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Festivo, sudor y piel

y si, ahí estaba, merodeando aquella esquina previamente acordada entre los 2, dando pasos para no sentir su ansiedad en el corazón tal vez, mirando para todo lado queriendo encontrarme y claro, yo también desde lejos viendo que posiblemente si era o no era ella. Era a fin de cuentas una cita a “ciegas”, de esas de hoy en día donde uno ya todo lo ha visto, pero no probado.

La saludé desde lejos, me miró de arriba a abajo en una rápida escaneada y devolvió el saludo,-efectivamente habíamos cumplido la cita-, estaba algo nerviosa pero con una sonrisa picarezca, la mirada siempre pivotante por todas partes de mi cuerpo y la mía también recorriéndola desprevenida y desparpajadamente, sin temores, y por el contrario con tentaciones., viendo sus carnes, sus apretadas curvas y su blanca piel con detalle.

ella venía de estar trotando suavemente por su zona de Chapinero, yo de caminar desde el Norte y hacer algo de bici suave, había buen sol, ese sol capitalino que se sabe asomar en los solitarios festivos, la 100 con 15ma fue nuestro punto de partida, había unas previas charlas algo fetichistas sobre el cuerpo del otro. 

Nos sentamos un rato en un paradero del SITP como para cruzar par frases sin sentidos pero rompe hilos, ¿cómo va todo? ¿llegaste hace mucho? ¡te va luciendo este sol! ya con algo mas de confianza, nuestros cuerpos empezaron a interactuar inconscientemente, algo mas pegados caminamos a la par, entre la charla mis manos sentían su piel, sus tensas caderas, sus muslos calientes y firmes, una que otra peca o lunar que invitaba a ser sentido por los labios, 

Llegamos a un parque cerca de la 120, decidimos descansar y estirar, tenía en su piel leves goticas de sudor que invitaban a ser secadas con los dedos, algunas pequeñas bajaban por su escote, y aunque en Bogotá haga sol, el viento helado siempre hace sus ricos estragos, ese top deportivo lo recuerdo, un color azul que dejaba notar esos pezones marcaditos, que en uno que otro movimiento del estiramiento logre rozar, y ella a sabiendas que ese era mi deleite, se dejaba y sonreía, me los acercaba un poco mas y le lograba dar lentas vuelticas a sus areolas entre mis dedos, haciéndolos mas notorios en la tela, Yo estaba en pantaloneta, y previamente habíamos charlado que saldría sin boxers, así que ella también sabía husmearme, primero con los ojos mientras yo abría o subía las piernas y luego con sus manos logrando tocármela y poniéndomela dura. 

En estiramientos de piernas, cadera y glúteos, sentí su entrepierna, tibia, algo húmeda, también por el bordillo dle leggins sentir una pequeña tanga que le ormaba sus nalgas, mi pene estaba ya muy duro y tocó hacer la confiable, ponerlo de para arriba y asomarlo por el borde de la pantaloneta, ella cogiéndome de la cintura mientras lavantaba brazos hacia atrás lo podía tocar entre sus dedos, pasar mi glande por sus labios disimuladamente entre besos fugaces mientras mis manos agarraban su cintura, sus pezones levemente se asomaron, sus areolas eran algo grandecitas y aprovechaba para acomodarse las tetas de tal manera que se asomaran un poco, también logre saborearselas, llegando suavemente a sus rosados pezones erizaditos y sudados, todo con la complicidad de los buenos árboles que dejan perderse de la vista ajena, una “privacidad” que hay por esos muchos escondidos parques. 

Le encantaba saboreármelo de a pocos, hacía una leve succión bajándome el prepucio con su lengua, yo cuando lograba toquetear por dentro su entrepierna me lambía los dedos, le fascinaba mi cara y ami su tibia humedad/frescura, en fin, todo un deportivo día de descanso, un seudo gym donde los 2 teníamos como fetiche el deleite de los sentidos, de aprovechar el ojo, tacto, olor, el gusto y paladar sobre el otro, y no como hoy en día todo nos lo venden, postizo, perfumado y con sabores poco humanos, nos citamos por que nos daba curiosidad probar al otro con su piel natural, ejercitada, con esa salecita y suavidad de unas pocas horas de ejercicio, disfrutábamos nuestros sabores, olores y todo ese ambiente de hormonas y feromonas que da lo carnal y tentador, …una segunda parte espera por ser contada. 

Dnl8

Soy hombre heterosexual

visitas: 833
Categoria: Fetichismo
Fecha de Publicación: 2022-09-09 01:46:44
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