Guía Cereza
por: carlosmedellin45 Publicado hace 2 meses Categoría: Intercambios 3K Vistas
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Hola amigos, les había prometido que les iba a contar la historia de nuestro primer trío, con mi gran amigo, casi hermano.

Cómo lo supuse, no pudimos volver a intimar con Diego y Alejandra, Esposos, ella gordita, muy bella, buena cadera, grandes tetas, caídas por el peso, pero a la vista tiernas. Diego atlético, hacía mucho deporte, casi 1.80 mts.

 

Eran un gran par de amigos, habíamos compartido durante muchos años, rumba, alegrías, salidas, ya que vivíamos en la misma unidad en el municipio de la Ceja. Fueron nuestra familia, nos ayudamos, eran incondicionales. 

Afortunadamente nos pegamos un viaje a unas cabañas y eso nos unió más. Alejandra y Susy salían continuamente y Diego y yo morboseabamos parejo por Whatsapp.

En mi mente empecé a pensar cómo meter a Diego en nuestra cama, quería que Susy, de bellas caderas, buenas tetas de pezón grande pasará una noche inolvidable. Hubiera sido rico un intercambio de parejas, pero a Aleja solo le gustaba estar con chicas.

Susy había gozado en varias salidas y encuentros en casa con chicas y familiares, pero no habíamos tenido la oportunidad de un hombre para un rico trío.

Luego de ese viaje salimos a rumbas, pero con tan mala suerte que Diego y Aleja empezaron a planear cambiar de ciudad por cuestiones económicas. Se me bajo mi morbo y nos enfocamos en ser solidarios con ellos y ayudarles a ubicarse, específicamente en Bogotá.

Ellos se fueron y luego de casi un año, en el cual nos comunicamos por Whatsapp de forma muy familiar, Diego dijo que tenía que volver a Medellín, la mamá había tenido un percance y debía venir de urgencia. Susy y yo por videollamada le ofrecimos que se hospedara en nuestra casa, él dijo que sí.

Llegaría a Medellín un miércoles y planeaba quedarse hasta el domingo. Mi mente empezó a volar, a morbosear como loco. Era viernes y faltaban 5 días.

El viernes casi siempre salimos y le dije que fuéramos a rumbear. Bailamos, nos embriagamos y llegamos a casa. Prendí la televisión y lo conecté a mi celular, previamente había seleccionado un porno de tríos. Culeamos viendo esos vídeos y cuando terminamos.

  • Amor, te debo un trío
  • Si, tú sabes que muy rico cumplir esa fantasía, 
  • Siempre hemos estado culeando con chicas, pero ya es hora de que tengas dos vergas a tu disposición, 

Vimos más porno y Susy se veía súper animada, sostuve la calentura esos días, fantaseamos mucho, Susy ya me decía cómo quería que fuera. 

Diego llegó el miércoles, subí solo, lo recibí en Rionegro, bajamos a Medellín.

  • Viejo, cómo estás de ánimo para que hagamos una culeada con Susy

me miró, sonrió

  • ¿Qué dice Susy?
  • No lo sabe, además sabes que te estima mucho 
  • Dale, ¿qué tengo que hacer?, dirigí, vos sabes que mandas, que plan se te ocurrió.
  • Nada, por ahora solo dejar tu habitación abierta, báñate con puerta abierta y anda en bóxer en la casa y siempre desnudo en tu pieza
  • Huyyy, ya mi verga está a mil de solo pensarlo
  • Creo que el viernes es el día, mientras que la calentamos. Susy es fresca, pero quiero calentarla, vos y yo morbosear parejo…
  • Dale, sos excelente para esto, de solo pensarlo siempre estaré empalmado y Susy lo verá 
  • Esa es la idea, quiero que ella me insinúe que quiere un trío con vos y estos días vos como si nada. Yo te voy contando nuestras conversaciones.
  • Jajajja, chévere.

