Como siempre la recomendación antes de iniciar  el siguiente relato, es que  para entender esta cuarta entrega  se deben leer las tres anteriores de MI MUJER Y YO JUGANDO CON FUEGO (1), (2) y (3) que están abajo de este, de antemano mil gracias por leer mis vivencias. 

(Importante: entiendo que ya no se permite "pegar" imágenes o fotos aqui mismo en los relatos, por eso si alguien quiere ver a "ERIKA" protagonista de estas vivencias y quien se divierte leyendo los comentarios tuyos así como los mensajes que le dejas en nuestro correo de "guía Cereza, puedes verla en las fotos de nuestro álbum incluso titulado como estos relatos:" Mi Mujer y yo Jugando con Fuego. 

Por favor dejanos LIKES (corazoncito) y ojalá comentarios y si alguien quiere escribir a nuestro correo, bienvenido.

Todo esto nos estimula, ya  que viene una quinta entrega, ya que he tenido que fragmentar el relato por lo extenso y varios de uds amigos, nos la han pedido. 

Antes de iniciar este relato de la saga,  debo mencionar que mi mujer en un principio no estaba  del todo de acuerdo en lo que he estado escribiendo en estas líneas, siente  que estoy  dejando en  evidencia nuestra intimidad. 

Le expliqué que esta página es de muchas personas a quienes les  ha pasado situaciones similares  y en la cual todos  prefesamos el mismo gusto por lo erótico y el libre pensamiento y que no nos van a juzgar, además le dije que por nuestra seguridad  cambié los nombres, el resto lo deje tal cual, así como procuré que no entraran más personajes a nuestra historia para evitar suspicacias o  que alguien se sientiera identificado y se reconozca.

Dicho lo anterior paso a continuar los sucesos del relato N° 4: 

Los días transcurrieron normales en la rapitienda trabajando los cuatro, en tanto Miguel y Erika mi mujer, ya se remitian a hablar solo por chat o personalmente en la misma rapitienda, por alguna razón esta relación se había enfriado.

Quise preguntarle a Erika, el porqué había sucedido esto, ¿porqué tan pronto y tan exabruptamente  se había acabado  la relación entre ella y Miguel?

 a lo que  ella me respondió 'que lo veía solamente como un niño con ganas y jugando a ser un hombre, a ser un semental, pero seguía siendo un niño, que ya no lo veía como alguien maduro e interesante'. 

Pasaban los días y seguíamos trabajando normal, la rapitienda, la misma rutina, atender clientes, a veces charlar con nuestros empleados y la rutina nos fue  atrapando durante  días y semanas.

Algo que rompía nuestra rutina era que a veces llegaba  Pedro, propietario de la rapitienda que nosotros administrabamos y por ende  jefe nuestro a visitarnos y a aportar alguna idea empresarial, a estarse unos 20 minutos en la Rapitienda y por supuesto a mirar a Erika mi mujer, a contemplarla, a mirarla con detenimiento, deseo y coquetería, llenándola de halagos burdos, a veces con doble sentido, le gustaba ver cómo caminaba, mirarle su trasero de manera fija y descarada.

Algo que generaba rechazo y hasta asco de parte de  Erika hacia El. 

Algunos días después Pedro me llamó al celular  a decirme  que estabamos invitados a la celebración de su cumpleaños, número 47, que dicho festejo se  iba a realizar  en el  condominio donde vivía y  le habían facilitado la piscina y el salón social y allí se iba a  llevar a cabo el cumpleaños de El, que se haría en horas de la tarde del sábado y por supuesto que llevara a Erika, hasta me pidió que la pasara al teléfono para invitarla directamente y que no aceptaba un NO por respuesta. 

