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Hace varios años, siendo gerente de una empresa, necesitábamos contratar un apoyo en el área de diseño pero que fuera una persona recién graduada o estudiante de último semestre, pues era de apoyo.
Ingresaron varias hojas de vida pero por el book, no me terminaban de convencer. Atendí un amigo y se dió cuenta de la situación y me recomendó a una niña que había trabajado con él. Le pedí que me mandara el book a lo que él de inmediato la llamó y me lo hizo llegar al instante. Me gustó mucho su desempeño, estudiante de último semestre. Le pedí que le coordinara una entrevista, y ella podía inmediatamente. Llegó a la oficina a los 20 minutos estando aún mi amigo.
Aún recuerdo perfectamente ese momento; la anunció mi asistente e ingresó a la sala de juntas... hermosa! Legins negros revelando perfectamente las nalgas tonificadas, botas ajustadas a la rodilla, body negro ajustado que dejaba ver su abdomen plano y sus enormes y deliciosos senos de piel blanca casi asomando los pezones, y un chaleco de peluche o pelos marron, pelo rubio largo con ondas, ojos cafés y pómulos pronunciados. 13 años menor que yo.
A los 2 días estaba contratada. Y poco a poco empezaron las miradas, las sonrisas, las tocadas de manos intencionadas, y los besos andeniados, deliciosos.
Tenía yo un viaje de trabajo a una ciudad cercana pero organicé para que ella tuviera que ir también, y así fue. Después de la reunión nos fuimos a cenar y luego a un bar de rock en vivo que me encanta. Pedimos varios tragos hasta el punto que yo estaba prendido pero ella se pasó de tragos. Nos fuimos al Airbnb y cuando llegamos ella seguía con tragos de más, aún así nos empezamos a besar de la manera más desenfrenada y deliciosa, y nos fuimos quitando la ropa, pero al ver su estado preferí no tener sexo con ella, pero en un momento de excitación total, ella se vino a chorros sin ni siquiera penetrarla... bingo! Que delicia. Pero aun así no seguí adelante por su estado.
Ya en la oficina, a los 2 días, sin querer tocar mucho el tema, le dije que se alistara para ir a una reunión de trabajo, empaqué en mi maleta media botella de whisky, y salimos directo a un motel con jacuzzi en la habitación, sin preguntarle. Ella medio extrañada medio nerviosa pero sin refutar. Entramos, nos dimos besos como la vez pasada, nos quitamos la ropa y pasé mi lengua por todo su cuerpo, pasando por esos senos tan deliciosos sintiendo cómo se ponían duros esos pezones. Se le erizaba la piel mientras suavemente bajaba besando su abdomen y con mi lengua llegando alrededor de su clítoris y vagina demasiado mojada e introduciendo mi dedo pulgar mientras seguía bajando con mi lengua por sus piernas hasta llegar a sus tobillos, y descubrí uno de sus puntos débiles, la enloquecía que le lamiera y apretara los tobillos.
Aún sin penetrarla, pasamos al jacuzzi ya lleno, y ella se sumerge hasta el cuello y yo de pie le pongo mi verga en su boca y empieza a mamarla como si se la fueran a quitar, de las mejores de mi vida, mientras le acaricio las tetas deliciosas y la cojo fuerte del pelo. Luego de un buen rato la pongo de pie y mientras nos besamos la empiezo a masturbar y ella no para de gemir. Al rato la siento en el borde del jacuzzi y me abre las piernas hacia arriba y la empiezo a penetrar suave, despacio, con delicadeza sin perder la arrechera, y ella se empieza a venir a chorros y siento sus chorros calientes en mi pelvis y mi verga. Luego de un rato de hacerlo así, y de acariciarle los senos y besarle los tobillos y chuparle los dedos de los pies y ella casi gritando, la volteo en 4 el el borde y veo su culo y vagina abiertos invitándome a penetrarla hasta el fondo. Rozo la punta de mi verga por todo su culo y su vagina completamente mojada hasta que la penetro, ella grita de placer y más chorros y al poco tiempo me vengo adentro con mi verga hasta lo más profundo que podía, halando sus 2 brazos de espalda hacia mí con fuerza. Que momento más erótico!
Desgonzada, se gira para introducirse dentro del agua, yo hago lo mismo, y disfrutamos de los masajeadores mirándonos con picardía, satisfacción, y ganas de más.
Disculpen lo largo, pero era necesaria la introducción. Todavía faltan más relatos, pues duró 4 años y aún la pienso y la añoro.