Guía Cereza
Publicado hace 1 año Categoría: Sexo oral 2K Vistas
Compartir en:
Nuestro plan para esa tarde-noche en el sitio swinger era juguetear entre los dos pero con la posibilidad de interactuar con algunas de las personas presentes. Un grupo de 3 mujeres y 5 hombres habían juntado 3 mesas en un costado de la pista de baile y departían animadamente... bailaban, tomaban, reían, cantaban. Mi bella esposa luciendo un lindo baby doll negro y yo con una toalla ceñida, estábamos en un sillón retirado y tomábamos unos tragos mientras charlábamos y veíamos película porno. Una de las chicas de aquel grupo fue a la barra por unas cervezas y al pasar junto a nosotros nos saludó y nos miró coquetamente mientras sonreía. Cuando ella regresaba a su grupo nosotros comentamos que estaba muy agradable, que tenía una bonita figura, me llamó la atención sus senos pequeños y firmes y sus bonitas nalgas redondas. A Tatiana le gustó como se le veía ese conjunto azul sobre su linda piel trigueña.


La mona y yo seguíamos en lo nuestro, nos acariciábamos y besábamos... cuando de repente la misma chica se acercó y nos preguntó si podía acompañarnos un rato. Tatiana y yo nos miramos y casi a dúo dijimos que por supuesto, al tiempo que me paré y acerqué una cómoda silla para ella y la ubiqué junto a nuestro sillón. Mi esposa le ofreció un trago y la chica aceptó con gusto. Después de conocer nuestros nombres y algunas otras cosas básicas, Pamela comentó que nos besábamos de una manera muy bonita, muy tierna, dijo que ella podía ver una pareja enamorada. Ante eso nos reímos un poco y volvimos a besarnos, esta vez Tatiana estiró su mano y acarició mi pene, yo correspondí acariciando sus hermosos senos. Pamela preguntó si nos podía tocar, Tatiana rápidamente contestó que sí, que se sintiera en toda libertad de hacerlo. Entonces ella decididamente extendió sus manos hacia nosotros, con una mano acarició mi pene y con la otra acarició los senos de mi esposa. Qué rico sentir y ver eso!


Tatiana quitó completamente la toalla que yo tenía y arrodillada en el sillón se agachó para mamar mi pene, Pamela se arrodilló frente a mí acercando su boca a mi pene y a la primera pausa de mi esposa fue ella quien mamó mi pene. En ese momento Tatiana me besó en la boca. Ese recuerdo jamás se borrará de mi mente... Pamela recorriendo mi pene y testículos con su lengua mientras mi esposa me besaba tiernamente en la boca. A la distancia, los amigos de nuestra ocasional acompañante le "hacían barra" con aplausos y gritos de "así se hace, bien hecho". En ese momento Pamela metió todo mi pene a su boca y ahora le hizo mamadas más firmes y profundas que me producían mucho placer, mi esposa me miraba a los ojos y decía "se nota que lo estás disfrutando mucho mi amor, qué rico". En general el sexo oral es rico, pero hay unas personas que lo hacen muy bien, que transmiten mucho placer, parecen especialistas en la materia. Sin duda, Pamela es una de ellas.


Luego ella se puso de pie y nos dijo que debía irse, pero que le encantaría volver a vernos. Antes de unirse nuevamente a sus amigos, pasó por la barra donde pidió una servilleta y ahí nos dejó su número de contacto. Esa chica se ha vuelto para nosotros una muy buena acompañante para encuentros swinger, han pasado ya varios años desde ese julio de 2016 y ocasionalmente vamos a motel o a sitio swinger con ella. Ya hay mucha confianza entre los tres de tal manera que se pueden hacer cosas muy íntimas, atrevidas y placenteras que daremos a conocer en otros relatos.


Acostumbramos charlar en casa después de nuestros encuentros con otras personas, particularmente sobre Pamela, hablamos de su impecable higiene, de su suavidad para acariciarnos, de lo valiente para acercarse a nosotros y yo resalté principalmente su excelente habilidad para hacer sexo oral, realmente lo hace delicioso. Días después, Tatiana se puso en contacto con ella y fuimos a motel. Fue muy placentero, aprendimos cosas de sus gustos sexuales y ella de los nuestros, definitivamente Pamela es una excelente cómplice para trios y encuentros swinger en general. Estando ahí en nuestra cita de motel con ella, nos hizo una confesión muy graciosa de la que no teníamos la menor sospecha... Ese primer contacto que tuvimos con ella en sitio swinger se debió a una "penitencia" que sus amigos le pusieron. Ella debía hacerle sexo oral a Tatiana o a mí. Literalmente "nos bajamos de una nube", pues habíamos creído que "algo en nosotros le había llamado poderosamente la atención". Jajajaja no fue así, todo se debió a una penitencia.


--- Fin del relato ---
Publica tu Experiencia

🍒 Pregunta Cereza

¿Por qué crees que más personas jóvenes se identifican hoy como bisexuales? Un reciente estudio revela que 1 de cada 4 jóvenes entre 18 y 24 años se identifica como bisexual.