Por supuesto asistimos, con Erika y yo (a regañadientes) y arribamos a esa celebración tipo  4  pm de la tarde, Erika se llevó unos pantalones cortos de mezclilla o  de jean (en Colombia), que finalizaba donde terminan  sus nalgas haciéndola lucir muy sensual, estos shores eran color azul y una blusa arriba de tiritas color salmón sin brasieres  marcandosele las puntas de sus pezones, por supuesto se veía muy hermosa con sus piernas desnudas, su trasero respingado y caderas  jamonudas y  sus pies luego de  un meticuloso trabajo de  manicura, lucían hermosos con  unas chanclas o  sandalias de cuero cafes,  le daban un acabado muy sensual. 

Obviamente iba  maquillada y llevaba también su diminuto traje de baño (o bañador como llaman en otros países) para la piscina. 

Cómo era de esperarse Erika era la sensación en esa reunión entre otras cosas porque había muy pocas personas, sólo dos parejas más, dos hombres y dos mujeres, todos amigos de Pedro y las miradas de todos, eran dedicadas a mi mujer por su sensualidad y cadencia. 

Un par de horas después algo alicorados, nos metimos a la piscina, las dos chicas, una gordita muy blanca y la otra chica trigueña y muy  delgada para mi gusto. 

Todos  jugábamos con un  balón de piscina  (inflable) y Pedro aprovechando que nos veía a todos "prendidos" como decimos en Colombia, no disimulaba ni  se "cortaba" para  acercarse y manosear a las chicas especialmente a Erika  y  abrazarla por  detrás o por el costado, en fin.

Unas cuantas   horas después siendo  7 o 8 de la noche nos adentramos a la casa, incluyendo  las otras parejas  y nos pusimos a consumir más  licor, a escuchar música y a bailar animadamente. 

Todos bailamos el repertorio habitual latino: salsa, merengue, regueton, etcétera y todos bailabamos alegres y 'entonados' por supuesto Pedro sacaba  a  bailar a Erika mi mujer con suma  frecuencia y obvio  intentaba bailar de manera  cercana y  amacizada, aprovechando el alicoramiento de todos y cuando eso ocurría, Erika me lanzaba miradas como preguntandome: ¿que hago? 

Yo solo sonreía, como una manera de validar que todo estaba bien y que no había problema, además era nuestro anfitrión y cumpleañero, además de ser nuestro jefe.

A veces la sacaba a bailar otro de los invitados que había puesto sus ojos en ella, pero rápidamente Pedro reclamaba su sitio como Macho Alfa y de nuevo la sacaba a bailar, como diciendo: 'esta es mi hembra'. 

Ya siendo tipo  dos de la mañana (2:00 AM), una de las parejas se despidió para irse  a su casa y la otra pareja que estaba con nosotros en la celebración  ya estaban encerrados  en una de las habitaciones del apartamento de Pedro  (supimos después que eran solo amigos y estaban aprovechando la  ocasión).

Quedamos solos los tres: Pedro, mi mujer (Erika) y yo en la sala charlando, riéndonos y claro soportando las descaradas miradas hacia Erika como si yo no existiera, le miraba sus piernas, sus nalgas cada que  ella se levantaba a traer algo, la atracción  era Ella, con la novedad  de que  Erika tal vez  por los efectos del alcohol  parecía no importarle, es más parecía agradarle y se ponía de pie más seguido y se contoneaba más sensual pasando cerca de Pedro.

Y ella al ponerse de pie para ir a la cocina y  pasar cerca  con sus caderas, con sus shores muy  metidos entre sus dos cachetes  carnudos, El la seguía con  la mirada dirigiéndose a donde  ella estaba  y acto seguido y  sin reparo alguno me decía en mi cara y con  su estilo vulgar:

"¡Ufff  Erika esta muy rica, que culote! " 

El descaro consistía no sólo  porque me lo decía  a mí, el  marido de ella, sino porque no esperaba que  se alejara unos centímetros para decir estas cosas de tal manera que ella alcanzara a oír. 

Al regresar Erika por supuesto me Preguntaba al oído: "qué fue lo que El dijo de mi?"

