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Hace un tiempo, mi esposa Adriana llegó de culear con un amigo y me dijo, amor, que te parece si hacemos una pequeña sexy fiesta, seríamos mi novio y yo, Karol y su amigo, tu serías nuestro anfitrión cornudo, en ese instante, desfilaron por mi mente algunas escenas que me excitaron mucho, le respondí, sería rico, cuadra todo y lo hacemos, después de hablar con los futuros invitados se acordó para el siguiente fin de semana.
Dos días antes de la reunión, compre suficiente licor, algunos condones, aunque sabía que no los usarían, y otras cositas para atender a los invitados, ese viernes a eso de las 7 de la noche, llegó Alex, el novio de mi esposa, media hora después, Karol y Danny, su amigo, durante un rato estuvimos conversando, escuchando música suave y tomando unos traguitos, después de dejar claras las reglas del juego, se hizo evidente las ganas de comenzar la fiesta, Alex sacó a bailar a Adriana, sonaba un bolero y ellos muy abrazaditos se besaron apasionadamente mientras se manoseaban con erotismo, Karol me miró y se mordió los labios, en ese momento, Danny también la invitó a bailar, los cuatro se morboseaban al ritmo de la música, mientras en mi crecía una excitación muy fuerte, Adriana frotaba con su mano la verga de Alex sobre el pantalón, mientras el hacia lo mismo en sus nalgas, mi esposa vestía una pequeña faldita de prenses tipo colegiala y una mini blusa sin brasier, mientras Karol traía un vestido negro bastante corto, los machos vestían jean y camisa, mientras yo tenía un pantalón de sudadera de un material suave y algo elástico que se ceñía discretamente a mi cuerpo, una camiseta y zapatillas, además de un detalle que mi esposa me impuso, usar de ropa interior un pequeño hilo suyo.
Mientras bailaban, los machos se exhibían entre si a sus putitas, frotando sus vaginas y acariciando sus tetas, ellas por su parte, los masturbaban sobre el pantalón mientras bailaban muy sensualmente, luego de un par de temas, Adriana dijo, porque no jugamos un poco, hagamos penitencias, todos aceptaron muy entusiasmados, para ello, le ofrecí 4 fichas de dominó de diferentes valores, quien sacara la mas baja pagaba penitencia, la primera ronda perdió Karol, entonces Adriana que era la moderadora dijo, durante un minuto, dale un beso erótico a mi novio, ella sonrió y sentándose de frente en las piernas de Alex, lo besó como toda una zorra, no perdió oportunidad de frotar su vagina sobre el bulto del macho de mi esposa, luego perdió Alex y la penitencia fue chuparle una teta Karol por un minuto, apenas si había comenzado cuando ella dijo, ay jueputa que riiicooo, los demás sonrieron, cuando perdió Adriana, fue Karol quien le dijo, frótale el bulto a Danny, ella lo hizo de una manera tan lujuriosa que él se retorció del placer que sentía, después de varias penitencias similares, por fin perdió Danny, entonces Alex le dijo, frótale tu bulto en la cara a Adriana, el acomodo de lado su verga completamente erecta y así la pasó por todo el rostro de mi esposa quien a su vez le daba chupones y lo lamía.
Luego de casi media hora de penitencias, la temperatura sexual de todos era muy alta, yo les servía licor moderada pero generosamente, entonces Karol propuso que jugaran prendas, en cosa de 10 minutos, los cuatro estaban completamente desnudos, yo estaba sentado en una poltrona frente a ellos, con mis pupilas dilatadas por la tremenda excitación que me producía lo que estaba viendo, entonces Alex dijo, no les parece que el cornudo tiene mucha ropa?, en ese momento, el rubor se apodero de mis mejillas, Adriana sonrió y me dijo, amor quítate la camiseta, sonriendo nerviosamente lo hice, Karol y Danny se besaban lujuriosamente mientras se masturbaban plenos de erotismo, en ese momento, Adriana se arrodilló frente a su novio y comenzó a mamar desaforadamente su verga gruesa y venosa, instintivamente, metí una mano bajo mi pantalón y masturbe mi pequeña verguita que apenas si se notaba, entonces Alex mirándome con lascivia me dijo, te gusta lo que esta haciendo tu mujercita cornudo?, yo respire profundo y con voz tenue respondí, sí, me fascina.
