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La encerrona en el parqueadero

Hola a todos nuevamente, continuare con la historia que tuve de sexo, abuso, morbo e incesto que tuve en mi uventud con mi tio. No sin antes dar las gracias a todos los mensajes privados que me enviaron, y también al par de hombres que me dejaron plantado, por gente así uno queda arisco; aunuqe no fueron todos los que me escribieron, a la hora de la verdad, de conocernos, y del morbo y eso, no aparecieron. 

Aparte, me gusta mucho el sexo, soy full pasivo, pero si tienes un culo bien paradito y eres discreto, me gustaría penetrarte.

Ahora si, continuo con la historia:

Les recuerdo, mi tío nunca fue el más pinta, ni mucho menos atractivo, su verga tampoco es que fuera gigantesca, de hecho, hoy en día se que él tenía un chimbo pequeño, solo que a mi edad, y como él de sexo anal no sabía, claro; me asustaba, y aún más después de esa desvirgada que me metio, obviamente tuvo que haberme desgarrado un poco, porque estuve varios días con el ano ardiendo; y algunas veces sangraba, no mucho; pero sangraba, yo bien pelado, pues andaba asustadísimo. Claro, en esos días hubo varias reuniones familiares y eso, y él no desperdicio varias oportunidades para tocarme y morbosiarme, amenazándome claro esta, para que me quedara callado, yo me aprovechaba un poco de la situación, y lo manipulaba para que me diera dinero, o la liga, y el era bastante generoso; aparte me llevaba a piscina, a centros comerciales y así, pero cuando estábamos a punto de quedar solos, siempre me le volaba, y lo dejaba; según él, con dolor de novio.

 Pero esa situación acabo pronto, en un parqueadero con sus amigos, en donde conocí a don Ignacio (un anciano que me follo), resulta que un día me vole de la casa con la excusa de ayudar al tio a reparar el auto ahi en el parqueadero donde lo dejaba, que no es que fuera tanto así como un parqueadero, era un sitio feo, en donde guardaban como 5 carros y un par de motos, el dueño del sitio era don Ignacio, el sitio era básicamente una cancha pequeña de micro, adaptada para parqueadero, cubierta, con una pequeña zona en donde don Ignacio habia colocado una maquina de poker, de esas de los casinos, en la cual nadie jugaba; y un par de mesas, y vendía gaseosas y mekato. Un orinal, un baño sanitario cerrado, y el resto del espacio es donde se acomodaban los autos; y bueno, un martes en la tarde, llegue allí con mi tío.

Para acelerar la historia, les cuento que termine encerrado adentro del sanitario, estaba siendo algo bulloso la verdad; mi tío había cerrado el parqueadero para que no me le volara, me había alcanzado a jalar del pelo un poco, pero yo me le había soltado y me había metido al baño, rogándole que me dejara ir; que eso me dolía mucho, y él entre furioso y desesperado, me amenazaba, elogiaba, y prometía mil cosas si salía y le daba otra prueba de amor.

Pasamos así casi media hora; hasta que llego don Ignacio, hablo con mi tio; y pues le explico básicamente lo que cualquiera del sexo anal debe saber: 1- El ano no lubrica, hay que lubricarlo antes, durante, 2- hay que dilatarlo, 3- hay que excitar al pasivo. Mi tio se calmó, yo aún estaba con ganas de volarme, entonces don Ignacio, muy respetuosamente me paso un poco de "coca cola" para que me relajara, en el primer sorbo supe que era trago, claro está; hablamos casi dos horas; entre los tres, hasta que al final quedamos en que yo iba a salir y no iba a pasar nada, que mentira.

Al final, me bajo el miedo el hecho de haberme tomado un par mas de vasos de "coca cola", sali algo mareado, primer error, mi tio se disculpó, dijo que no volvería a pasar algo que yo no quisiera y yo me confié, segundo error, después, me abrió sus brazos, me bese con él y nos abrazamos, tercer error.

