Después de lo que ocurrió Andres me dejo allí en su sala unos minutos y luego yo misma me fui al baño me asee un poco y sin despedirme salí de su casa, supremamente confundida pero en un estado de satisfacción como jamás me había ocurrido; Olvide que Javier había quedado de recogerme y termine llegando a mi casa, al entrar no había nadie así que me quite mi ropa dejándola en la lavadora pues olía muchísimo a sexo y me entré a bañar intentando quitarme algo de lo sucia que me sentía, no se cuanto tiempo dure debajo de la ducha pensando en como me deje usar pero también como había disfrutado cada cosa que me hizo, inclusive disfrutando el dolor en mi trasero por haber sido sonorizada por primera vez; Al salir del baño me coloque mi piyama y revise mi celular percatándome que tenía un mensaje de Javier diciendo que se había embolatado y no podía pasar por mi que mas tarde llegaba a casa.

No supe a que hora llego mi pareja, a la mañana siguiente me desperté arregle y me fui a trabajar, durante esa mañana no hable ni vi a Andres afortunadamente estamos en departamentos o áreas diferentes así que sino hablamos o nos ponemos cita para almorzar no lo veo, todo el tiempo pensaba como permití que me usara y me molestaba haberlo dejado, pero también pensaba que yo fui la que se lo mencione y me había puesto en sus manos no solo al contarle mi fantasía sino que había disfrutado, había disfrutado como me cogió del pelo y me hizo arrodillar a mamarsela, como se vino sin avisarme en mi boca terminando con untarme sus restos por mi cara como se lo confesé, en mi puesto mis tangas estaban lavadas fue tanta mi excitación que tuve que ir al baño y por primera vez no pude aguantarme las ganas y me tuve que masturbar pero antes de disfrutar de mi orgasmo puse mi celular sostenido de la puerta del baño y me seguí marturbando mientras grave mi primera masturbada con gemidos y todo hasta que sentí que alguien ingreso y tuve que taparme la boca porque justo en ese momento estaba conquistando mi orgasmo, pero esa sensación de ser descubierta hizo que mi orgasmo se prolongara al punto que moje la pared del baño con mi corrida, todo esto era muy nuevo para mi con Javier nunca me paso o con otros novios, era como si un botón se hubiera encendido en mi y ahora mi placer llegaba con orgasmos como si tuviera acumulados todos esos que me debían mis relaciones anteriores y ahora necesitaba descargarlos.

Espere a recuperarme y que salieran del baño, creo que era la niña del sena la que había ingresado y al parecer no alcanzó a oírme gemir, mire lo que grabe disfrutando de ver como cuando llegue mi corrida había mojado la pantalla de mi celular mientras yo me tapaba la boca y salí de allí sin levantar sospechas que lo que paso, seguí mi jornada con la cabeza entono a lo que me estaba pasando, con ganas de escribirle a Andres pero la vergüenza no me dejaba y también me daba miedo que si lo llamaba seria como decirle que me moría por volver a estar con él; Esa noche solo nos saludamos con mi esposo y como si no pasara nada ninguno pregunto como habían sido nuestros días lo que más me desilusionó de su parte aunque también agradecí porque no sabría que responder.

En la mañana mi esposo ya no estaba en la cama así que me levante, bañe y arregle como cualquier otro día pero al bajar a desayunar mi sorpresa fue que mi esposo me esperaba con un super desayuno pues ese día era mi cumpleaños, olvide por todo que estaba pensando, me beso muy amoroso y desayunamos juntos me entrego un reglo envuelto en una caja grande pidiéndome que lo destapara encontrándome con un vestido de baño que en alguna oportunidad le mostré que me había gustado y sin decirme mayor cosa solo lo miro diciendo es lindo pero muy revelador para ti, por lo que nunca me imagine que se animara a comprármelo, debajo del vestido había unos tiquetes de avión con destino a Santa Marta para los próximos días coincidiendo con mis vacaciones y las de él, lo abrace e alegría pues hace mucho no íbamos de viaje y menos juntos, lo que no entendía era que ¿si el vestido de baño le parecía muy revelador para mí porque lo había comprado?, salimos del apto juntos yo para mi oficina y el para su trabajo hablando todo el tiempo de lo genial que serian esos días en la playa para ambos.

