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Relato #31 Carolina y Rodolfo

Carolina y mi esposa habian estado mas en contacto y dio la casualidad que en un viaje a Bogota Rodolfo estaba de cumpleaños asi que Carolina programo una fiesta sorpresa.

Eramos bastantes personas y la reunion fue muy divertida, habia buen trago y cervezas y mucha comida. Todo transcurrió muy bien y Carolina estaba mas que contenta entre todo el trago que repartía y que se tomaba ella. Ya cerca de la media noche el trago empezaba a acabarse, ella y Rodolfo tuvieron una conversacion y un rato despues les dijo a todos que no se debian preocupar pues todo estaba fríamente calculado. Como era una fiesta sorpresa ella habia dejado todo el trago escondido en el deposito y al momento de la fiesta solo habia subido una parte. Rodolfo se levanto y se dispuso a acompañarla pero ella se nego al ser él el festejado y pidiendole permiso a mi esposa me pidio que yo la acompañara. Por supuesto yo no me pensaba negar. Me levante y salimos del apartamento. Iba bastante prendida y no pude evitar mirarla morbosamente pues definitivamente es una mujer espectacular. Baja de estatura pero de contextura delgada. No tiene tetas pero si un culo delicioso y redondito, no grande sino justo a su medida. Pelo largo y labios definidos. Esta noche estaba con un vestido de tiras, rojo suelto y largo, con abertura en las piernas. Llegamos al ascensor. Entramos en el y oprimio el boton del sotano dos. Se giro y se quedo fija mirandome. Fue una de las miradas mas sensuales que yo haya sentido jamas. "Entonces...¿ como es el trato?" Me dijo. Yo quede mirandola con cara de interrogante sin saber a que se referia. Sonrio y luego dijo "no se haga el guevon que usted sabe a que me refiero". Se mojo los labios y continuo "Rodolfo se come a su esposa...y usted me come a mi?". Y con una sonrisa totalmente picara se quedo esperando la respuesta. Yo le sonrei y le respondi "si, esa es mas o menos la idea". Ella me pregunto " y usted si me hace la vuelta?". La mire de arriba a bajo y le respondi con un si rotundo. El ascensor se abrio y mientras salia de el me dijo "pues no se le nota" y me miro con un deseo absoluto. Yo sonrei y la segui. Habia que recorrer todo el parqueadero hasta llegar al deposito. Lo abrio, prendio la luz y entro. Yo fui tras ella la tome de la cintura y la acorrale contra la pared. Nos besamos apasionadamente. Sus manos no se detenian asi como las mias que buscaban recorrer todo su cuerpo. Agarre su culo con tantas ganas que mis dedos se hundian en el. Recorri su cuello con mis besos. Ella desapunto mi pantalon y metio su mano. Me agarro con fuerza y masajeo el pene. Me hizo saber lo mucho que habia esperado este momento. Se arrodillo y me chupo el pene con muchas ganas. Me lamia y chupaba como si quisiera sacarme hasta el alma. La levante, la empuje contra la pared y me arrodille. Le levante la falda del vestido. Tenia un hilo dental de encaje blanco. Se lo quite y levantandole una pierna para que la pusiera al rededor de mi hombro meti mi cabeza. Su vagina rosada y suave. Se notaba que estaba preparada porque no solo se sentia suave sino que sabia deliciosa. Estaba muy humeda. Mi lengua resbalaba con mucha facilidad dentro de ella asi como mis dedos que entraban uno a uno. Intentaba silenciarse pero no podia evitar lanzar uno que otro gemido. Me levante y abri sus piernas. Se lo clave con tantas ganas que estuve a punto de venirme. Me empece a empujar adentro de ella mientras la agarraba del culo para oprimirla mas hacia mi. Podia sentir su respiración entrecortada y sus suaves gemidos en mis oidos mientras seguia repitiendo las ganas que tenia. La gire, le levante bien la falda hasta descubrir su lindo trasero. Le di un par de palmadas y la acomode para poderle meter mi pene. La empece a bombear. La agarraba de la cadera para cogerla con fuerza. Sus gemidos eran cada vez mas fuertes aunque no lo suficiente como para llamar la atencion. La tome de los hombros y comence a hacer mayor presion. Pase una de mis manos hacia adelante logrando tocar su clitoris. Lo masajee hasta que solto un pequeño grito de victoria. Se vino y me dio el tiempo justo para sacarlo y venirme. Con su respiracion entrecortada intentaba hablar y decir "jueputa que rico". Nos miramos y nos arreglamos. Habian sido los 5 minutos mas deliciosos de la noche. Un muy buen rapidito.