Yo le contestaba: 'que estas muy buena', a lo que ella solo sonrió y empezaba a sostenerle la mirada y El contemplándole los senos, las caderas, las piernas, inclusive la entrepierna que se le dibujaba en los shores y ella sin apenarse en  lo más mínimo,  lo miraba a los ojos, en una "guerra de miradas" como aceptando el 

Reto.

A estas alturas se nos habían "pasmado" los tragos ya la música estaba más tenue y sólo conversábamos, incluso estábamos  algo cansados a lo que  Pedro nos dijo:

 "¿Porqué no nos relajamos? 

Le pregunté: ¿Como así? 

Me respondió: 

"El salón social está enseguida de mi apartamento  y antes de la piscina hay un cuarto, es un jacuzzi con agua tibia y hace hidromasajes, aprovechemos que a esta hora todos en el condominio duermen y nos queda solo para nosotros, ahí nos relajamos un rato y pones a esta culona a relajarse que debe estar cansada, jajaja". 

A lo que Erika también se rió con este comentario salido de tono. 

A estas  alturas yo ya  quería irme a mi casa,  bostezaba y quería una buena cama para dormir. 

Pero la respuesta que no esperaba de mi Erika fue: 

"Sii, metamonos un rato en agua tibia, con este frío es justo para relajarnos y hasta dormitar un poco". 

De nuevo a regañadientes salí con ellos rumbo a ese dichoso Jacuzzi pero al incorporarme sentí deseos de vomitar el licor, ese exceso de botanas y todo el revoltijo que había en mi vientre, sentí incluso unos deseos  Inmensos de "entrar al baño a hacer el N° 2,  aun más cuando me levanté de la silla y sentí esa pesadez dentro de mi y me toco decirles: 

"Chicos ya voy con ustedes tengo que ir al baño primero y debo tomarme un agua con limon" a lo que mi Erika respondio:

"Amor que pecao, estas malito?" 

(es un decir muy propio en Colombia). 

Yo le respondí: "si, pero tranquila amor ahora los alcanzo". 

Y Pedro en su acostumbrado 'modus vivendi' replicó:

"Demórese todo lo que quiera  que yo le cuido a la culona, jajaja". 

Acto seguido, El la tomó de la mano y la impulsó para que ella tomara la delantera y asi deleitarse con su precioso trasero grande y parado, mientras que ella consciente de  eso y entendiendo sus libidinosas intenciones se dejó llevar y le meneaba más sus caderas para provocarlo más. 

Entretanto yo entré al  baño, estaba muy bien enchapado con azulejos y  cenefas de lujo, muy aseado, con tapicería, con esencias, en fin todo perfecto donde pude "descansar de mi pesadez" luego a la cocina a buscar bicarbonato con limón y tomarmelos con un vaso de agua fría. 

Al rato decidí  dirigirme al dichoso "cuartito" del tal Jacuzzi, escuché risas y el sonido del agua borboteando, me acerqué sigiloso y al contrario de lo que tú (amig@ lector debes estar pensando) no estaban haciendo nada sexual, (obvio ellos sabían que en cualquier momento llegaría  yo). 

Pero  al intentar entrar los ví en plena  confianza, las ropas en el suelo, recordé que nuestros maletines quedaron en la casa de Pedro y nuestras ropas de baño las dejamos allá en el afán de venir a la zona húmeda. 

No se percataron de mi presencia ya que aún alicorados, riéndose y con algo de música que salía  de un viejo mini componente, no me veían mientras yo en la oscuridad me dejé llevar por la curiosidad, la excitación y la adrenalina esperando a ver qué  podría pasar.

Entonces ví todo más claramente, ellos al no llevar la ropa de baño de la casa de Pedro,  se metieron desnudos y ahí estaban los dos, mi Erika y Pedro, juntos en ese Jacuzzi, sentados y abrazados, la espuma escondía un poco sus desnudeces aunque cada tanto a ella se le asomaban sus turgentes tetas mostrando  sus pezones cafés y sus "puntas" erectas por la mezcla del frio, la tibieza del agua y la excitación de sentirse abrazada por Pedro.

