Guía Cereza
Publicado hace 1 año Categoría: Hetero: General 2K Vistas
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Hoy que estamos en nuestro aniversario 23, he recordado algunas cosas que disfruto a plenitud. En todos estos años mi esposo y yo nos hemos acostumbrado a ciertas formas o ciertas dinámicas en nuestras relaciones sexuales. Me encanta como me consiente, me encanta la ternura y suavidad de sus caricias y besitos en todo mi cuerpo.


Qué rico es para mí recostarme cómodamente en la cama y que Ander se ocupe de cada poro de mi cuerpo con sus manos y boca. Literalmente me derrite con esas "líneas de besitos" que él dibuja sobre mi espalda, sobre mi vientre, sobre mis senos, sobre mis brazos, sobre mis piernas.


Me fascina que me bese apasionadamente en la boca mientras acaricia mis senos o mi vulva o mis nalgas con sus manos. Me encanta que él me ponga en la posición que se le antoje para acceder a mi cuerpo por donde quiera y como le provoque.


Qué sensación sublime es que lama y chupe suavemente mis pezones, él sabe lo sensibles que son, él sabe lo que logra al estimularlos con sus labios y lengua. Mis gemidos le avisan cuando estoy necesitando que su boca me de placer en todos mis huequitos rosaditos.


Cuando parece torturarme al tardarse un poco para lamer mi vulva, abro mis piernas y se la ofrezco coquetamente, algunas veces aún así de "pura maldad" ignora esos labios sedientos de su boca y saliva y regresa a chupar mis pezones pero es ahí cuando tomo firmemente su cabeza con mis dos manos y lo pongo entre mis piernas "obligándolo" a lamer.


Noto que cuando siente el característico olor y sabor de mis juguitos vaginales, ya parece cederme todo el control, ahora todo su cuerpo es para mi, para mis necesidades, para mis caprichos, para mis ocurrencias.


Con el vigor necesario y sin llegar a ser brusco, repentinamente me gira de tal manera que yo quedo boca abajo y de inmediato abre mis nalgas con sus manos y lame mi ano. Ahhh qué bien se siente, qué alivio a mis deseos. Se extiende hasta alcanzar mi vulva con su lengua y regresa a mi ano, puedo sentir que mi ano queda lubricado con la mezcla de la saliva de Ander y mis juguitos y es ahí donde mi esposo pareciera embriagarse... vuelve a abrir mis nalgas y esta vez chupa fuertemente mi ano, haciéndome gemir.


"Monita hermosa, qué nalgas tan bellas, que ano más delicioso tienes", me dice con un tono de voz que curiosamente se parece al que usa cuando está enojado. jajajajaja. Vuelve a ponerme boca arriba y ahora se hace a mi lado para besar mi boca y chupar mis pezones mientras acaricia rítmicamente mi clítoris con sus dedos.


En ese momento me dan muchas ganas de mamar su pene, pero me lo impide y esta vez me pone de "en cuatro", con mi pecho apoyado en la cama y mis nalgas bien levantadas, de nuevo las abre con sus manos y chupa fuertemente mi ano. Ya no parece embriagado, ahora parece enloquecido... dice que no sabe que hacerme de su "desespero", dice que es adicto a mi ano y, sin duda, así me lo parece.


Lo siguiente que siento es su pene duro y caliente llenando mi vagina mientras esparce lubricante sobre mi ano con movimientos circulares de su dedo pulgar. Que rico se siente eso, le pido que empuje más fuertemente su pene y ahora temo que los vecinos se incomoden por el sonido típico del golpeteo de los cuerpos.


Saca su pene de mi vagina y se hace frente a mi, me sujeta con sus manos y me hace tragar su pene mientras mueve sus caderas empujándolo con firmeza en mi boca. Rápidamente regresa atrás de mí y vuelve a abrir mis nalgas para lamer y chupar mi ano. Esta vez lo besa como si fuera una boca y me tumba hacia un lado sin separar su boca, literalmente está devorando mi ano con su boca.


