Descubrir que el sexo oral nos diera tanta satisfacción fue una bonita experiencia, pues de mi parte, como hombre no puedo negar que me encanta me lo hagan, pero para mi una buena cogida no tiene presentación si no puedo comerme la concha de mi pareja sexual, tanto así, que antes, (me refiero a años atrás), me daba lo mismo si me lo hacían o no, solo con tal de darme el gusto de darle una buena mamada de concha y culo a mi pareja.
Dando continuidad a la historia que llevo, con “SB” desde que me pegue en esas tetas, no me la podía sacar de la cabeza, ese aroma, y lo mas excitante, esos gemidas con cada lamida y cada succión de sus pezones.
Después de ese encuentro en mi auto, mi cacharrito se volvió nuestro punto favorito de encuentro, tanto que lo acondicione para tener a la mano las mejores comodidades para pasarla rico. Ya vinieron los moteles y sitios donde nos cogiera la calentura….
Volvimos a vernos otra vez y muchas más, pero intentare recrear los escenarios y las circunstancias colocándole todo el morbo y la calentura para ponerlos en ese sitio en donde estemos y relatare los mas memorables encuentros para que sus cuerpos experimenten como si ahí estuviesen.
Me preparaba para trabajar después de ese ultimo acercamiento a “SB”, pero quería que ese puto día se pasara volando para tener otra vez la oportunidad de sentir esos rosados pezones en mi boca, y palpar ya descaradamente su concha, que en mi cabeza se imaginaba jugosa y empapada, pues creía (y no me equivoque), que esa mamada de tetas debería tener consecuencias funestas es su parte intima. Como dirían. Lo que en el piso superior se hace, los de abajo lo sienten.
Acorde con ella en volverla a ver, no podía llamarla porque a la oficina no se sabia si interceptaban la llamada (empresa paranoica), y su teléfono personal no podía utilizarlo, hasta su almuerzo. Le hablaba en clave, le decía como me encantaba hacerla gemir, y lo delicioso que era el olor que emanaba su piel.
Le exprese morbosamente que si así era solo mamándole el pezón, como se pondría si le cogiera el clítoris y le diera una buena sección de lengua y chupadas…., a lo que ella no respondió nada, solo me envío un video de su rica vulva, mostrándome como se mojaba y como jugaba con su clítoris.
Quede paralizado, pero de gusto, su vulva parecía como un morro que sobresalía en una planicie, y los labios de color rosa expuestos a las inmensa lubricación que le producía su masturbación, pero….., lo mas excitante era ver el hermoso tamaño de su clítoris, y el capullo que lo protegía, al estar al 100% en plena calentura era memorable, mejor dicho se asomaba solito desafiante y como diciendo: Chúpame, acaríciame…, eso sin contar como se metía uno, dos y hasta tres dedos y salían totalmente mojados y escurriendo..
Le respondí tirándomelas de ingenuo: Esa conchita es la tuya? , pero era con el fin de escuchar de sus propias palabras un SI.
En mi vida, he conocido mucho tipo de mujeres, (clasificación basándome en el grado de humedad de sus vulvas con una buena calentada), pero “SB” para mi rompió los Guinness en lo que a mi respecta en esa clasificación, (aun no he llegado a la parte de sus squirts).
Llegaba ya la tarde y era el momento de nuestro encuentro, ya con tanta predisposición a saber lo que venía, ese encuentro sacaría chispas, pero también pensaba que el que se come todo el dulce de una, le da dolorcito de estómago, y si ella era tan rica y excitante como se mostraba, me la iba a gozar con toda la paciencia del caso.
Hola nena, que linda estas, fue lo que le dije al verla, Sali del vehículo y le abrí la puerta trasera para que se metiese, entro y cerré. Me fui al otro extremo y entra por la otra puerta.