Llegamos a casa a eso de las 7 pm, Susy había arreglado el cuarto de huéspedes, se saludaron, un gran abrazo y se instaló, mientras Susy y yo preparamos la Cena.

Diego salió, nos contó lo de la madre y me pidió si le prestaba el transporte para los dos días que venían, tenía que hacer muchas vueltas. Accedimos con todo placer y pusimos todo a su disposición.

Terminamos de cenar, arreglamos la cocina y Diego se fue para su habitación.

  • Bueno muchachos me voy a pegar una ducha, mañana tengo mucho que hacer

Nos miramos de reojo y esa fue la clave, Diego se metió a su cuarto. Tres minutos después sentí que se metió al baño. 

  • Amor, llévale un refresco, se lo dejas sobre la mesita de noche…
  • Si, dale, ya voy

Al otro día a eso de las 11 am, Diego me escribió por Whatsapp 

  • Huy viejo, que te contó Susy después de que entró a mi pieza
  • Nada, vi que se quedó un rato y que hablaron, no vi, pero dale.
  • Yo estaba en el baño, en la ducha y como acordamos todo abierto, yo desnudo y con la calentura y la idea de lo que habíamos planeado, me enjabone y empecé darme una paja, sentí que ella entró, descargo un vaso en la mesa de noche. Cuando iba a salir se detuvo frente a la puerta, yo seguí con mi rutina, pero ante la excitación boté un gran chorro, 
  • Huy viejo aquí tengo mi verga a mil, seguí contando
  • Descansé un poco, empecé a salir y escuché que dijo, (Diego hay te dejé un refresco, por si te da sed está noche). Me fui secando y salí, Susy no se había ido y me milentamenteró con detenimiento, me escaneó y fijó su mirada en mi verga que estaba cayendo , pero con el morbo que tenía, empezó a crecer de nuevo y brincando al ritmo de mis palpitaciones. Ella se quedó el tiempo que se puso erguida sin dejar de mirarla. Sin decir nada más se despidió y salió
  • Huy hombre, no me contó
  • ¿Qué sería, le disgustaría? ¿O se preocupa por vos?
  • No sé, pero hombre sostengamos el plan. ¿A qué hora llegas?
  • A eso de las 8 p.m.
  • Dale te esperamos, si alguna cosa seguimos hablando en el día

Me pareció extraño que Susy no hubiera dicho nada porque ella igualmente es muy morbosa.

A eso de las 8 pm Diego llegó, nos saludamos, Susy igual con un abrazo efusivo, cenamos, e igual Diego se fue a duchar, pero cambie mi táctica y le dije a Diego sin que se diera cuenta Susy, que sacáramos una excusa para que entrara a nuestro cuarto.

Igualmente nos metimos a nuestro baño.

  • Diego si necesitas el computador, tengo un portátil, cuando quieras entras y lo coges

Diego, entendió.

Nos fuimos a la ducha, dejamos todas las puertas abiertas, como siempre. Empecé a calentar a Susy y mi verga empezó a pararse con ganas. La tenía de espaldas a la puerta del baño y apareció Diego, en pantaloncillo, tenía en su mano izquierda el computador, nos miramos y sonreímos. Instintivamente él se mandó la mano a su verga y yo volteé a Susy para que viera que Diego estaba ahí. Me arrodillé, le alcé un pie que lo puse en mi hombro y le empecé a mamar su concha, estaba hiper fogosa, chorreaba de placer, gemía, se agarraba las tetas, gemía como loca, yo concentrado en su concha. Empecé a meter mis dedos en su culo, los humedecí y metí primero uno y luego dos, los sacaba y los metía, a la vez que agarré su clítoris con mi boca. Sentí su orgasmo, temblaba de placer, sin parar me levanté, metí mis dedos en su concha y empecé a mamarle sus ricas tetas, subí a su cuello y terminamos en un largo beso. Ella se arrodilló, se dio la vuelta y ahora yo veía a diego. Me lo chupó con más ganas, sabíamos que teníamos público, eso me aceleró, me chorreé como loco, Susy se tragó toda mi leche y yo quedé nublado de placer.

