Déjame Dominarte, permíteme ser tu dueño.
Ven a mis manos, te destruiré poco a poco.
Mientras te pierdes entre mi ser, te haré mía.
Dime tus fantasias, tus miedos, tus pensamientos prohibidos.
Confía en mí, los haré realidad.
Traeré a esta tierra todo lo que deseas ser, con el costo de quien eres.
Tu mente, tu cuerpo, tu alma me pertenecen.
Estaré en cada suspiro, cada toque y cada sueño.
Te llevaré hasta donde creíste llegar.
Te usaré, jugaré contigo y cuando acabe me vas a pedir más.
A cada instante te pierdes en mí.
Así que ven y sé mía.