Después de hablar con aquella niña misteriosa por algún tiempo, llegó el día en que por fin nos íbamos a conocer.
Todo empezó en un momento de aburrimiento, me llamaste y como de costumbre contesté sin más.
- Hola, ¿cómo estás? Pregunté como de rutina
- Bien gracias, ¿qué haces? Me dices con voz de aburrimiento.
Después de un rato conversando te pregunto si tienes algo planeado y me cuentas qué vas a salir con alguien queriendo salir de tu casa
- oye quiero ir a un mirador y comprar algo de comer, vamos que también quiero salir de acá.
Me aceptas la invitación, por lo que empiezo a arreglarme para salir al lugar acordado.
Al llegar te veo bajando las escalas de aquel lugar con un vestido hermoso, rosado, te vías como toda una mujer impactante, simplemente me dejaste sin palabras, le doy gracias a Dios que mi carro tiene vidrios oscuros y no ves mi reacción.
Te abro la puerta del carro y te saludo de beso.
- Estás hermosa señorita
- ¡Gracias! No es para tanto.
Arrqncamos y vamos a comprar primero por la comida para llevar al mirador y compro unas botellas de licor para acompañarla.
Al llegar al mirador nos pasamos a la silla de atrás para conversar y comer aquella deliciosa comida.
Hablamos de todo, de tu profesión, de nuestros sueños, metas, gustos y cuánta cosa se atravesaba.
Ya es tarde y me dices que tienes sueño, te ofrezco mi hombro para que descanses y intentas dormir.
Pero me dices que estás incómoda por lo que te acomodo en la silla de atrás y me acuesto contigo.
Empieza a llover y hace mucho frío, pero no habíamos llevado ningún saco, ni chaquetas, por lo que te acuestas sobre mí y te abrazo para compartirte de mi calor.
Después de un rato conversando te duermes y no puedo dejar de pensar en lo hermosa que eres, en lo impactante y grandiosa mujer, así que trato de ocultar mi erección.
No me aguanto y empiezo a acariciar tu espalda, tu cintura, tus piernas y por último tu cabello con mis dedos.
Posteriormente empiezo a bajar el cierra de tu hermoso vestido, lentamente, sin querer ser agresivo, hasta llegar al final del mismo y introducir mi mano lentamente para acariciar tu espalda.
Después empiezo a besar tu cuello y a deslizar con mis dedos aquel vestido mientras siento lo cálido de tu piel, por consiguiente empiezo a bajar el vestido mientras sigues acostada en mi, llegando a bajarlo hasta tu cintura, y con mis dos manos empiezo a acariciar los hoyuelos de tu espalda baja.
A subir lentamente por tus costados con la punta de mis dedos, pasado por tu espalda y llegando a el broche de tu sostén.
Lo quito lentamente, delicadamente y intento quitartelo lentamente pero al estar acostada en mi no puedo, por lo que con un movimiento lento te giro y te acuesto sobre la silla de mi carro.
Contempló por un momento tu cuerpo semidesnudo, me acerco a el y con mi boca termino de quitarte el sostén. Empiezo a besarte por el medio de tus pechos, subiendo lentamente con cada beso, besos cálidos, delicados, cada uno como un primer beso. Continuó y llego a tu cuello, tu mentón
Empiezo a besar tus labios, primero en el borde de tu boca, lentamente y te beso apasionadamente.
Continuo y llego a tu cuello, tu mentón
Empiezo a besar tus labios, primero en el borde de tu boca, lentamente y te beso apasionadamente
Aún sigues dormida
Continuo con mis manos bajando tu vestido, lentamente y contemplando tus hermosas caderas
Aquellas delicadas piernas
Tienes unas tangas de encaje rosadas, hermosas, con lo que me gustan
Y me aventuró con mis dedos a tocarte
Pero siento que estás muy húmeda, tus fluidos calientes, dulces, en esos encajes
Se que no estás dormida, que lo estas fingiendo todo este tiempo
Pero te sigo el juego y me quito poco a poco mi ropa
Al estar completamente desnudo
Empiezo a besar tus pies, subiendo lentamente, acariciando te con mis manos mientras voy subiendo por tu hermosa pierna
Besando tu suave piel, pasó por la parte de adentro de tu pierna, por tus muslos sensuales
Al llegar a tus encajes empiezo a besarte más y más cerca de ellos y con mis dientes te los quito lentamente
Sin dejar de notar lo mojada que estás, tanto que se crea un poco de viscosidad al quitarte los
Y vuelvo a donde estaba con mis labios
Empiezo a besarte en tu vagina, lentamente, buscando tu clitoris con mi lengua
Masageandolo en círculos, cada vez más y más rápido
Siento como intentas apretarme con tus piernas, pero te aguantas disimulando que estabas dormida
Por lo que subo la intensidad
Escucho un suspiro y como aruñas la cojineria del asiento
Paro me detengo y empiezo a subir por en medio de tu cuerpo, besando te lentamente de nuevo, pasando por tu ombligo, tu abdomen
Y con mis manos acariciando tus costados, buscando tus sensuales pechos
Apretando los un poco en mis manos mientras te beso en medio de ellos
Sigo por tu cuello, llegó a tu boca
En ese momento me pongo un condón y te beso apacionadamente mientras me sigues el beso
Te penetró lentamente
Siento un suspiro tuyo mientras lo hago, sigo entrando en ti, sintiendo como estás de húmeda, tu calor, tu aroma
Empiezo a mover mi cadera lentamente, a acariciar tus pechos
Mientras que empiezas a gemir lentamente
Abres tus ojos y me miras fijamente
Y sigo subiendo la intensidad, siendo firme y pausado
Me abrazas con tus piernas como no queriéndome dejar escapar
Por lo que subo mas la intensidad y veo como tu hermoso rostro se sonroja
Tomo una de tus manos y entrelazó mis dedos contigo y la subo por encima de tu cabeza mientras te beso
Pero te tomo entre mis brazos y te siento encima de mi
Mirándote fijamente a los ojos sigo penetrado te con firmeza, pero lentamente
Y empiezo a acariciar tu espalda, bajando a tu cintura y llegando a tus nalgas
Aquellas perfectas nalgas
Las apretó entre mis manos y te doy una nalgada con firmeza
Y luego otra, más fuerte que la anterior, más firme
Empiezas a gemir de nuevo y a jugar con tu pelo
A mirarme con deseo
Y empiezas a saltar en mis piernas con más y más fuerza
Te tomo por el pelo y te lo jalo hacia atrás un poco, para dominar te y besarte los pechos
Empezamos a llegar al clímax, tus gemidos son aún más fuertes, más complacientes, más eroticos, quiero comerme cada centímetro de tu cuerpo, besar cada rincón de el
Siento en mis piernas tu humedad
El momento de excitación es tal que nos sentimos solos en este mundo
El momento de excitación es tal que nos sentimos solos en este mundo
Te digo: Mírame fijamente a los ojos. Y sin parar pero bajando un poco la intensidad llegamos al orgasmo juntos.
Siento como tu cuerpo se estremece y te abrazo, te acerco a mi cuerpo y empiezo a besarte mientras tienes la respiración super agitada
Me vengo y siento como tu cuerpo tiembla
Vuelvo y me acuerdo en la silla del carro y traigo tu cuerpo conmigo
Te acuesto en mi de nuevo
Mientras estamos en el agotamiento del momento, en la dulce sensación del clímax y el calor de los cuerpos
Empiezo a acariciar tiernamente tu espalda y a besar tu cuello con dulzura
Nos quedamos así un tiempo y después nos vestimos para bajar de nuevo a la ciudad