Nos secamos y nos fuimos a la cama, apagamos las luces y en silencio nos fuimos durmiendo. Susy al otro día me levantó, era un poco más temprano.

  • Amor, quiero contarte algo
  • Si dale, ¿qué pasa?
  • Anteanoche cuando entré al cuarto de Diego lo vi haciéndose una paja en el baño y anoche cuando estábamos juntos, él entró por el computador y nos vio en acción. Estaba en calzoncillos y con su mano se tocó como loco.

Hice silencio para que ella misma avanzara

  • Fue raro, pero como es tan amigo tuyo te lo tenía que contar, entre los dos no hay secretos
  • ¿Te chocó, o qué?
  • ¿Sinceramente?
  • Si tranquila
  • Huy fue full, con estas semanas pensando en el trío, se me vino a la cabeza que fuera con Diego, ¿qué opinas?
  • Déjame pensarlo, 

Me quedé callado, no dije nada. Nos levantamos, nos vestimos y salimos para el trabajo. Diego estaba en la cocina.

  • Hola, ¿cómo amanecieron?, aquí les hice un cafecito 
  • Huy si gracias Diego, apenas para empezar el día - Dijo Susy 

Diego estaba en calzoncillos, su verga de lado, estaba rígida. Susy le miraba su verga mientras tomaba el café, me miró y sonrió. Yo igual estaba a mil, yo también fantaseaba el trío desde hace tiempo, creo que Susy, Diego y yo estábamos mojados.

A eso de las 11 am igualmente Diego me escribió

  • Como van las cosas?, anoche fue de locos, después de esa película me fui para mi pieza, hice una video llamada con Aleja y nos pegamos una paja monumental, ¿qué dijo Susy?
  • Creo que está noche tenemos orgía, jajajaaa. La tengo como que quiero, o no.
  • Dame más detalles
  • Me contó que te había visto y que ya estabas en sus fantasías para el trío
  • Huy hermano, está forma de preparar todo es muy excitante, nunca había sentido esto. Muchos amigos que han intercambiado parejas me dicen que es sin preámbulos, se encuentran y van al grano, pero esto que estamos haciendo es de locos, 
  • huy sí, creo que muy rico así, como una novela morbo
  • Además, la remataste bien está mañana en pantaloncillos, con tu verga a mil. 
  • Vi que los dos babeaban. Bueno que hago está noche, mañana no madrugo y ustedes tampoco, puede que sea el día como tú dices.
  • Si, dale, voy a decirle a Susy que salgamos los tres a rumbear y llegando a casa aceleramos, déjate llevar, creo que estamos pasando bueno
  • Sí mi hermano, creo que estoy en la gloria

 

Llame a Susy y le dije que rico una bailada en la noche, que saliéramos, que Diego nos caía a la discoteca por qué se iba a quedar hasta tarde en casa de la madre, me dijo que listo.

Llegamos a la discoteca como a las 11 pm. Susy llevaba un vestido de seda, largo, de tiras, tenía un buen escote, como siempre en las rumbas no llevaba brasieres y menos calzones, desnuda debajo de su vestido, muy levemente se le notaban sus pezones.

Pedimos tequila y bailamos un rato, una hora después Diego llega y se une con nosotros, difícil hablar con el ruido. Al rato les Digo que salgan a bailar.

  • Viejo saca Susy, estoy cansado

Salieron, bailaron, yo los observaba, Diego estaba empalmado, este plan era una tortura para él y para mí. 

Susy se movía con más confianza y gracia, brincaban sus tetas,  sé que Diego cuando la coja sentiría su desnudes debajo del vestido.