Esperé un poco más, hasta que Erika dijo:

 "¿Qué pasará con Andrés (yo), espéra lo llamo al celular, Pedro, préstame tu celular" (el de Pedro), que no lo soltaba jamás y siempre lo llevaba consigo.

Entonces rápidamente corrí de vuelta al apartamento ya que supuestamente yo estaría  allá indispuesto.

Y contesté mi celular que ya timbraba apareciendo el nombre de Pedro en la pantalla y respondí como si no supiera nada:

"Hola Pedro, que pasó? “

—" Soy yo amor", respondió Ella, "¿Porqué te demoras?"

Le conté que me sentía mal y que  preferia estar recostado en alguna de las camas tomando agua con limón y mas tarde beberia una aromática para mejorar mi malestar estomacal.

— "¿Entonces no vienes amor?" preguntó Ella. 

— “Mmm no creo amor, pero disfruta el agua y el hidromasaje, yo los espero" respondí yo.

Entonces me replicó Ella con una pregunta muy directa:

—"Amor, ¿en serio no vienes?". 

—"No amor, pásala rico, disfruta." respondí yo. 

—Y me dijo  musitando para evitar que Pedro la oyera:

"¿Ese: "disfruta" , que significa? 

Le dije:" Que no voy a ir y te voy a esperar amor, no estoy para meterme al agua ahora, pásala rico, disfruta, confío en ti y en lo que hagas. "

Me contrareplicó:

—" Tú sabes cómo es Pedro y más si se entera de que no vas a venir, es 'mañosito', ¿Qué le digo que tu vienes o no? 

Le dije: 

— "¿Qué te gustaría decirle? Que voy a llegar  en cualquier momento o no que voy a ir?

Y con la voz entrecortada y  jadeante de excitación me respondió:

—"Me gustaría decirle  que tu no vienes, que te acostaste a dormir y que vamos a tener privacidad, El y yo". 

Entonces mi corazón latiendo a mil y mi pene empezandose a parar, respondi:

"¿En serio quieres eso amor?" 

Ella Me dijo:

"El me tiene muchas ganas amor,  sería rico darle un gustico y de paso pegarte  una corneadita... dime: 

—" ¿Me vas a dejar ponerte los cachos  con tu amigo? "

Entonces le respondi:

—"Dale amor, diviértete y pásala rico".

Entonces me respondió:

—"¿En serio me dejas?, ufff qué rico amor, no te atrevas  a venir oyes? quiero estar  sola con El, si vienes te juro que me enojo."

Dejé pasar unos minutos, una media hora para ser exactos, por si Ella o El se asomaban a ver si habían "moros en la costa" y para esperar que tuvieran más licor encima y para  provocarles  más confianza. 

Y así fué, después de  treinta minutos empecé a  acercárme, en esa soledad, en ese frío  del Pasillo que antecede la zona humeda, luego el cuartito del Jacuzzi, e ingrese despacio, ya las luces las tenían más bajas, la música era inaudible y solo se escuchaba el borboteo del agua y  leves respiraciones fuertes. 

Lo que vi me dejó helado:

Pedro estaba desnudo y sentado fuera del Jacuzzi, lucia  fornido, con una prominente barriga y  cubierto de espeso vello,  sus brazos y desde su pecho hasta sus partes intimas, mientras que mi Erika con sus hermosas curvas aún tenía medio cuerpo dentro del agua y de la cintura para arriba estaba afuera, con las tetas al aire, bamboleandose al ritmo frenético de las mamadas que le estaba propinando a Pedro con su boca que subía y bajaba al ritmo de esas deliciosas mamadas que de seguro Pedro sentía ya que blanqueaba los ojos, jadeaba y  se estremecía  de placer  y deseo. 