Al llegar a mi trabajo Javier me dejo nos dimos un beso y el siguió su camino, cuando subí a mi oficina me tenían decorado el puesto y con unos regalos recibiéndome con abrazos mis compañeros de área, eso hizo mi día muy especial la verdad, era la primera vez en mucho tiempo que alguien me hacia sentí importante, primero mi esposo y luego mis compañeros, después del feliz cumpleaños y los abrazos cada uno se fue a su puesto menos la niña del sena Alicia que se acerco y me regalo una bolsita de dulces y tiernamente me regaló una empanada con gaseosa diciéndome “no me alcanzó para mas con lo de mi mesada pero quería regalarte algo”, para mi ese detalle tuvo más relevancia que el regalo que me dieron entre todos los de la oficina el que aun no destapaba, la abrace en forma de agradecimiento por su gesto pues no éramos amigas y si bien por mi trabajo yo le entregaba las carpetas para que ella las archivara o le preguntaba con iban sus tareas, no era mi subalterna y muy de vez en cuando nos preguntábamos sobre cosas de la oficina, sin embargo me quedo sonando que me había dicho que lo compró con lo de su merienda, en ese momento llego nuestro jefe y al ver que todo estaba decorado se acerco a mi puesto y me felicito por mi cumpleaños claramente no sabia que estaba de cumple pero tenía que pedirme unos papeles asi que le tocó felicitarme y preguntármelos lo que hizo que la Alicia le dijera “ya se los llevo don Arturo” así se llamaba el jefe, por lo que los busque en mi escritorio y se los entregue a Alicia.

A la hora de estar trabajando el mensajero de la oficina me llego con un regalo deseándome feliz cumpleaños por lo que le sonreí y agradecí y el riéndose me agradeció pero que no era él quien me lo daba sino dijo que el señor Andres del otra área me lo enviaba y que por favor aceptara ir a almorzar con él para celebrar mi cumpleaños, yo me sonroje toda y no podía negarme porque si lo hacia sospecharían que algo estaba pasando máxime si todos sabían que éramos amigos desde la universidad, así que agradecí nuevamente y acepte que nos viéramos en la recepción, puse el regalaron con los otros dos que tenía en mi mesa y seguí mis tareas no sin antes escribirle un mensaje agradeciendo el detalle a Andres y leyendo su respuesta diciéndome que no lo destapara hasta que el me lo dijera lo que me sorprendió y no le quise responder preguntándole porque; Cuando llegó la hora de almorzar vi que Alicia se fue para la cocina y recordé sus palabras al darme mi empanada, al entrar la vi con otra empanada y un jugo por lo que le pregunte “ ¿Alicia y tu almuerzo?” ella con cara de pena me dijo “Es este laura” no lo pensé por lo que la tome de la mano y le dije “yo te invito hoy” a ella le dio pena y entre murmullos de que le daba pena y otras cosas la verdad es que nunca ni soltó mi mano ni me freno mientras la sacaba halando de la oficina, al llegar a la recepcion ahí estaba Andres quien primero se alegro de verme y luego se sorprendió al ver que Alicia venia conmigo sin entender que estaba pasando, yo solté una sonrisa picara mientras lo salude de un beso en la mejilla, la verdad es que sin pensarlo Alicia me estaba salvando el almuerzo porque no abría podido sostener una conversación con Andres y quizás abríamos terminado yendo a algún otro lado envés de almorzar pues solo viéndolo mi vagina se humedeció recordando lo que me hizo en su casa, inmediatamente le presenté a Alicia “Andres mira ella es Alicia hoy yo la invite a ella antes de que tu me invitaras así que no podía decirle que ya no porque ella no trajo su almuerzo por mi invitación” le guiñe un ojo a Alicia que la hizo sonrojar pues sabia que eso no era verdad, esperaba que no fuera lo impertinente para preguntarme porque había hecho eso, (Alicia es una niñada de unos 18 años, aprendiz del sena mucho más alta que yo delgada de cabello negro largo hasta la mitad de la espalda, piel blanca cuerpo menudito y tiernita, no llevaba sino 4 meses en la oficina y se que en la oficina hay mas de uno echándole los perros pero no se si alguno sale con ella o si tiene novio).