Así pasamos la noche, Diego y yo súper excitados tratando que Susy quedará como nosotros. Empecé a calentar más a mi mujer, la besaba en el cuello, le cogía su culo, la apretaba a mi verga parada, luego Diego la sacaba a bailar, yo Luego con el mismo ritual, así lo hicimos varias veces. Casi finalizando la rumba en una de las sentadas, íntimamente Susy se metió la mano debajo del vestido y saco sus dedos mojados, me los paso por la boca y me dijo al oído

  • Amor, hoy es el día

Nos miramos y sonreímos, lo que dejó claro que lo íbamos a hacer.

Seguimos igual, besos, toques y Diego bailando intercaladamente, los tres sabíamos para dónde íbamos, pero Diego y Susy se dejaban llevar por mi morbo. Salimos de la disco para la casa, nos fuimos cada uno a la pieza, saqué un antifaz o máscara para dormir, Susy ya se había metido a la ducha, salí y fui al cuarto de Diego 

  • Desnúdate rápido y métete a nuestro baño

Regresé al baño y le puse el antifaz, ella sonrió y la empecé a besar y acariciarla, ella estaba a oscuras. Llegó Diego, lo invité a entrar en silencio y lentamente salí, quedaron los dos solos y yo desde afuera mirando, Susy se dio cuenta del cambio, nuestros cuerpos eran diferentes, yo grueso, velludo en el pecho y Diego delgado muy rasurado en todo su cuerpo.

Agarró su verga y sonrió más, era de 17 o 18 cm delgada. Diego le mamaba sus tetas como un niño hambriento, mientras ella lo pajeaba.

Susy se quitó la máscara, lo miró, él todavía mamaba sus tetas, miró atrás y me vio, estiró una de sus manos y me invitó a entrar.

Nuestros cuerpos se unieron, Diego se irguió le beso el cuello, yo apretándole desde atrás, le cogí sus tetas, mientras él besaba su cuello y le metió su mano en la concha, yo lamí mis dedos y empecé a meterle un dedo en el culo, preparándola para una doble penetración, como era su sueño.

Nos quedamos un rato en la misma pose y ritmo.

  • Metámonos a la cama - dijo Susy 

Caminamos los tres hacia la cama, Susy se arrodilló, nos hizo acercarnos, nos pusimos al frente de ella, rosamos nuestros muslos.  cogió nuestras vergas y empezó a pajearnos y a mamarlas, nosotros colocamos las manos en nuestros hombros. En un momento se tragó nuestras vergas al mismo tiempo, sentí la verga de Diego en su boca, fue glorioso, con cuidado Diego bajó su mano izquierda a mi culo y me acarició. El trato era que Susy no debería saber nada de nuestros deseos bis.

Susy hizo acostar a Diego, siguió mamandoselo, con una mano le hacía la paja y con la otra me hizo que me acercara. Cogió mi verga y la fue acercando a la de Diego, la puso una al lado de la otra, las pajeaba unidas, las metía en su boca. Diego y yo nos miramos, ella concentrada nos hacía un frotting. Disimulamos, no queríamos mostrarle el placer loco que nos hacía. La hicimos parar…

La acostamos entre los dos, Diego se encargó de su concha y yo de sus tetas, los dos al mismo tiempo nos comíamos a mi mujer.

  • Aaaaaaaaa, sigan, rico, esto es la gloria…

diego me miró y dijo

  • Démosle los dos

De inmediato ella se sentó, mando a Diego a qué se sentará, se montó en él y lo empezó a cabalgar, yo fui a buscar aceite, cuando volví estaba como loca brincando en la verga de Diego, los dejé en su ritmo. Me coloque detrás de ella y le hice que se acostara en el pecho de Diego, ella seguía moviéndose.

Empecé a echarle aceite en su culo y le metí uno a uno los dedos de la mano izquierda en su ano, mientras con la derecha y con cuidado le sobé los huevos a Diego. 