Claro, al abrazarme, me apretó y no me soltó; yo ya algo mareado por la "coca cola" esta vez no pude zafarme, -bueno amorcito, yo voy a hacer lo que me contó Ignacio, pero usted, como buena mujer mia que es, debe dejarse dar por ese culo- recuerdo que me dijo, y me llevo al taxi; prácticamente me lanzo al asiento de atrás, y cerro el taxi de una manera que yo no lograba abrirlo. Con miedo vi que fue por vaselina, que se desnudó, y me hacía señas para que yo me desnudará, obviamente no acepte, aunque no sirvió de mucho (ese día estaba en pantaloneta), al final, abrió la puerta trasera y se entro, empujándome con fuerza hacia el fondo, cayo sobre mi, no podía respirar bien, - voltéate, QUE TE VOLTIES-, me grito, yo le hice caso al grito. 

Me bajo la pantaloneta a la brava, yo le pataleaba, pero de poco sirvió; yo pensé "hay, mi culo", pero no; para sorpresa mía, pum; puso su rostro entre mis nalgas y empezó a lamberme el ano, sentí ese primer lengüetazo frio de manera ascendente, me lamio desde la terminación de las bolas hasta la espalda baja, toda la rajada que  hay entre las nalgas, ufffff, deje salir; deje de pelear, el volvió a lamberme, me gusto; me siguió lambiendo de esa manera unos minutos, me gustaba más cuando pasaba la lengua por toda la entrada del ano, -mírame- me ordeno, yo gire la cabeza sobre el hombro, me escupió; y acto seguido me beso; -¿ya estas abierta?- , -no se tío-. Me acaricio, yo ahi ya estaba caliente, me moví un poco y me acomode; el morbo me poseyó en ese instante y el mareo, -pero métamelo, métame el chimbo-, el sonrió; ahí note que me había llenado las nalgas, ano y la propia verga de él de vaselina. 

Mi tío puso su glande en la entrada de mi ano; se acomodó sobre mí; dominándome nuevamente con su peso, yo mordí la silla, y me aferre con fuerza de lo que pude; entonces él empezó a empujar, duro pero lento; me ardía, muchísimo; demasiado, más esta vez no me dolía, solo ardía; y por primera vez sentí ese placer morboso de ser culeado; - Esooooo- susurro mi tio al oido, y empezó a embestirme, era delicioso; si; ojala hubiera sido así la desvirgada; me daba suavecito por la posición en la que estábamos y claro, el sitio, el asiento trasero de su taxi, ha, ha, ha que rico, hay, si; le decía a mi tio, cuando de pronto él me apretó con muchas fuerza, y sentí como un chorro caliente me llenaba el ano, era su leche.

Él problema ese día, fue que mi tio se vino muy rápido, y bueno; resulto ser demasiado rápido siempre. Y yo aún no estaba satisfecho; y él no logro volver a ponerse duro; y tampoco quiso darme alguna chupada hasta hacerme botar; claro, fui al sanitario a limpiarme el semen que salia de mi ano, me vestí y me largué furioso de ahi; tanta rogadera y morbo pa 5 minutos.

Al salir del parqueadero, no a don Ignacio, el estaba adentro, no me habia percatado de su presencia; habia visto la faena, no solo él, había otro tipo ahi, que mas tarde supe se llama Fernando. Me fui de ahi.

Bueno, muchas gracias por su lectura; espero les agrade, como siempre; me gusta mucho el sexo, si te interesa, escribeme con datos de contacto por fa; tal vez nos divirtamos un poco. Que tengan un resto de dia y semana agradable.

Rauldiscreto

Soy hombre homosexual

visitas: 1869
Categoria: Gay
Fecha de Publicación: 2022-06-25 03:12:06
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1 Comentario

interesante infancia con tu tio aunque no fue el mejor de los inicios

2023-04-11 11:54:43