Solo unos minutos después, las chicas cabalgaban a sus machos, dando un espectáculo sexual formidable, sus gemidos hacían que mis sentidos casi colapsaran, por momentos yo les daba licor a cada uno haciendo que la desinhibición fuera total, las poses surgían naturalmente y sus sexos se estimulaban de una forma loca, tras un buen rato de culeo desenfrenado, Karol tuvo un explosivo orgasmo, logrando que al momento Danny llegara igual, así, Adriana y Alex entre fuertes gemidos llegaron a la cima de su clímax.
Después de esa agotadora faena sexual, le serví una pequeña cena, la cual agradecieron, el licor seguía su camino logrando su objetivo, cuanto mas tomados estaban, más desaforados se ponían, hasta el punto en que los machos decidieron cambiar de pareja, al terminar, Alex se vino en las tetas de Karol y Danny sobre la vagina de Adriana, entonces sucedió lo que pasó por mi mente, Alex me dijo en tono dominante, bueno cornudo, es hora de que atiendas a nuestras putas, no hacia falta decir nada más, el mensaje era muy claro, Adriana se sentó junto a Karol con las piernas abiertas, estaba empapada de semen desde el ombligo hasta el ojito del culo, mientras Karol tenia algunas gotas de semen en su cara, pero sus tetas estaban bañadas por completo, me arrodille frente a mi esposa, ella subió sus piernas en mis hombros y presionando con fuerza, llevó mi boca a su vagina, tomó mi cabeza con sus manos y me obligó a lamer y tragar cada gota que Danny había dejado en ella, cuando ya sintió que estaba limpia, miro Karol y esta me tomó por un brazo y me llevó hasta sus tetas también obligándome a tragar el semen de Alex, quisiera poder describir lo que fue esa experiencia, pero no se que palabras usar para hacerle justicia, pero para mi sorpresa, había más, pues Adriana me dijo, amor lo hiciste de maravilla pero te falta la mitad, un frio recorrió todo mi cuerpo y sin que pudiera evitarlo, Alex se puso de pie frente a mi y tomando mi cabeza entre sus manos metió en mi boca su verga que aun permanecía bastante erecta, en ese momento, Karol le hizo una seña a Danny y este se acercó a mi poniendo también su verga en mi boca, total, resulté como la mas puta de todas, mamándole las vergas a los machos de mi esposa y su amiga, debo confesar que jamás en la vida, había sentido un placer sexual tan desaforado.