Subimos, yo con dos pacas de cerveza y ella con varias botellas de whisky.

Entramos y como si nada hubiera pasado continuamos la noche. Cada vez eran menos los que estabamos, hasta terminar solo nosotros dos, Rodolfo y Carolina, y Andrea, una de las hermanas de Rodolfo y un mujerón. Pelo largo, alta y con un cuerpazo que todas las mujeres de la fiesta sintieron envidia y a todos los hombres nos dejo boquiabiertos. Todos seguimos tomando y terminando todo el trago. Todos ya estabamos mucho mas que tomados, hasta que Carolina sin ningun reparo dijo "que hp, ya empece a cumplir mi parte del trato". Rodolfo la miro con sorpresa y luego me miro a mi y luego solto una carcajada. Mi esposa tambien pero a ella yo ya le habia contado. Nos quedamos todos mirando mientras Andrea seguia perdida sin entender nada. Fue ahi que Carolina se levanto ya aun mas tomada y me llevo de la mano. Le pidio permiso a mi esposa y a rodolfo y luego dijo " ya volvemos".


Entramos en la habitacion y con violencia nos abrazamos en un beso profundo y apasionado. Le quite el vestido de un solo tiron y comence a besar su cuerpo que ya era mio con toda confianza. Sus pequeños pezones entraban en mi boca podia jugar con ellos. Su respiracion se comenzo a agitar. La tire en la cama y levante sus piernas para quitarle el hilo dental. Las abri y meti mi cabeza entre ellas. Su vagina seguia deliciosa. La lami con muchas ganas. Mi lengua la podia recorrer muy suavemente. Se humedecia muy rapido. Chupe su clitoris y sus gemidos se iniciaron con fuerza. Me quite la ropa y ella se arrodillo ante mi. Mirandome a los ojos me empezo a chupar el pene sin compasion. Era muy buena con la boca. Lo lamia y con su lengua jugaba con mi glande. La levante y la volvi a acostar en la cama. Me hice sobre ella se lo meti con fuerza y muchas ganas. La penetre sin parar. La cama se iba moviendo y sus gemidos eran intensos. Era muy estrecha y yo podia sentir como mi pene era aprisionado por ella. Rodamos y ella se hizo sobre mi. Me comenzo a cabalgar. Un rato increible hasta que la agarre del culo y me gire quedando sentado en la cama con mis pies en el suelo. Del culo la levantaba y la hacia sentarse. Estabamos encarnizados y ya nada nos detenía. Sus gemidos eran fuertes e intensos. Estabamos en total descontrol hasta que ella se quito de encima y se puso en 4 sobre la cama. Yo me hice tras ella me acomode y la volvi a penetrar. La bombee con fuerza. La agarraba de la cadera o de los hombros para hacer presion y penetrarla hasta el fondo. Ella hundio su cara en la cama y a grito entero me hizo entender que se habia venido. Yo segui bombeandola hasta que ya no aguante mas y lo saque para venirme sobre su culo. Terminamos exahustos. Nos tiramos en la cama.


Hablamos un rato. Entre su borrachera me conto la situacion que habian vivido con Rodolfo. Fueron dias muy dificiles, tanto que incluso ella ya habia pensado en la posibilidad de ponerle los cachos. Pero justo despues de que el estuviera con mi esposa todo habia cambiado. Todo se habia renovado, rodolfo se habia renovado. Y ella queria hacerlo tambien. Por eso esta noche habia sido perfecta.