Andres rio diciendo que no había problema que con gusto almorzábamos los tres salimos y sin saber rumbo entramos a un restaurante a unas cuadras de la oficina con las mesas en el primer y segundo piso, la nuestra estaba en el segundo pues al parecer ya estaba reservada por Andres, pedimos una entrada de camarones apanados y el plato fuerte le tuve que ayudar a Alicia que la pobre miro esa carta sin saber que decir o hacer, pues terminamos pidiendo lo mismo para que no se afanara cosa que le gusto por su expresión; Pero pasó lo que obviamente debía pasar y a Io que yo le hui hasta ese momento, Andres comenzó con sus preguntas pero el muy zorro las estaba haciendo camufladas para que Alicia no entendiera de una lo que estaba pasando, “como te termino de ir el domingo después de que te fuiste de mi casa?” “¿te gusto lo que te comiste o prepare para ti? ¿porque ni me di cuenta cuando saliste?, ¿así de prendida te fuiste?” inmediatamente me puse muy roja con sus preguntas de doble sentido que claro solo yo entendía y Alicia lo miraba como hilando su historia en su cabeza, como pensando que había pasado entre nosotros o porque yo almorcé y salí borracha de su casa, yo primero me puse muy roja y luego tuve una pequeña crisis de risa nerviosa la verdad a veces me pasa cuando mi ansiedad hace lo suyo e intente responder de la misma manera a sus preguntas, “¡como eres de pesado sabes!, si, salí cuando me sentí muy llena de tu postre de natas ¡sabes! y me costó un poco caminar así que tuve que coger un carro entre la pesadez y mi entonación-, ¡pero claro que todo fue muy rico aun que no me lo esperaba! no me arrepiento de no haber cancelado cuando mi esposo dijo que no me podía acompañar y luego al llegar tu esposa tampoco nos pudo acompañar, eso hizo que lo que me ofreciste fuera mucho y nos comiéramos todo hasta la ultima gota de puros golosos, y me dio pena porque jamás me comporto así, pero es algo que hoy estoy segura que valió la pena tal vez quiera repetir para ver que otro menú arias para mi”.

Estoy segura que Andres nunca se imagino que yo le respondiera de la misma forma y peor, el solo se rio y también por primera vez se coloreo “¡me encanta que seas tan golosa como yo! pero te deje muy claro que tenías que mostrarme que te gustaría volverlo a hacer a tu manera” miró a Alicia y dijo “almorzar o cenar claro” estaba muy colorada pero también me tenía nerviosa y con risa nerviosa no lo podía controlar mientras Alicia nos miraba sonriendo y de una manera muy inocente dijo “¡como hablan, ya me dio ganas de que me inviten si no es grosero de mi parte” ambos nos reímos por su comentario y al vernos reír se puso muy apenada “es que me gustan las cosas ricas y se escucha que fue muy rico, perdón por meterme en lo que no me importa” Andres aun riendo le respondió “cuando quieras estas invitada hay para quien quiera o como dirían ¿donde comen dos porque no tres?” en ese momento mi risa se paro porque claramente el aprovechándose de su inocencia la estaba invitando a salir los tres claramente no seria solo a comer, eso me asusto primero porque no había pensado nunca en algo así y dos porque Alicia trabajaba en mi área y si se llegaba a dar cuenta que no era a comer lo que le propuso Andres podía salirse de control y tener problemas en la oficina, “Alicia la verdad a Andres lo conozco desde la universidad somos muy buenos amigos, y lo quiero mucho pero claramente mi amigo es muy coqueto a pesar de ser casado así que no le aceptes invitaciones al sinverguenza éste, no me gustaría que se pasara contigo y fuera un problema en la oficina”, Andres me miro que me quería comer pero no como yo quería de la rabia, era claro que se había molestado por haber sido tan directa al contarle a Alicia que debía tener cuidado.