El, con una mano se apoyaba al borde del Jacuzzi y con la otra le cogia el cabello a  Erika haciéndole  una erótica "cola de caballo" presionandola  más para que las mamadas fueran más profundas en su pene que se perdía entre la boca de mi mujer y su tupida pelambrera negra de sus genitales, pensé para mis adentros: " este tipo jamas se ha rasurado ahí". 

Pero a Erika  parecía no importarle, la veía muy excitada, presa de ganas y placer. 

Pedro a veces mandaba torpemente alguna de sus manos para cachetearle las tetas y jalarle  los pezones a Erika que eroticamente  bailaban y se  bamboleaban  frente a El. 

A veces Pedro le indicaba: 

"¡Ahhh sii culona, ahora chupame las guebas! ". 

Entonces Erika obediente, juiciosa y sin reparos le chupaba con sus delicados labios y lengua las gruesas y oscuras  "bolas"  enmarañadas con  pelos negros de sus testículos.

Las mamadas propinadas ya tenían un  fuerte sonido: slurp sslurp, ssslurp, cada vez más agudos y viscosos, combinandolos con masturbaciones con la mano para ella  descansar un boca la boca, hasta que Pedro poseido por la tremenda ereccion y excitación gritó ahogadamente:

"¡me vengo culona, Me vengo, ahhh! 

Y Erika sin esperar que se derramara se "pegó" a chupar el abundante esperma que provenía de ese  manantial de semen, de tal manera que aunque ella  trataba de contener tal cantidad bebiendolo, algunas gotas se derramaban o ella intencionalmente dejaba derramar para que El contemplara el erotismo de su boca bañada  en semen y otra parte bebida por Ella como un delicioso néctar. 

Luego de beber  los espesos fluidos de Pedro,  se dedicó a lamerle el pene desde la raíz rodeada de  crespos negros hasta el glande para no desperdiciar ni una sola gota. 

Acto seguido, El  se recostó entre el borde de  la pared y el jacuzzi agotado, mientras ella sin misericordia al verlo  agotado y desmadejado, seguía mamándoselo reclamando hasta la última gota de semen y el  sonido sexual de ese "Slurp, Slurp" de aquellas divinas mamadas. 

Diciéndole además:

—Mmmm que ricos tus jugos, amor". 

Yo desde mi rincón solo pensaba:

—¿jugos? ... ¿Amor? 

El  recostó del todo su gran y velludo  cuerpo en un espacio pequeño de treinta centímetros, destilado, agotado y jadeante, como si Erika le hubiese  absorbido sus energías. 

El sólo ripostó: 

"Que rico lo mamas amor,  que delicia mi culona, porque eres mía ¿oíste? Te la voy a quitar  a tu maridito, ¿entiendes? algún día vas a ser solo mia, míaaa culona!" 

(Atención a estas palabras, que en un futuro cobrarían fuerza). 

A lo que ella respondió:

—"Si mi amor, lo que tu digas". 

Y luego ella misma remató diciendo:

-"¿Te gustó lo que te hice mi vida?"

La respuesta de El fue incorporarse y sacarla a ella  toda del agua y ponerla de pie desnuda para empezar a chuparle sus frondosas tetas que se erectaban puntudas por las chupadas de El, mientras ella elevaba sus dos  brazos para facilitarle el camino a que  siguiera chupandole esos lindos pezones. 

El no sabía dónde besar, donde chupar primero, era la diosa deseada, su presea dorada, su gran trofeo soñado, ahora a solas para El. 

La lamia, la lengueteaba todo su cuerpo de arriba abajo, le lamia las axilas a Erika, bajó al ombligo con besos y luego a su vagina que estaba enmarcada en unos incipientes vellos de cinco días que empezaban a crecer y a rodear su pubis y labios vaginales, allí se concentró en lamerle el clitoris a mi Erika,

 abrazándola con fuerza de sus Nalgotas, mientras ella se estremecía de placer:

—"Si Pedro siii, siiii Pedro, amor siiii, siii mi vida, ay siii que ricoooo". 

