Me encontraba trabajando para una clinica pequeña que atendia pacientes de una EPS. Una dia cualquiera, llego una paciente llamada Angie que tenia 18 años, recuerdo que era blanca, delgada, rosadita, como de  50 kilos, media 1,65 cm. Consulto porque tenia flujo vaginal. Procedi a examinarla en la camilla, y me di cuenta que estaba normal. Le mande unos examenes. Volvio a control a las 2 semanas, me decia que seguia con el flujo que si podia hacerme otro tacto vaginal. Ella se acosto en la camilla, le realice el tacto vaginal, me di cuenta que cerraba los ojos y se lamia los labios. Termine mi examen y le mande un tratamiento empirico de todo para que la tratara y no volviera a consulta.  Volvio a las 2 semanas porque persistia con la sensacion de flujo, volve a hacerle un tacto vaginal, esta vez le meti y la sacaba los dados repetitivamente, me di cuenta que a ella le gustaba, mientras le metia los dedos y las masturbaba, con mi pulgar le acariciaba su clitoris; tenia el pene tan duro que disimulaba haciendo el tacto vaginal. Recuerdo que es dia le masturbe tanto como 30 minutos y estaba tan lubricada, botaba un flujo transparente y abundante, queria meterselo pero sabia que no podia porque era mi paciente.  Volvio una cuarta vez, le realice otro tacto vaginal, pero esta vez le hicen tanto hasta que más pude, la mano me la dejo temblando, ella solo cerraba los ojos y  sonreia. Le pedi un numero de telefono, empezamos a hablar, pero me decia que tenia novio y no le iba a hacer infiel. Asi que nunca volvi a verla, me quede con las ganas de penetrarla.