Continuamos almorzando con la conversación menos subida de tono por parte de Andres por un rato mas bien hablábamos contándonos nuestras cosas lo que habíamos hecho, como había pasado ese día inclusive le conté que Alicia me había regalado una empanada con gaseosa y una bolsita de dulces y ahí Andres me hizo una pregunta que había pasado por alto, “¿tu ya destapaste mi regalo?” lo mire extrañada pues claramente me mando decir que solo cuando el autorizara lo que me hacia pensar que tenia algo que ver con cosas sexuales no se, tal vez ropa sensual “tu me dijiste que solo tu autorizabas cuando destaparlo” el se volvió a reír “así es que me gusta bien obedientes y sumisas jaja” me volví a sonrojar por su comentario pues él sabia que eso era lo que me había excitado el día de nuestra conversación que me dominara y me hubiera cumplido mi fantasía de usarme como ni mi pareja lo había hecho, lo mire con morbo por primera vez en nuestra comida y le dije “ espero me encante tanto como el que me dio mi esposo” Andres alzo una ceja “el mío claramente te va gustar, pero y ¿que te regalo tu esposo?” emocionada le conteste “¡imagínate que me regalo un vestido de baño que yo quería y un viaje a Santa Marta para la semana de mis vacaciones!”, “¡oye que genial que se animara por lo menos a salir a una playa los dos! eso ayudara muchos sabes,” lo mire pensativa “ojalá pero como lo conozco no querrá salir a divertirnos o malo malo llevara trabajo remoto como siempre”, se quedo callado unos minutos y luego me dijo “si quieres puedo ayudarte para que no sea así como piensas” lo mire extrañada pues no entendía como él podría ayudarme parque mi esposo no lleve trabajo a nuestro viaje, “no te preocupes déjame y cuando tenga cuadrado te cuento mi idea, pero para eso debes confirmarme lo que te dije el domingo, una nueva tarea deberas decir si aceptas mi regalo que yo te digo cuando abrirlo” lo mire intrigada y confundida así como estaba la pobre Alicia con nosotros y esta conversación.

Terminamos y necesitaba ir al baño así que me disculpe y me dirigí un momento al baño pues no podría aguantar hasta la oficina, al regresar Andres y Alicia reían pero notaba a Alicia como nerviosa ella si me vio cuando regresaba pues el baño quedaba de espaldas a Andres y por su forma de mirar Andres volteó a ver que yo venia “¿todo esta bien?” les pregunte como intentando saber de que hablaban o que paso mientras no estuve “estábamos riéndonos de tus celos hacia mí por no dejarme acosar a Alicia que es bien bonita” decía Andres con aires de prepotente “¡nos mijito…, aterrice que lo que me gusta de usted es muy diferente a que me guste usted!, -y si porque es muy bonita mi amiga es que prefiero advertirle sobre tus habilidades para embaucar a mujeres inocentes como ella, suficiente tiene con los chulos de la oficina” los tres nos reímos y salimos del lugar pues ya debíamos regresar a la oficina, al entrar en la recepción Andres me dijo delante de Alicia “ya puedes abrir tu regalo, pero solo si Alicia también lo ve” me quede mustia por su comentario y despidiéndose de un beso muy cerca a mi boca procedió a hacer lo mismo con Alicia lo que ella correspondió con un beso en su mejilla.

