy rápido en ese primer orgasmo para ella. No logro controlar mis caricias de tanta adrenalina y ella solo quiere que me venga en su boca, a lo que inmediatamente llego con toda, descargando mi pasión mientras ella se lo traga todo y se lame toda mi leche hasta el final.

En ese momento ya no necesita un juego previo porque está demasiado mojada y ella necesita ser recompensada y para eso estoy en su vida.

Nuestro primer intento de penetración en el cuartico fue comérmela sobre una mesa pero mis piernas eran muy largas para ese escritorio en el que se había sentado, por lo que decidimos mejor que yo me sentara en una silla y ella sentarse sobre mi estando de espaldas. Es un completo placer el show visual de ese culo tan espectacular entrando en mi pene, una cosa de locos que ella va combinando con unos movimientos que solo ella puede hacer porque no es algo que ella planee y de hecho no lo puede controlar, así reacciona ella.

Sin embargo, yo se que ella gusta más de penetraciones profundas y para que no se canse mucho de las piernas, le propuse que se sentara sobre mi pero estando de frente y esa pose es algo que ya nos caracteriza: el romanticismo y la pasión perfectamente mezclados. Ella gozando de lo lindo con mi erección en pleno sintiéndolo muy adentro y yo viendo ella como cambia esa carita con el aumento de la excitación, comenzaba con una cara de mujer arrecha que no podia controlarse y cuando se iba a venir cambiaba a unas expresiones de niña enamorada que quería lograr sus orgasmos en la máxima acción, momento en que se movía más rápidamente hasta que se venía delicioso con uno de sus ya típicos "jueputa que Rico"

Nuestros encuentros cada vez se han hecho más intensos en ese cuartico y no nos importa mucho si hacemos mucha bulla a los vecinos con el impacto en las embestidas.

La más reciente pose qué intentamos ahí fue arrodillarla en una silla para poder comérmela en 4 y tenerla en esa pose si que es un espectáculo visual, además que ella lo goza como nunca, debe ser su pose favorita inconcientemente y yo me aprovecho de eso.

Cuando siento que ya se empieza a venir teniéndola en 4, empiezo a masajear su clitoris para que su excitación aumente cada vez más y efectivamente ella empieza a gemir con más locura, lo que a mí me anima para comérmela cada vez más fuerte y más intenso. Es demasiado rico uno poder explorar estas poses y poder encontrar que su excitación nunca encuentra con tope máximo sino que ella simplemente se libera más y más.

Y no todo puede ser pasión y locura en ese cuartico, realmente nosotros terminamos siempre extasiados y abrazados el uno al otro jadeando juntos. Y ahí desarmada y desnuda me parece el momento adecuado para pedirle que sea mi novia ....