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La magía de un seductor
Llevo meses cogiendo con un sexy compañero de trabajo.
Que me domina con un olor varonil, con una mira penetrante y embriagante, con unos movimientos certeros y un tacto que es experto en tocar en el lugar preciso, en el momemtojusto.
Hace uno a días, luego de un fin de semana intenso con sexging donde me retó a masturbarme y a enviarle algunos vídeos, le pedí que viniera a mi casa, vivo con sola con mihija y ella no estaría para ese momento.
Llegó el día y por supuesto lo estaba esperando, pero antes de que llegara, me habló por teléfono para darme algunas instrucciones.
Lo debía esperar desnuda de la cintura para abajo y en la parte superior, solo una camisa de pijama negra (Soy una mujer muy blanca y según él ese tono me quedaba muy bien), por supuesto, sin sostén. Debía abrir la puerta así con mi vagina desnuda y bajar 3 escalas, su mente retorcida y sucia quería que sintiéramos ese morbo de estar alerta porque mis vecinos podían verme. Me habló de todo eso que me encendió en el sexging el día antes y me pidió que me tocara para cuando él llegara yo estuviera húmeda, preparada y más que ganosa y arrecha por todo lo que decía iba hacerme.
Le mostré con mis dedos cuan húmeda y preparada estaba, me toque de una manera deliberada buscando mi placer y aumentando el suyo hasta que sentí el ruido de su carro estacionarse y fue ahí donde el seductor se materializó y empezó toda una danza de momentos eróticos que a hoy se repiten en mi mente y me calientan como el infierno.
