Hola chicos y chicas, ¡¡¡espero hayan tenido unas deliciosas y fantásticas fiestas de fin de año!!! Quiero compartirles un nuevo delicioso relato que viví en vísperas de este puente de reyes… espero se relajen y lo disfruten como siempre…
Estábamos de paseo en una finca en Carmen de Apicalá (población de clima bastante caliente a unas 3 horas de Bogotá), decidimos recibir el año nuevo con la familia de mi esposo Daniel, nuestro hijo y yo. Pasadas las 12, ya habíamos cenado y estábamos tomando unas copas de vino, cuando me llegó un mensaje de texto a mi celular… era nuestro gran amigo de aventuras Rodrigo… me escribió un mensaje bello de amistad y me dijo que quería que nos viéramos la siguiente semana. Le conté a Dany y de una... mi esposo tenía un montón de cosas para hacer y no pudo ir... entonces nos encontramos para almorzar con Rodri el viernes 7 de enero.
Yo llevaba puesto un jean apretado, tenis blancos y una blusa escotada… bastante sencilla y casual. Nos encontramos con Rodri en un restaurante de comida de mar en una zona muy rica de restaurantes en Bogotá. Almorzamos delicioso… yo comí un arroz a la marinera y Rodri una cazuela de mariscos… nos tomamos 3 cervezas y a eso de las 4 de la tarde salmos del restaurante, ya que Rodri tenía afán… viajaba de puente festivo con su novia y llevaba el tiempo justo para pasar a recogerla. Íbamos por la autopista hacia el norte y quedamos atascados en un tremendo trancón vehicular… algo muy común en la ciudad… Rodri puso música y continuamos conversando en medio del taco…
Mi amigo Rodrigo no paraba de mirarme las tetas y me dijo en tono demasiado sensual… “si no llevara este afán tan tenaz… me salgo de este trancón y te llevo a motelear… estoy que me como ese hermoso par de tetas y ese culo celestial con el que no dejo de soñar…” eso me puso a millón… como lo he narrado en muchos de mis relatos, Rodri es un amigo muy especial con el que hemos tenido sexo muchas veces tanto en trío con mi esposo Daniel, como yo sola con Rodri… enseguida me mojé… de hecho solo ver a Rodrigo me pone muy húmeda allá abajo… ese hombre me vuelve loca en todo el sentido de la palabra… le mandé mi mano a su entrepierna.. empecé a frotar su apretado jean… Rodri me besó... con su lengua acarició la mía y por un largo rato nos besamos nuestros labios… el bulto de su entre pierna empezó a crecer mucho… Rodri bajó con su lengua de mis labios a mi cuello… “mmmm ese olor tuyo Any me enloquece… quiero comerte ya mismo…” me susurró y jadeo, mientras yo le abría la cremallera de su jean… de repente sentimos que tocaban varios carros la bocina… el taco empezaba a avanzar muy despacio…
Mientras el carro avanzaba apenas rodando… el tráfico vehicular estaba terrible… terminé por bajarle los jeans y bóxers a Rodri y quedé son esa hermosa y larga verga en mi mano… la tenía bastante lubricada… que delicia… a pesar de no estar completamente erecto, su pene es gigantesco… lo masturbé por un rato y su herramienta crecía y se hinchaba cada vez más… lo besé en su boca y le dije entre gemidos “no aguanto más… te la voy a chupar ya mismo”… bajé a su entre pierna, bastante incómoda la pose ya que el timón incomodaba, y empecé a lamerle toda su verga… desde abajo hasta la punta del glande… Rodri con una mano tomaba el timón y con la otra me frotaba el culo y vulva por encima de mi jean…. Yo estaba empapada y muy arrecha… empecé a gemir sin parar de chuparle el pene… miré de reojo y vi que un taxista nos estaba observando… el carro de Rodri tiene los vidrios un poco oscuros y ya La Luz del día estaba desapareciendo, sin embargo creo que algo podía ver ese taxista… eso me llenó más de lujuria y excitación y empecé a mover más rápido mi cabeza y boca, mamando esa deliciosa y majestuosa verga… yo estaba a punto de venirme… les recuerdo que yo me vengo demasiado rápido soy precoz jejejeje… de solo mamarle la verga al hombre adecuado y que me ponga a millón, puedo venirme en deliciosos orgasmos… aunque Rodri ya tenía su mano debajo de mi jean y me metía de manera muy incómoda sus dedos entre mi culo y parte de mi vagina… empecé a venirme delicioso… que orgasmo tan rico… en plena calle en pleno taco de carros… que delicia… eso me puso muy arrecha… abrí lo que más pude mis piernas para que Rodri pudiera frotar con la palma de su mano mi raja… en medio del clímax vi al lado de mi ventana estaba un bus urbano y pude ver a una muchacha que estaba observándome… enseguida bajé mi cabeza y empecé a mamarle la verga a Rodri de nuevo tratando lo máximo que se viera en todo su esplendor esa hermosa y gigante verga que me estaba yo comiendo… la muchacha no paraba de mirarnos y yo diría que estaba excitándose y tocándose…