Después de un descanso merecido y de tomar una buena cantidad de licor, los cuatro reiniciaron su desenfreno sexual, esta vez, cambiaban de pareja con frecuencia, al final, tuve que repetir mi trabajo de cornudo, esta vez lo hice por iniciativa propia y disfrutándolo demasiado, el licor nos tenía bastante mareados, aunque mas a mi por mi falta de costumbre, después de tomarnos hasta la ultima gota de esa botella, les dije que me retiraba a la alcoba, esta quedaba en el segundo piso y cuando fui a subir la escalera, estuve a punto de caerme por el efecto del trago, entonces Alex fue hasta mi y me dijo, ven te ayudo a llegar a la habitación, al instante, Karol le dijo a Danny, ve y ayúdale, entre los dos me subieron al cuarto prácticamente alzado, me acostaron bocarriba en la cama y Danny dijo, quitémosle ese pantalón para que descanse mejor, yo alcancé a balbucear, no, no, Pero Alex lo bajo de un jalón, entonces al ver el pequeño hilo que tenía puesto Danny muy sorprendido dijo, WWAAAOOO, pero mira nada más, que rica puta contestó Alex, que piernotas tiene este cornudo y sin un vellito, en ese momento, tomándome por las caderas giró mi cuerpo colocándolo bocabajo, uuuufff que culote, dijo Danny, tremenda puta tiene Adriana por marido, murmuró Alex, a lo que Danny respondió, tienes toda la razón, en ese momento, sentí unas fuertes nalgadas y mientras Danny se sentaba frente a mi cara para colocar su verga en mi boca, Alex separaba mis piernas y acostado entre ellas, tomó mis nalgas con sus manos abriéndolas totalmente, de un fuerte halón rompió el diminuto hilo, colocando entre ellas su cara, sus labios y lengua comenzaron a estimularme allí de una manera frenética, la cabeza de la verga de Danny buscaba ansiosa mi garganta, en medio de mi vaga conciencia por el alicoramiento, debo confesar que lo que sentía no tenía antecedente alguno, dos machos prácticamente estaban violándome en mi propia cama, de repente, noté que tímidamente asomadas en la puerta, estaban Adriana y Karol, no perdía detalle de lo que pasaba y por alguna razón, eso me excitó aún más, al ver que las había descubierto, simplemente entraron y se sentaron en la cama a un lado de nosotros, Karol dijo, perdóname pero tu marido tiene un cuerpazo de nena muy rico, Adriana sonriendo contestó, si, lo sé y esto que le esta sucediendo, es algo con lo que el ha soñado hace ya un tiempo, a lo que Karol comentó, que rico, porque estos dos le van a dar una tremenda culeada, no creo que pueda sentarse en varios días, las dos rieron, entonces Alex dijo a Danny, ven y comete este rico culo de puta, los dos cambiaron y luego de tener la verga del macho de mi esposa llegando a mi garganta, la verga de Danny se abrió paso entre mis nalgas empapadas de saliva, haciéndome exhalar un fuerte grito que se ahogó con la verga de Alex, aunque intente quitar a Dany, el se acostó sobre mi y me sujetó fuerte por debajo de los hombros impidiéndome el movimiento, total, tuve que relajarme y aguantar por varios minutos un ardor y dolor intensos en mi culito, las putitas de mi esposa y su amiga, miraban muy complacidas la masacre que sus machos hacían conmigo, los dos me culeaban sin piedad por culo y boca, entonces Danny se levanto un poco y tomándome por la cintura, me colocó en cuatro, al mismo tiempo, Alex se ponía de rodillas y tomando mi cabeza entre sus manos, me culeaba profundamente por la boca, poco a poco, el dolor y las incomodidades cedían, el placer comenzaba a tomar forma y mi masculinidad desaparecía por completo, ellos dejaron de tratarme como el cornudo y pase a ser la puta número 3.
Después de culearme en varias poses por mas de una hora, terminaron dejando mi culo y mi boca llenitos de semen, los cuatro regresaron al primer piso y yo quede tirado(a) en la cama, usado(a) y muy maltratado(a), pero con unas sensaciones que, aunque no las entendía muy bien, eran demasiado deliciosas.
Al día siguiente, desperté a eso de las 8 am, bajé al primer piso y para mi sorpresa, no estaban, llame a mi esposa y me dijo que después de culearme, habían decidido ir a un motel para seguir la fiesta allí, me preguntó si quería acompañarlos ya que los machos habían quedado con ganas de darme más verga, después de vacilar un rato, la llame y pedí la dirección, allí de nuevo fui la puta de ese par de salvajes y ahí si quede que no podía ni caminar, pero con mi parte femenina completamente satisfecha y pensando en lo afortunado que era, en tener una esposa que sabía y entendía perfectamente mi sexualidad, haber vivido la experiencia sexual más increíble de mi vida solo me dejaba un deseo, quiero recibir más .. más ..más..