Así recostada de medio lado, Ander me mete un dedo bien lubricado en el ano y lo mueve en forma circular mientras su boca recorre mi vulva entre besos, lamidas y chupadas. Saca el dedo y chupa fuertemente mi ano, luego mete dos dedos bien lubricados y hace sus acostumbrados movimientos circulares... "Qué rica esa colita calientica, mi amor", dice mientras mueve cada vez más profundo sus dos dedos dentro de mi ano.


En un descuido de mi esposo le pongo una de mis piernas sobre su hombro y me acomodo sobre él formando el "69", puedo lamer y mamar su rico pene y acariciar sus testículos mientras él sigue dándome placer con su boca en mi vulva y en mi ano. Aprovecho esa ubicación para enderezarme y quedar sentada sobre su cara, esta vez yo misma con las manos abro mis nalgas para que su lengua entre más profundamente en mi ano. Que rico siento así. Luego muevo mis caderas para deslizar repetidamente mi vulva y ano sobre su boca.


Al verlo en esa posición con su pene bien erecto no resisto las ganas de sentarme sobre él y cabalgarlo con mi vagina... lo miro a los ojos y me doy cuenta que se deleita mirando el movimiento de mis senos, entonces le pido que apoye su espalda en la cabecera de la cama y me inclino para que pueda chupar mis pezones. Estando en esa posición le pido que meta dos dedos bien lubricados en mi ano. Me vuelve loquita de placer sentir su pene en mi vagina y que mueva dos dedos dentro de mi ano. Logramos armonizar mis movimientos sobre su pene y los movimientos de sus dedos en mi ano, que gradualmente aumentan de intensidad hasta provocarme un delicioso orgasmo que hace temblar todo mi cuerpo.
Pasan unos segundos y él se endereza y sin sacar su pene me echa hacia atrás quedando los dos acostados pero ahora yo debajo. Saca su pene de mi vagina y le unta un poco de lubricante para meterlo en mi ano. Qué rica esa presión controlada y progresiva que Ander hace con su glande sobre mi ano hasta que va entrando poco a poco. Sin duda, una de las razones por las cuales disfruto tanto la penetración anal es porque mi esposo es muy cuidadoso, sabe esperar, sabe preparar mi ano, sabe relajarlo, sabe dilatarlo, sabe consentirlo bien rico con su boca para luego devorarlo con su pene.
Cuando ya el glande entra en mi ano, me dice lo rico que siente...amo ese gesto, esa mirada, definitivamente refleja su "adicción". Pensaría que va a empujar para meter más su pene, pero lo saca y vuelve a chupar mi ano fuertemente... puedo sentir el roce de su lengua muy dentro de mi ano y me estremezco de placer. Rápidamente vuelve a meter su pene en mi ano y esta vez entra más fácil y rápidamente, aunque no por completo. Con una mano toma la parte del pene que aún está fuera de mi cuerpo para ayudarse a hacer esos ricos y muy útiles movimientos que llamamos "circulitos de placer".
Saca su pene, le unta un poco más de lubricante y esta vez entra completico en mi ano. Cómo disfruto sentirlo! Lo mueve lentamente para "conquistar" todo ese espacio interior. Me pregunta si estoy cómoda y le confirmo que ya puede moverlo a su antojo. En ese momento lo empuja fuertemente hasta el fondo haciéndome casi gritar de placer. Saca su pene de mi ano y lo mete en mi vagina, lo empuja fuertemente, lo saca de mi vagina y lo mete en mi ano de nuevo, lo saca de mi ano y lo trae a mi boca, después de mamarlo vuelve a penetrarme vaginal y analmente... me enloquece esa rica combinación. Por un buen tiempo deja su pene en mi ano moviéndolo vigorosamente hasta el fondo mientras que con sus dedos acaricia mi clítoris. Wowww qué sensación! Qué delicia! "No te detengas, por favor", le digo a veces como ordenando y otras veces como suplicando. Él intensifica sus movimientos y ese roce de su pene dentro de mi colita me provoca otro delicioso orgasmo que generalmente acompaño con fuertes gemidos y a veces gritos de placer.
Nos hemos acostumbrado a que Ander espera a eyacular cuando yo se lo pida, así que él sabe contenerse y darme su lechita justo cuando yo se la pido. De hecho, me dice que cuando se la pido eso le provoca más ganas de eyacular. Estando yo boca arriba y él sobre mí, lo miro a los ojos y le pido que me de esa lechita que yo misma "fabriqué" con mis ricuras, se lo digo en tono de súplica, expresándole cuánto deseo su semen... esta parte es una especie de premio para mí, me fascina verlo y oírlo eyacular.
Dónde quieres la lechita? me pregunta cuando ya está que no aguanta más. Yo sé que a él le encanta chorrearme, particularmente chorrearme la cara. Pero algunas veces le pido que reparta su semen entre mi ano y mi vagina. Entonces le digo que empuje fuertemente su pene en mi vagina como si la fuera a llenar de lechita... es para que se despida temporalmente "de ella". El empuja enloquecido su pene en mi vagina, eso me hace gemir de placer y es cuando le pido que meta su pene en mi ano y lo empuje rápida y fuertemente hasta el fondo sin parar... hasta que su semen salga expulsado pero que recuerde echar también una parte en mi vagina. Sé que no es algo tan fácil pues debe hacer una pausa en medio de sus convulsiones en plena expulsión del semen, pero me da mucha satisfacción el hecho que pueda complacerme ese caprichito. Qué delicioso siento esos chorritos de semen caliente golpeando en las paredes internas de mi colita y de mi vagina, esto acompañado de esos "rugidos" que emite enloquecido de placer me dejan completamente satisfecha.
Amo esa dedicación de Ander por consentirme, por complacerme. Por eso cuando compartimos sexualmente con otras personas procuramos que se ajusten a ciertas pautas básicas como son la impecable higiene, el trato delicado y tierno y que sean muy complacientes para que todos podamos disfrutar mucho placer.
--- Fin del relato ---
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🍒 Pregunta Cereza

