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Cuando tenia mas o menso unos 19 trabajaba en al cosecha se ganaba muy buen dinero y se trabajaba 3 y 3 meses al año luego podía dedicarme lo mio en el pueblo y tener tiempo libre para mi.
Era la cosecha de soja que acá es en invierno, se suele trabajar hasta muy tarde con un frio d ella gran siete, estábamos en un campo bastante alejado de todo esa noche llovió y como teníamos poco gasolil y comida el patrón decido ir al pueblo de inmediato el dueño del campo se le colo con la escusa de comprar el también mercadería y aprovechar el viaje, así que como a las 9 de la mañana partieron, no regresarían hasta la noche seguramente, yo me levante y después de tomar unos mates comencé a revisar la cosechadora, engrasar, ver correas esas cosas, como a las 10 apareció la dueña de casa con una invitación a comer, acepte (nunca rechazo una buena comida jejeje) seguí en lo mio hasta que el escuche llamar me lave las manos y fui a la casa, tenia preparado unos buenos fideos y la mesa tendida ya, una cocina a leñas dejaba el lugar hermoso de calentito, comimos charlando, se fue por las preguntas de si tenia novia y esas cosas le conteste que no que no tenia interés en tener novia que me ataría, se levanto a sacar los platos y al estudie, era una mujer grandota mas bien gordita de cabello rubio largo hasta media espalda se insinuaban dos pechos enromes dentro de la blusa y tenia un trasero mas bien grande, después de juntar la mesa se acerco como a juntar unas migas y se me puso bien al lado, no me moví ella se acerco mas y me puso una mano en al cabeza, acariciándome el pelo.
- ¿conoces mujer vos? - Pregunto sonriente afirme con una sonrisa picara, se largo una carcajada estridente.
- seguro que alguna pendeja que ni atenderte sabe – dijo seria mientras me pasaba la mano por la espalda, ni se imaginaba las que tenia ya corrida pero bueno, me miro con cara de gata mientras preguntaba.
- te gustaría estar con una mujer de verdad – sonreí ya esta me dije hoy tengo fiesta.
Ella se alejo un poco como para ver que hacia, yo me puse de pie y me apoye a la mesa con la cabeza ladeada, ella fue hasta la puerta y le puso llave cerro la cortina que tapaba el vidrio de la puerta y la de la cocina.
- vamos a la pieza – dijo mientras me tomaba de la mano y me guiaba, llegamos a la habitación una cama de dos plazas de las altas sin acomodar las sabanas una estufa a leña en un costado daba calor el hambiente estaba muy bueno, ella se empezó a quitar la ropa cuando se quito el corpiño dejo libre dos enormes pechos blancos con pezones rosados que se mi hizo agua la boca, se quito la pollera y si tenia sus quilos de mas pero bueno era una mujer me quite la ropa y la deje sobre una silla, ella me abraso llevándome a la cama.
- no te preocupes los hombres no llegan hasta la tarde bien tarde tienen como 2 horas solo para ir con los caminos como están – sabia eso pero bueno.
Me empujo sobre la cama y dio un silbido.
- nene vos si que venís bien armado – se acomodo entre mis piernas y comenzó a jugar con mi pene lo miraba le pasaba la lengua lo chupaba sin quitarle la vista.
- hace rato que lo único que tengo es el “pajarito” de mi marido, es la mitad de esto - dijo sonriente.
Luego de un rato note que me ida a hacer acabar si seguía así que la agarre del cabello y la subí a la cama, ella se dejo llevar dócil me dedique a esos enormes y bellos pechos por un buen rato, mientras ella se retorcía y gemía en voz alta.
- que rico como te prendes a las tetas nene, mi marido aveces ni me las toca – yo disfrute de ellas un buen rato luego fui bajando despacio ella seguramente se dio cuenta a donde iba por que abrió las piernas para dejarme llegar, me asegure de que estuviera limpia antes ya le había metido varias manos y disimuladamente me olí los dedos mientras ella se revolvía en al cama, pero la muy puerca se había preparado olía a jabón y a perfume, le di un buen sexo oral hasta que note que se acababa, cuando note eso le metí 2 dedos y la masturbe mientras ella jadeaba y decía cosas.
- cojeme nene cojeme, quiero tenerte adentro, dámela dámela ya – la hice acabar bien no quería que me ganara tenia tiempo y quería disfrutar, una ves ella se calmo del orgasmo me le fui arriba, ella separo mas las piernas y las levanto para que me sirviera.
- Despacio – dijo – tenes un pedazo considerable y esta conchita recibe un pitulin mas pequeño – le apoye y despacio empuje estaba empapada de su flujo y mi saliva poco a poco haciendo rogar la fui metiendo mientras ella jadeaba y apretaba las sabanas, al final hice tope tenia una panzita que estaba en el medio pero nada que molestara de mas, lentamente fui jugando con ella tratando de aguantar, ella jadeaba y gruñía luego de un rato le dije que se subiera arriba, me miro seria.
- si montame – le dije – cogeme – me salí y me acosté en la cama ella se subió seria y se guio el pene dentro comenzó a moverse despacio mientras yo podía darme una fiesta con sus pechos, a poco rato se sacudió con furia, tenia un orgasmo, después de acabarse durante un tiempo que pareció mas que largo se dejo caer sobre mi.
- que lindo – dijo entrecortado – nunca lo ice así, mi marido es convencional el arriba yo abajo no hay mas – le di un par de besos y le dije al oído mientras le pasaba la lengua por la oreja.
- cojeme… cojeme bien cojido te quiero sacar hasta la ultima gota de flujo hoy – ella se retorció se sentó sobre mi y comenzó a moverse mientras me miraba y decía cosas.
- si que te voy a coger nene… hoy te vas de acá bien usado, vas a querer mas te aseguro – la deje hacer la cosa era verla sus pechos rebotaban sin parar los ojos en blanco las piernas regordetas al costado mio temblaban un hilo de saliva le caía por la comisura de los labios yo me prendí otra ves a sus pechos los bese, los chupe los mordí ella relinchaba, jadeaba gruñia.
- que rico nene, que rico quiero tenerte dentro mas, quiero que vengas a verme cuando el no este – comenzó a tener otro orgasmo este mas fuerte que el primero se doblo en dos clavando la cabeza en mi pecho dando unos gritos haaa haaaa apretaba la sabana con furia mientras no dejaba de moverse tratando de controlarse pero no la deje me movía yo dándole mas ella rogaba que me detuviera pero no se salia seguía empujando su cuerpo en contra del mio, al final seso, se desplomo a mi lado agitada, sollozando.
- me vas a matar crio – dijo mirándome – que te pasa vos no sos ningún pichón, alguna loca te a enseñado bien – sonreí y me subí sobre ella instintivamente cerro las piernas.
- para dejame descansar me vas a matar vos – mientras le besaba le metí la punta lo mismo ella maulló, di un empujón y buena parte entro.
- nooooo grito – me quede quieto sobre ella jugando con sus pechos acariciándola mientras ella respiraba agitada excitada, la deje recuperarse sin sacársela, de ves en cuando me movía para que se mantuviera dura mientras ella jugaba con mi lengua y me acariciaba.
- sos terrible che – dijo – ¿me vas a acabar o que? – le di un beso bien alevoso y le dije despacio.
- yo no tengo apuro de acabarme… estoy bien así – ella me dio un chirlo en las nalgas.
- quiero estar dentro tuyo, gozarte así, si yo me acabo se te termina la felicidad – ella había comenzado a moverse debajo sus cachetes estaban otra vez ruborizados lo que me decía que estaba en marcha otra vez.