Me consumía la hijueputa calentura, mi verga estaba que volaba, pero me prometí contra todas las fuerzas de voluntad, que ella fuese la que se disfrutara de ese encuentro, e intentar sacar toda la mayor cantidad de orgasmos que pudiese, así yo con uno solo bien sacado me sintiera pleno y satisfecho.
Aunque parezca mentira, todo lo que pensé que nos iba a pasar, no paso como debía, porque le dije que quería con ella hacer todo un “experimento sexual”, donde le aseguraría que intentaría que cada experiencia que vayamos teniendo fuese cada vez mejor, mas profunda, conociéramos mas de los gustos sexuales de cada uno, etc,…, es mas hablamos de las fantasías y de muchísimas otras cosas mas. ¿Que si hubo sexo?,. no hubo penetración, pero me deguste su sabor,…. mientras hablábamos sacaba sus pechos y mi mano se enfrascaba en buscar su vulva, quería sentir esa sensación de calor y humedad.
Que rico me apretaba la verga, y yo como sentía que ella lubricaba. ¡¡Sentí como creció de tamaño ese apéndice y jugaba con el, mas se empapaba...!!
¿Sabes que de solo chuparla me puedo venir?, ella me expreso, Dios que lotería me he sacado, pensé.
¿En serio bb?, Quieres probarla?, la cabeza de mi verga estaba estaba lubricada, de tanta calentura…
Me acomode mas en la esquina del carro para que ella tuviese un buen espacio para mamarla, intentado que su culo (que no he mencionado anteriormente pero tiene un par de nalgas de soñar), me quedase a disposición de mis manos para tocar su concha mojadita y que con mis dedos acariciase su vagina y clítoris.
Su boca capturo la cabeza, y sentí su lengua como degustaba mi líquido seminal antes ya expulsado de la arrechera, ….., pero que rica verga tienes bb!!!, me dijo, me calentó mucho más. Recogí su cabello para que la mamada fuese mas placentera para ella y note que eso le encantaba, el sentir como juegan con su cabello, sus gemidos escapaban, uno tras otro, y su vulva emanaba tanto liquido que chorreaba por sus piernas. Ciertamente lo que dijo fue verídico, mamaba la verga de una forma espectacular, y entre mas se la embutía hasta el fondo, mas su vulva empapaba su pantalón corrido a media pierna..
Su técnica era impresionante, cogía la cabeza y le chupaba apretándola con su lengua contra el paladar, después lamia todo el tronco y con una mano la pajeaba mientras tenia la cabeza dentro de su boca, algo es contarlo y otro es sentirlo. Me dijo: trátame sucio, dime cosas que me enciendan, y…. dio justo en el clavo, el sexo como a mi me encanta, “Perra” fue lo mas humilde que le dije, cada frase sucia era un detonante en su vulva….
Llego su orgasmo, ella temblaba, mi verga sentía como ella relajo su boca , para sentir sus contracciones en mi dedo ya dentro de su vagina. Le dije que si podía venirme en su boca, que yo esta también a punto de correrme, y … fue un “SI” contundente…, Mámame lentamente la cabeza que quiero sentir como te tragas toda mi leche, exprese, a lo que ella asintió con el mayor gusto.
Me descargue muy lenta y deliciosamente en su boca, mi verga emanaba semen al cual ella recibía en su boca sin derramar una gota, saco la cabeza de mi verga y de lamidas la limpio todita expresando: Bebe, que rica leche tu tienes…, yo de mi parte embadurne mis dedos con sus fluidos y los saboree, calientitos, viscosos y dulces, por lo que le dije: y tu no te quedas atrás amor, es un manjar tus venidas nena..
Me encanto esas sensaciones, venirme y hacerla venir así solo mamando verga, ya vendrá mi turno de darle ese sexo oral que yo tanto quería, pero por el tiempo de ese día, de lo que faltaba, era justo darle una excelente atención, que bien merecida la tenía.
Y eso, ¡¡hace parte de otro relato, que pronto será compartido...!!
Esperamos comentarios deliciosos...