Nos subimos las dos al ascensor y en él solas Alicia me pregunto “tu amigo es muy querido me cayo muy bien, sé que no debería preguntar pero…, ¿tienes algo más que amistad verdad?” me puse muy colorada con su pregunta y no supe que responder aunque mi expresión y reacción lo dijeron todo, Alicia miró al frente y antes de abrirse la puerta me dijo “no me respondas tranquila no es mi problema…, ¡yo también abría caído con semejante parla y sus propuestas” la mire de lado asombrada por su confesión, “al principio no entendía y pensé que hablaban de comida, hasta que tu aclaraste que tuviera cuidado ahí me di cuenta que lo que él insinuó fue un trio, - ¡soy chiquita no ingenua!” me dio vergüenza pues claramente dedujo toda nuestra conversación pero antes de disculparme me dijo, “si me lo pidieras tu…, ¡aceptaría sabes!, vamos a ver tu regalo” cerro nuestra conversación dejándome allí muy fría con su respuesta, tuve que reaccionar o el ascensor se cerraría así que fuimos directamente a mi escritorio saludando para que vieran que ya habíamos llegado, cogí el regalo pero cuando lo íbamos a destapar, digo íbamos porque ambas lo cogimos, mire a Alicia diciéndole “mejor aquí no” ella entendió mi duda y sugirió que en la cocina pues ya no entraría nadie así que nos fuimos a la cocina, comenzamos a destaparlo las dos, era chistoso porque estaba más animada ella que yo, yo tenia miedo de pensar que me encontraría.

En verdad fue una sorpresa había un vestido de falda estilo bolero negra, una blusa muy transparente color perlada, una chaqueta semi abrigo color beis y ropa interior negra de encaje, el panty hilo y el brasier estilo corcel de encaje, debajo de toda la ropa había una caja con un objeto en forma de banano pequeño rosado con antena y se leía que era un vibrador remoto mediante una aplicación, me puse muy roja porque la que lo saco fue Alicia y ella sí sabia lo que era y yo la verdad jamás lo había visto, lo que me avergonzó más porque Alicia dijo como se usaba, pero que nunca lo había visto en persona pues que son muy caros “Andres te esta proponiendo un juego muy fuerte” la mire muy nerviosa, guarde todo lo que me regalo y nos fuimos cada una a trabajar sin decir nada más; después de pensarlo un buen rato intrigada y asustada a la vez le respondí por wassap enviándole el video de como me masturbe esa semana por su culpa sin frases ni mensaje, solo el video.

Dure toda la tarde muy excitada pensando en lo que estaba haciendo y como mi relación con Javier se iba a afectar si seguía avanzando y aceptando lo que Andres me proponía, en mi defensa diré que con Javier llevábamos viviendo cerca de dos años y uno como novios, el es profesional al igual que yo, habíamos comenzado a salir y después de cuatro meses saliendo una noche donde tomamos más de la cuenta se animo a manosearme de tal forma que me excite, yo tome la iniciativa de irnos para un motel y si bien lo hicimos y fue muy delicioso siempre sentí que hacíamos el mismo ritual las mismas poses sin mayor durabilidad, y cuando yo me animaba a pedirle algo diferente me miraba como si fuera una vagabunda o alguien inmoral y eso asía que se me quitaran las ganas de proponerle algo más, pensé que íbamos a terminar cuando me invito a quedarme en su apto y entendí que era su forma de amarme, así que durante esos dos años nunca pensé necesitar algo mas a pesarte que mi mente y cuerpo siempre me hacia sentir insatisfecha, y luego paso lo que leyeron en mi historia anterior lo que hizo que mi mente y mi cuerpo me mostraran, eso que siempre desee y que pensé que era solo de mujeres sucias, ahora me gusta ser la mujer sucia que disfruta de su cuerpo.