Continuamos en el trancón hasta que Rodri se desvió por una calle… le dije “Rodri, quiero que te vengas bien rico en mi boca, yo ya me vine deli…” y seguí mamándole esa verga hermosa…. De solo sentir su leche me iba a venir de nuevo… sin embargo Rodrigo muy agitado y entre jadeos me dijo “Any, no puedo venirme… perdóname… es que tengo muchas ganas de orinar desde hace rato…” eso me puso más arrecha… DIOS… me puso a millón… nunca creí que la orina me iba a causar ese efecto tan fuerte y salvaje… “pues oríname la cara… quiero que te corras a chorros en mi…” Le dije gimiendo… Rodri no sabía si yo le estaba hablando en serio o en broma… pero no aguantó las ganas de orinar... de verdad estaba que se reventaba… dio un giro brusco a un parking en un sótano, en la calle 93 antes de llegar al parque, era un parqueadero de oficinas y público también… estacionó el carro hacia el fondo del parqueadero y me dijo: “Any no aguanto más…” nos bajamos, yo di la vuelta hacia él y lo empujé hasta la pared… el sótano tenía muy pocos carros estacionados y no se veía nadie, estábamos completamente solos… me arrodillé frente a él, le bajé los pantalones hasta las rodillas y le lamí la cabeza del pene…
Rodrigo miraba alrededor nuestro que no viniera nadie, mientras yo le mamaba su pene… estaba muy jugoso y algo flácido… esos 23 centímetros de tranca me los estaba metiendo en su totalidad casi hasta mi garganta… al muy poco rato y de un momento a otro sentí un chorro hirviendo de orina adentro de mi boca… la dejé escurrir, no la quise beber… de hecho jamás lo había hecho… que locura la mía… Rodri tomó su pene semi erecto con su mano y apuntó el potente chorro muy caliente hacia mi cara… yo me bajé la blusa y sostén para recibir su orina sobre mis tetas también… de nuevo abrí mi boca y dejé que entrara otro chorro sin beberlo… mi cara estaba empapada de su orina, escurría sobre mi cuello, tetas y pecho ese líquido amarillo hirviendo de olor muy intenso… yo escupía los restos de orina en mi boca. Cuando observé que ya no salía más orina de su pene, de nuevo me lo metí a mi boca y empecé a chuparlo, de repente salieron de su verga otros chorros de orina, los cuales me llegaron al fondo de mi garganta… miré a Rodrigo y le sonreí… mientras otro chorro sentí de nuevo en mis tetas… Estaba escurriendo orina de Rodrigo hasta mi ombligo… medio cuerpo mío estaba embadurnado y emparamado… y eso me lleno de una lujuria endemoniada… me terminó de arrechar por completo… de la cintura para arriba yo estaba totalmente meada… y de la cintura para abajo escurrían mis mieles vaginales… ¡¡¡mi cuca estaba hecha fuego!! Y en sentido literal…
Rodrigo terminó de escurrir toda su orina en mí... yo me metí toda su verga en mi boca… es una barbaridad… larguísima y muy gruesa… la tenía muy pega-chenta con restos de orina mezclados con liquido pre-seminal… observé a Rodri y tenía una cara de éxtasis al tope… no lo podía creer… estábamos los dos en un parqueadero público, él con los pantalones abajo y yo arrodillada completamente orinada por él y dándole mucha lengua a toda su enorme tranca… me la metí hasta el fondo de mi garganta casi hasta ahogarme… le chupé y lamí el glande para de nuevo mamarle toda su verga. Rodrigo cabalgó adentro de mi boca por un buen rato, hasta casi desencajarme mi mandíbula… me bombeó con su verga hasta que explotó… me lanzó tres fuertes chorros de leche en mi boca, sacudió su pene y de nuevo eyaculó en mi cara y en mis tetas… su semen era totalmente blanco y muy espeso… yo continúe chupando su verga espumosa hasta llegar a sus bolas depiladas, para luego lamer y chupar su glande, el cual estaba muy hinchado y rojo… succioné hasta su última gota de leche…
Rodri quedó con sus jeans mojados de orina y algo de semen y yo… ni les cuento… quedé echa un completo desastre… chicos y chicas: si se animan a hacer lluvia dorada, que es una experiencia bastante particular… a mí me gustó… les aconsejo que lo hagan en la ducha, no se les vaya a ocurrir hacerlo en otra parte y mucho menos en un parqueadero público… ni se imaginan todo lo que nos tocó hacer a Rodri y a mí para asearnos y recomponernos un poco… y la novia de Rodrigo casi lo echa… jajajaja pobrecito… la recogió una hora más tarde de lo que habían acordado… pero valió la pena… ese hombre llevaba una cara de satisfacción que no podía ocultar. Cuando yo llegué a casa, le conté a mi marido Dani todo lo ocurrido… él se sorprendió mucho, pero le gustó… luego se excitó de una forma sorprendente y bueno… ya luego les contaré que hicimos…
Chicos y chicas, espero les haya gustado mi relato, lo hayan disfrutado y bueno que sigan mis consejos… y recuerden algo no menos importante: “Giman, giman mucho y sin nada de pena, no se cohíban… el placer, genera más y más placer…”
Bye, besos…
Any