Despues de un largo descanso y de hablar bastante, nos arreglamos y salimos. La musica seguia fuerte. Desde el pasillo podiamos ver el comedor donde Andrea estaba recostada en un sueño profundo. Seguimos caminando y la sala comenzo a aparecer. Rodolfo estaba sentado sobre el sofa con los pantalones abajo, mi esposa estaba arrodillada frente a el, lamiendo y chupando su pene. El se encontraba en un extasis absoluto, tenia cerrados su ojos y agarraba con fuerza la nuca de mi esposa para hundirle el pene en lo mas profundo de su garganta. Carolina y yo solo mirabamos. No la senti molesta ni mucho menos incomoda, pero queria que los dejaramos solos. Al contrario yo si queria ver y se lo dije. Ver es otro nivel, es algo mas alla de todo. Ella quedo pensativa pero asi mismo senti que la idea no el disgustaba. La tome de la mano y seguimos caminando hacia la sala. Rodolfo se quedo quieto mirandonos mientras mi esposa seguia concentrada en lo suyo. Me acerque a ella. La tome de las tetas y me acerque a su oído. Suavemente le susurre que se quitara la ropa y que dejara que Rodolfo se la comiera. Yo queria verla. Ella se levanto conmigo y nos dimos un beso. La ayude a quitarse la ropa y tomandola de la mano se la devolví a Rodolfo. Su pene estaba duro y mi esposa ya se encontraba mas humeda que nunca. Se abrio de piernas y se sento sobre el. Yo me sente en frente con Carolina. Ella no dejaba de mirar a Rodolfo con una mirada llena de sensualidad y erotismo. Mi esposa empezo a cabalgarlo. Sus gemidos cada vez eran mas fuertes. Desde la posicion en que nos encontrabamos podiamos ver como su pene salia y entraba sin cesar. Cada momento era mas intenso. Carolina transformaba su rostro mordiendose los labios y disfrutando cada segundo. Veia como Rodolfo agarraba el culo de mi esposa y le hacia mas fuerza para penetrarla. Mi esposa estaba concentrada y su extasis era absoluto. Carolina estaba muy excitada. Sus pezones parecian timbres e intentaba cruzar sus piernas con incomodidad. Entonces yo la tome en mis manos. La hice levantarse y la traje hacia mi. Le levante el vestido y la hice sentarse de espaldas a mi sobre mis piernas. Le abri las de ella y meti mis dedos. Su vagina estaba completamente humeda. Rodolfo abrio sus ojos con sorpresa al ver a Carolina completamente abierta de piernas frente a el con mis dedos en ella. Pero fue mas su emocion que cualquier cosa. Mi esposa le estaba saltando y el la agarraba con fuerza para darle mas duro. Sus gemidos eran deliciosos y mas ahora que se respondian mutuamente con carolina. Mis dedos entraban en ella sin ninguna dificultad. Ella se levanto y se quito totalmente el vestido. Se volvio a sentar sobre mi un brazo lo paso para atras de mi cabeza rodeandome. Yo seguia teniendo acceso a su vagina y ahora se sumaba que al estar en esa posicion mi boca llegaba a sus senos. podia chupar sus pezones sin problema mientras con mi mano jugaba en su clitoris y le metia los dedos. Rodolfo hizo que mi esposa se levantara y la puso en 4. Se acomodo y se lo clavo sin compasion. Carolina gemia mas y mas mientras que Rodolfo bombeaba con todas sus fuerzas a mi esposa. Sus tetas iban de lado a lado y su culo rebotaba contra el como una ola. Cada vez le daba mas y mas duro. La agarraba de la cadera o de los hombros para empujarselo hasta el fondo. Mi esposa empezo a gritar y carolina gemia absolutamente enloquecida. Sin pensarlo gire mis ojos hacia andrea que seguia apoyada sobre la mesa pero ya no dormida. Tenia los ojos abiertos viendo a mi esposa siendo penetrada por Rodolfo y a Carolina siendo masturbada por mi. Alcanzo a hacer cara de no entender nada hasta que me vio. Cerro sus ojos de inmediato y siguio haciendose la dormida. Yo continue con lo mio y le metia los dedos a Carolina. Uno, dos, 3 y hasta 4 dedos al tiempo. Ella no paraba de gemir y disfrutar y yo seguia metiendo su pezon en mi boca chupandolo y lamiendolo. Mi esposa hundia su cara en el sofa mordiendolo para no seguir gritando, pero era imposible con las ganas con las que le estaba dando Rodolfo. De pronto mi esposa solto un grito eterno y Rodolfo le saco el pene para llevarselo hasta la boca. Su pene salio escurriendo toda su humedad. Mi esposa lo recibio sin problema y comenzo a lamer y chupar hasta que Rodolfo cerro sus ojos y la agarro de la nuca para meterle el pene hasta el fondo y venirse en ella. Carolina no aguanto mas y se vino de forma magistral. Se movia como desesperada y me humedecio todo el pantalon como si se hubiera orinado encima. Escurria a mas no poder. Su respiracion y gemidos continuaban mientras mi esposa tragaba todo el semen de Rodolfo. Su boca estaba llena de el.


Un rato mas tarde ya estabamos todos vestidos y de nuevo arreglados. Andrea se levanto y fue a la habitacion de huespedes a dormir. Carolina y Rodolfo se la pasaron abrazados tomando el ultimo trago al igual que nosotros. Definitivamente algo en ellos habia cambiado para bien.

Nos despedimos hasta una nueva oportunidad. Porque ellos fueron muy claros al decir que querian volvernos a ver.

Pota63

Soy hombre heterosexual

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Categoria: Hetero: Infidelidad
Fecha de Publicación: 2024-04-04 14:36:57
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