  • Dale amor móntate ya…

Me paré en la cama hice cuclillas, en el aire, empecé a meterlo lentamente, los dos estaban Quietos esperando mi verga, Susy ya la conocía en su culo, le encantaba,

  • Aaaaaaa Huy si, así, despacio, 

Lo hice lento, hasta que llegó al fondo, lentamente empecé a bombear, ritmo que fue acompañado por Diego que empezó a meterlo y a sacarlo. 

Susy no se movía, gozaba el trabajo que era de nosotros, duramos unos minutos en ese ritmo, pero yo sabiendo que podía estallar, me retiré y seguí viendo como entraba y salía la verga de mi amigo de la concha de mi mujer.

Susy se paró, dio la vuelta, quedó frente mi 

  • Ayúdame, quiero sentarme en esta verga

Se fue sentando, yo la cogí de los hombros y se la fue metiendo lentamente. Su cara era indescriptible, sus ojos cerrados, gemía.

  • Aaaaaarrgggg,  ummmmm que delicia

Sentada del todo, se levantó un poco

  • Diego, dale, bombeame…

Seguía cogida de mis brazos, mientras Diego empezaba sacarlo y meterlo con ganas, me acercó y me abrazó. 

  • No sabes el placer que tengo, esto es lo mejor de mi vida

Se fue sentando en la verga de Diego, se tiró para atrás, llevando sus piernas a sus hombros.

  • Dale, mételo 

De frente, me subí a la cama y fui acomodando mi verga, con mi mano lo dirigí a su vagina que estaba súper húmeda. Lo metí y empezamos los tres a movernos al unísono. Ya los tres nos quejábamos de placer. Por momentos la verga de diego se salía

  • Ayúdale, metemelo 

 

Yo cogía la verga de Diego, hinchada y la dirigía a  su ano, estábamos a punto de estallar.

Aumentamos el ritmo, con mi mano le sobe el clítoris y Diego le agarró fuertemente sus tetas. Fuertemente lo hicimos, nuestras embestidas eran brutales.

Caí encima de ellos, estábamos en un único abrazo y en escala empezamos a estallar. Primero Diego, luego yo y de última Susy que me abrazó y movió su cuerpo como una serpiente. 

Nos quedamos unidos unos tres minutos, jadeamos, como después de una maratón. Mi verga empezó a salir y me arrodillé, la verga de Diego todavía estaba adentro. Me agaché y empecé a lamer la vagina de Susy, llena de mi leche, ella temblaba ante cada lengüetazo, la dejé seca. Cayó de lado y sin nuestras vergas adentro, quedó en posición de cucharita. 

Su imagen era de indefensa, agotada, acurrucada, temblaba de placer, Diego y yo igualmente agotados. Nuestras Vergas flácidas y exprimidas.

Nos acostamos unos cinco minutos, luego Susy se metió al baño, se aseó, lo siguió Diego y luego yo.

Nos acostamos agotados. Susy en la mitad, Diego en el lado izquierdo y yo al derecho, estábamos desnudos. Susy se acercó a mi oído…

  • La próxima quiero tres vergas, gracias

Sonrió y yo igual

Sin más palabras nos dormimos, la culiada, el cansancio y el licor nos ganó. 

Fue un rico fin de semana, el sábado el Domingo no salimos de casa y tuvimos sexo de mil formas.

El lunes llevé a Diego al aeropuerto, quedamos de seguir comunicándonos, y morbosear parejo. 

  • Nos quedamos debiendo un rose vos y yo
  • Si, estaré preparando un show para cuando vuelvas, pienso que nos debemos un frotting completo…

Nos despedimos y …

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🍒 Pregunta Cereza

¿Estás participando en el "No Nut November", el reto anual de abstinencia sexual?


2 Comentarios

Excitante aventura esa de seducir a la visita. A nosotros nos encanta.

hace 2 meses

Delicioso y exitante relato, en espera de la segunda parte

hace 2 meses

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