Luego El subió a su cuello, besaba sus labios, su boca, estaba preso de deseo y locura. 

La abrazaba con sus dos manazas velludas, pero inquieto y titubeante no sabía si era mejor rodearla con sus brazos  en la espalda de ella o en ese par de Nalgotas que El tanto deseaba. 

Yo de nuevo pensé:

"¿Donde quedó el asco que Erika sentía por El, toda esa aversión y repudio que   profesaba por Pedro..."

Rápido salí, excitado al ver esa escena en vivo y en directo, me apuré más cuando ví que ella se incorporó fuera del agua diciendo:

 —"Vámonos  yá que en cualquier momento viene Andrés a buscarme." 

Se empezaron a secar y cuando ella salió primero del Jacuzzi Pedro le mandó con la mano abierta  una tremenda nalgadas que zono ¡TAS! en una de sus  Nalgotas, algo que debió dolerle ya que ella brincó de sorpresa y dolor, mientras  ella exclamó un tenue : 

"Ayy amoooor". 

Luego Pedro agregó :

—"Bffff  que rico es verte veringa, ushhh que delicia verte así, se me volvió a parar". 

Mientras ella replicó:

—"No bebé, ya vámonos, o Andrés viene a buscarme." 

Acto seguido y cuando  yo titubeaba en salir o no, vi que aún desnudos  fuera del Jacuzzi Pedro la tomó de la mano y la sarandeó hacia El y la pegó contra su cuerpo para estamparle  un beso cuerpo a cuerpo y abrazados, los brazos de ella rodeandole el cuello de Pedro y besándose  pletóricos de humedad genital, desnudez y pasión. 

Parecían dos locos enamorados y desenfrenados.

Entonces salí a las carreras, descalzo y muy excitado al apartamento de Pedro.

Al rato llegaron ellos, ella portandose  Normal y El cansado pero con una gran cara de satisfacción, vestido con  una camiseta blanca, sus bermudas y unas chanclas.

Ella me llamaba por toda la casa y luego me  buscó en una de las habitaciones  donde me ubiqué preguntándome si me sentia mejor y tras mi respuesta positiva nos despedimos de Pedro y salimos rumbo a nuestro apartamento.

Pocos minutos después yá en casa (vivímos cerca del condominio de Pedro),  le  pregunté 'si la había pasado rico con Pedro' a lo que me contestó:

—"Esto va a responder  tu pregunta, amor."

Y me estampó un beso con fuerza, con  la boca abierta y con  lengua,  un beso manchoso y salado con el sabor aún del pene del que antes ella decía ser un  asquiento Pedro.

Al ver que yo sentía  repulsión y no  correspondia a su beso de sabor salado,   me dijo:

—"No me huyas y corresponde me el beso amor, siente el sabor de lo que se comió ahora tu mujercita". 

Incluso el aliento fuerte y metálico indicaban lo que antes tuvo en su boca. 

Y acto seguido me volvió a besar con un beso francés frenético y con  ansias de devorar mi boca.

Luego me obligó a recostarme  y empezó a montarse sobre mí y sobre  mi cuerpo, ambos en nuestra cama, su cabeza quedó sobre la mía, los dos besándonos, musitandome:

—"Amor,  no seas esquivo mi cornudito,  siente el sabor de la rica verga de  Pedro. 

Mira nené este es el sabor del semen de tu amigo:

"... Mmm, mmm, (seguía besandome) Mmm,...eso amor así... Sientelo....mmm disfrutalo... ¿te parece rico o no?" 

 Y seguía recorriendo cada rincón de mi boca con su lengua,  ungiendome con los fluidos salados e  íntimos  del hombre que  antes ella despreciaba, entregándome la mezcla viscosa de su saliva y del semen de mi amigo. 