¿Por qué crees que más personas jóvenes se identifican hoy como bisexuales? Un reciente estudio revela que 1 de cada 4 jóvenes entre 18 y 24 años se identifica como bisexual.


  • ¡Deliciosa forma de hacer sentir con la lectura, tanta energía qué uno disfrutaría de expresar también! ¡Súper excitante y delicioso recorrer y hacer sentir a una mujer tanta intensidad! ¡Es espectacular imaginar, hacer cada recorrido y acción para disfrutar de cada gemido tuyo Tatys!

  • tatys leyendo pausadamente este relato y llevandolo a la imaginacion no pude contener la calentura, pues lo cuentas con lujo de detalles, todas tus locuras y lo que te gusta hacer y que te hagan, yo me visualize uds dos en esa escena y yo sentado mirandolos y sobre a todo a ti gimiendo y gritando de placer, no me aguantaria y me acercaria para besarte apasionadamente y chuparte los senos muy lentamente y que cuando tu esposo acabe dejando su leche encima tuyo, yo empezar a lamerte asi correadita de esa leche para volvernos a besar y luego penetrarte tambien con calma pero a fondo para que sientas todo el placer que dos hombres te puedan ofrecer hasta derramar toda mi leche en donde tu me lo pidas pues en ese mmomento eres la reina a la que hay que consentir y complacer, muy rico tu relato.
  • Muy bueno...
  • Wowwww, sin palabras.

  • Que delicioso aniversario, es agradable leer la buena química que tienen como pareja y la buena higiene que practican.

  • Que delicia de relato....me goce cada parrafo, pude imaginar cada acción, cada movimiento, cada momento de placer. Obviamente escribo esto con mi pene erecto y con total admiracion de uds como pareja.


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