
Compartir en:
En estos días recordando experiencias pensé en una de las vergas más deliciosas que he probado,
Esa primera vez estaba charlando con alguien por mail (no juzguen si fue hace un tiempo)
Un joven de 20 años moreno, un cuerpo atlético, una voz super sexy de esas que te hacen mojar al hablar.
Me invitó a salir pero estaba con una prima y tenía que llevarla conmigo, me dijo que no me preocupara que la llevara que algo podríamos hacer. Me aliste obviamente resaltando el cuerpo de adolescente que tenía en esa época, era flaquita pero con unas nalgas redondas , buena pierna. Mi prima se organizó y nos fuimos.
Llegamos a su casa y estaba solo, empezamos tomando un trago uy bailando. Para mí gran suerte mi prima no tomaba así que cayó rápido. Y con el decidimos irnos a su cuarto. Pasando la puerta me besó con desesperación, sentía su lengua y sus ganas de comerme completa. Sus manos me recorrían por todo lado y yo solo me entregué a esa sensación , esas manos fuertes me cargaban sin ningún esfuerzo, poco a poco me retiraba la ropa su boca y sus manos pasaban por mi cuello, mis pequeños senos, y luego al quitarme mi pantalón quede en un domingo hilo que estaba súper mojado por el excelente trabajo que estaba haciendo. Yo bastante inexperta y con mucha torpeza lo desvesti, pero su cinturón casi no me deja bajarle el pantalón y para mí muy grata sorpresa ese bulto era enorme, no había visto algo así, me arrodille y baje sus boxers, libero algo que para mí fue impresionante, era más grande que lo que había visto a la fecha y se me dificultaba meterlo en mi boca, seguía masturbando lo y sentía esas ganas de penetrarme y yo pensando como lo haría.
Decidí aclararlo y sentarme poco a poco, se sentía como si fuera mi primera vez, dolía pero quería más, suavemente iba entrando más y más y ya acostumbrada empecé a cabalgarlo. Sentir como estaba completamente llena y tocaba hasta mi último rincón, me besaba y me tocaba , eran demasiadas sensaciones, no podía parar y mis gemidos eran cada vez más fuertes , recorrimos esa cama de punta a punta . Y ya estaba disfrutando cada centímetro y su voz en mi oído diciéndome lo deliciosa que estaba, lo mucho que disfruta mis gemidos y mis súplicas por más . Ese primer orgasmo con esa delicia fue muy húmedo y sentirlo palpitar dentro de mi es algo tan rico. Su voz gimiendo hablando más profundo, más bajo es un afrodisíaco espectacular.
Con el nos hemos visto solo dos veces más y perdí contacto.
Y estos días recordando esa delicia que pude tener en mi espero que al recordarlo pueda volverlo a vivir y con un poco más de experiencia y más ganas de disfrutarla hasta la última gota.
PD: mi prima se despertó con tremendismo guayabo pero sin la menor idea de la faena que nos mandamos con el muchacho