Yo solo le dije con ese mal  Sabor de boca en mi boca:

—"Gas amor, que puerca eres! "

Y soltó una carcajada, agregando:

—"No seas escrupuloso amor, ¿sabes? Pedro la tiene grande, más grande que la tuya y le Sabe rico,  desde hace días se la quería mamar  y hoy tuve la oportunidad  y le devoré esa verga  a tu amigo, lo tengo  loquito por mi, es el poder de nosotras las mujeres, jajaja".

Después agregó:

"¿sabes que me propuso El?"

—"¿Qué amor?" contesté.

—"El  papá de El le dejó en herencia  un par de  Fincas de cultivo y Pedro quiere subir toda la información de gastos contables en excel y un aplicativo para sistematizar toda la  Informacion y quiere contratarme para que yo le haga ese  trabajo, obvio no acepté aunque me pagaría muy  bien con todas las prestaciones, mejor dicho un buen salario, al Menos mejor que el que  me gano en la rapitienda, ¿que te Parece? el muy bobito pensando que trabajaré para El, Jua Jua Jua, que siga soñando."

Me quedé pensando y le dije:

—" Amor y no te gustaría pensarlo un poco más? Lo de la Rapitienda no está dando mucho y la verdad es que  sí te mereces un salario mucho mejor, ya que quieres comprarte Muchas cosas que ahora No puedes, ropa, Maquillaje, zapatos y otros lujos  que  sé  que  quisieras ponerte en ese lindo cuerpo donde  todo te luce..."

Ella me Respondió:

—" Amor, tu sabes que El está  es detrás de mí, no quisiera un jefe todo el día detrás mío y yo  en esa finca con El aguantandolo, una cosa muy diferente es lo que pasó hoy, que solo era un Ratico de diversión. "

Y agregó:

—"Además,  la finca es lejos de aquí, es yendo al municipio  de Jamundí, luego se toma camino a un corregimiento, todo ese recorrido sumaria   más  de una hora y treinta de aquí de Cali. 

¿tu te imaginas ese viaje  diario? Tendría que irme a vivir allá, lo mismo le dije a Pedro y  me  propuso que durante el tiempo que me contrata  me alojara en esa finca dice que es muy cómoda  y que viajara para estar  contigo a  Cali cada ocho días, pero que en  semana trabajara con El ayudándole en la contabilidad y tabulando la información de la cosecha de esas fincas, amor yo ni loca, tu sabes que  soy de ciudad". 

Entonces le respondí:

—"Amor y ¿si fuera por un tiempo? Cuanto dinero dice El Que te Pagaria?" 

—"Amor es que sería solo por un tiempo mientras sistematizamos los datos, la paga mensual me la ofreció por  tres millones de pesos mensuales durante dos o tres  meses" . (unos 800 dólares por mes) 

Entonces le dije: —"amor y que piensas? te tienta ese dinero? Yo podría bandearme aquí en la rapi con los muchachos, ellos me ayudan mucho." 

Y me dijo: —“No se amor,  por un lado si me tienta  ese dinero y  me gusta porque aplico  lo que sé (contabilidad), 

Pero por otro lado dejar de verte a diario y estar contigo solo los fines de semana, no lo sé amor". 

Entonces le dije: 

—"Amor lo que tú decidas para mí está bien, obvio que te extrañaría demasiado y me da miedo que estés  lejos de mi, pero también sé de tus necesidades y carencias y de las cosas que anhelas comprar."

El hecho fue que esa noche nos acostamos a dormir y prometió pensarlo bastante, al otro día  lo consultó  con un par de amigas y después  de hablar con algún familiar y con el mismo Pedro,  me dijo:

—" Amor ya lo decidí y sí voy a tomar ese trabajo temporal, la experiencia me sirve y ese dinero más." 