Cuando llegue a mi casa Javier no había llegado así que aproveche para medirme la ropa que me regaló Andres y me sorprendió ver que me quedaba muy bien y decidí debía ponérmelo con unas botas de caña alta para que hicieran juego, me mire al espejo y me sentía muy sensual e insinuante, la verdad nunca habría pensado salir a la calle vestida de ésta forma, sobre todo porque mis pezones se traslucían entre el corpiño y la blusa cualquiera que me mirara de frente los vería, estando así cogí mi celular y me tome un par de fotos algunas con el abrigo otras con la sola camisa y también con solo el corpiño y en todas las formas me sentía muy sensual, saque el vibrador de su caja y me puse a leer las instrucciones que traía pues decía que debía bajar una aplicación al celular y luego para sincronizarlo debía prenderlo del botón que traía, al tacto se sentía muy suave, funcionaba con bluetooth y se sincronizo muy rápido, indicaba que debía meter en mi vagina la parte que parecía un banano pequeño dejando por fuera la parte que parecía una antena con la cabecita hacia arriba, la verdad la curiosidad me pudo mucho mas así que me senté en la cama, lo chupe un poco para lubricarlo y con cuidado lo introduje, la verdad no sentía nada me parecía que debía estar defectuoso pues no pasaba nada, volví a revisar las instrucciones y me di cuenta que traía varias modalidades una era con música así que ingrese y escogí una de las canciones que estaban instaladas; Me sorprendió un grito que salió de mi garganta al comenzar a vibrar dentro de mi vagina lo que me tomó de tal sorpresa que no podía contener mis gemidos, lo que me hizo soltar el celular y rebotar debajo de la cama, intente agacharme pero esa maldita canción hacia que el aparato unas veces vibrara más intensamente y otras me arrancara gemidos, estaba muy cerca de un orgasmo cuando escuche que la puerta de entrada sonó con la voz de Javier saludando desde la entrada.

Debí taparme la boca así arrodillada en el piso cuando escuche a Javier en la puerta de nuestra habitación con su “hola mi amor que haces ahí en el piso” muy agitada con mi vagina a punto e explotar en un orgasmo solo pude articular “..¡ mm…, mi celu se cayó mientras me dio un cólico!” lo que hizo que Javier se agachara y lo alcanzara ayudándome a parar camino al baño, cogí ese maldito celular cerrando la puerta para ponerme la toalla en la boca mientras el orgasmos más fuerte de toda mi vida llego mojando las botas y mi ropa interior, pero la música no paraba, seguía dándome vibraciones hasta que por fin pude cerrar la aplicación pudiendo respirar agitada y convulsiva, no se cuanto tiempo transcurrió hasta que logre calmar mis piernas y sacarme esa mierda que casi me hace perder el conocimiento, con mi orgullo y exaltación emocional debí salir y ver como mi esposo me preguntaba si me sentía bien ante su mirada incrédula con mi vestimenta de vagabunda, mientras esperaba alguna frase de mi boca no dejaba de mirarme como perro en celo y lo hacia recorrerme una y otra vez con sus ojos.

Iba intentar explicarle con una mentira como “que me los compre por mi cumpleaños o cualquier cosa que medianamente pudiera explicar porque estaba así vestida”, cuando por primera vez, ¡mi esposo el hombre que nunca mostraba alguna emoción de deseo hacía mi!, me haló de mi brazo muy fuerte tirándome sobre la cama levantando mis piernas y sacándome mis tangas mojadas por mi orgasmo anterior y comenzó a meterme sus dedos como nunca lo hizo en los tres años juntos, ¡éste hombre parecía un animal como me metía sus dedos sin piedad una y otra vez!, quizás por unos cinco o diez minutos mientras se quitó su pantalón y luego metiéndome su verga como si embistiera a una puta en un burdel, yo ya gemía como la puta en la que me sentían en ese momento, con mis piernas levantadas envueltas con las botas y la falda de bolero que se había enrollado en mi cintura, cuando mi orgasmo llegaba ante mi grito de “¡quiero más! ¡quiero más!” sentí un bofetón tan fuerte de mi esposo que antes de gritarle !idiota¡ por haberme pegado saco su verga y me mancho toda la ropa con su corrida como jamás lo había hecho; Mi orgasmo fue un grito de placer al hombre que acababa de abusar de mi y me había encantado, sacudió las ultimas gotas sobre mi vestido y salió de la habitación sin decir o pronunciar algo que me hiciera entender lo que acababa de pasar, yo solo me quite mi ropa nueva y manchada de semen con la sensación de llanto en mis œojos y la satisfacción entre mis piernas.