Una semana después iniciando un lunes se fué de viaje laboral a las cinco y treinta  de la mañana  (5:30 AM) para estar allá en ese corregimiento cercano a Jamundí tipo 7:30 u 8:00 AM donde quedaban las fincas de Pedro e iniciar labores, hablábamos cada dos horas por whatsp y en sus ratos libres nos llamábamos. 

Uff realmente nos extrañabamos mucho, sobre todo los primeros días y sus noches en esa finca, donde ella quedó alojada en una de las habitaciones principales, la cual  tenía  pequeñas comodidades como televisión baño e Internet.

Así le quedaría fácil  iniciar labores en las mañanas en la propia finca. 

Esa finca además, constaba de buenas instalaciones y tenía dos plantas, abajo vivían  el agregado y su esposa  quienes manejaban los oficios varios de la  finca y en la planta superior habían tres  habitaciones: una que hacia las veces de oficina con escritorio y computador y las otras dos, una habitada por Pedro y la otra donde se instaló nuestra amada Erika, mi mujer. 

Yo la llamaba a ella o ella a mi para hacernos  más soportable la distancia y para que  sobrellevara  la  soledad de esa  finca, sintiéndonos más cerca, al menos virtualmente. 

Nos hacíamos video llamadas para que además de  conocer la habitación donde se hospedaba, hicieramos  el amor virtualmente para luego  desquitarnos los fines de semana. 

Las llamadas eran a diario varias veces en el día y en la noche. 

En la mañana al hacer la videollamada y verla vestida (o casi  desvestida) en unos  cacheteros que parecian  tangas con media Nalga al aire   y  una blusita transparente ombliguera  y  sentir que Pedro (su ahora jefe directo), estaba  merodeando por ahí y  el saber que  desayunaban juntos, me hacían dar unos celos terribles, ella se veía como 'un manjar para dioses' y El, como un  'lobo hambriento' al acecho. 

Los imaginaba:

ella caminando en las mañanas en esos cacheteros recién levantada y El mirándola a solas para El y diciéndole obcenidades mientras ella solo reiria provocándolo. 

Aunque  antes de irse a esa finca a trabajar, ella me juró que lo que que había pasado en el cumpleaños de Pedro era cosa del pasado y que jamás se repetiría. 

Los fines de semana Erika venía a estar conmigo  sábado y el Domingo y se madrugaba los lunes para viajar con Pedro quien arrimaba a nuestro apartamento por Ella y seguian rumbo a Jamundí y luego al corregimiento donde estaban las dichosas fincas de El. 

Asi pasaron los primeros quince días, ella laborando lejos. 

Recuerdo un viernes que me llamó y me contó que el sábado osea al otro día, no vendría porque el campero de Pedro estaba averiado y El se quedaría y a ella le  daba miedo viajar en autobus sola, además que el sábado traían pesticidas y recogían cosecha y pagaban el salario de los trabajadores, entonces ese fin de semana se quedaría  allá.

Ocasionalmente pasaba eso, que algún fin de semana no podía venir. 

Una noche después de varias semanas, siendo un viernes la llamé y me dijo que estaba dormida y que no podía hablar duro porque la gente dormía algo que me pareció curioso, entonces me acosté preocupado pensando en eso, ¿será que estaba con alguien? ¿será que Pedro se le metió a la  habitación?, pensé mil cosas. 

Al otro día sábado, estando ya conmigo en Cali, en nuestro apartamento en la cama, la interpelé, le dije que me contara todo, que fuera sincera y me dijo:

—"Amor, esta bien voy a serte sincera, no te vayas a enojar pero quiero contarte algo importante, de nuevo te pido que no te enojes, quiero contarte el porqué ayer no podía hablar duro y el porqué han pasado así un par de noches."

—"Si cuéntame, le respondí yo, porque sí te he notado un poco extraña sobre todo en las noches". 

—"Amor, me dijo ella,  la verdad es que...hace días estoy durmiendo con Pedro" .

                                       CONTINUARÁ. 

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